Comba y García, Juan. Jerez de la Frontera (Cádiz), 30.XI.1852 – Madrid, 19.VI.1924. Pintor, reportero y dibujante.
Nacido en Jerez de la Frontera el 30 de noviembre de 1852, era hijo de Antonio Comba, propietario de un bazar en la calle Lancería, y de Socorro García.
Cuando el padre es nombrado corredor de comercio en La Habana, en 1856, se traslada a Cádiz con su madre. En 1862 empieza su formación en la Escuela Naval Militar de San Carlos, la isla de León (actual San Fernando). Dos años más tarde, con su padre ya en España, toda la familia se traslada a Madrid, donde comienza los estudios en la Escuela Especial de Pintura, Escultura y Grabado, dependiente de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Allí estudia, hasta 1873, bajo la tutela de profesores como Carlos Luis de Ribera, Federico de Madrazo y Carlos de Haes, y tiene por compañeros de estudios a los hermanos Germán y Daniel Zuloaga.
Ferviente admirador de Eduardo Rosales, éste lo admite como discípulo, el único reconocido como tal, en 1871. Antes del fallecimiento del pintor, es recomendado a Abelardo de Carlos, fundador y director de La Ilustración Española y Americana, donde comienza a publicar sus ilustraciones en marzo de 1872. Esa relación laboral se mantuvo hasta 1907, en que publicó su última información gráfica: la presentación oficial del príncipe de Asturias, primogénito de Alfonso XIII.
En 1880 contrae matrimonio con Teresa, hija del pintor Joaquín Sigüenza, y es introducido en los círculos próximos a la Casa Real española, lo que le lleva a convertirse en el informador gráfico de la misma. Acompaña a Alfonso XII a todos los viajes que éste realiza: Galicia, Asturias, Andalucía, Aragón, Cataluña, Badajoz y Portugal, así como en la gira que el monarca realiza por Centroeuropa. Asiste a la petición de mano de la infanta María de las Mercedes en Sevilla, así como a los actos fúnebres que tienen lugar al fallecimiento de ésta. Cuando Alfonso XII viaja a Arcachón para conocer a quien será su segunda esposa, Comba va en su escaso séquito con el encargo de hacer un retrato de la futura reina María Cristina.
Y, cuando el Rey fallece no sólo está al pie de la cama en el lecho mortuorio, sino que, por especial concesión de la Casa Real, se le permite asistir a las exequias del monarca, en El Escorial.
Para la elaboración de sus informaciones utiliza el grabado xilográfico partiendo de imágenes fotográficas, muchas tomadas por él mismo. A lo largo de su vida cubrió casi todos los grandes acontecimientos de la Restauración, como los atentados contra el Rey, la inauguración de la Exposición Universal de Barcelona, el asesinato de Cánovas o la explosión de Santander, donde no se limitó a elaborar información sobre los hechos, sino que ayudó a socorrer a las víctimas, lo que le valió ser distinguido con la Cruz del Mérito Naval, una de las muchas condecoraciones que recibió.
Cuando abandonó la actividad informativa, se dedicó a la docencia en el Conservatorio de Madrid, donde impartió clases de Indumentaria.
Hombre culto, sencillo y discreto, supo granjearse la amistad de quienes le conocieron, como el compositor Tomás Bretón, Tolosa Latour, el maestro Pradilla, Jacinto Benavente, María Guerrero, Fernando Díaz de Mendoza, el duque de Sesto, conde de Morphy, duque de Tamames y los propios miembros de la Casa Real española.
Fue socio fundador del Círculo de Bellas Artes, con el número 30, y miembro del Ateneo de Madrid, del movimiento escultista de España en los comienzos del mismo, de la Cruz Roja y patrono de la Sociedad Protectora de Niños, entre otras muchas instituciones altruistas. Frecuentaba las tertulias más importantes del momento, especialmente la de Benito Pérez Galdós, con quien mantuvo una estrecha amistad. Pintó los frescos que adornan el techo del palacio Arzobispal de Madrid y de la sala de visitas del actual Ministerio de Fomento, y realizó numerosos cuadros por encargo de los reyes.
Su obra gráfica informativa, compuesta por casi setecientas obras, de las cuales sólo son fotografías unas quince, así como los cuadros y los frescos pintados, suponen un testimonio gráfico de gran calidad informativa, razón por la cual ha sido calificado como cronista gráfico de la Restauración.
Falleció en su piso de la calle de la Princesa, número 14, el 19 de junio de 1924, a consecuencia de un cáncer de estómago.
Obras de ~: Obra gráfica informativa: La Ilustración Española y Americana, Madrid, 1872-1906.
Pintura: Señora desconocida, 1872; Idealismo y realidad, 1884; La escolta real formada en la Plaza de la Armería, 1895; La escolta real, 1895; Las Regiones Españolas, techo de la Sala de Visitas del Ministro, Ministerio de Hacienda, Madrid, 1896 (fresco); Tapices, muebles y objetos del estudio de Rosales, 1899; Boda de la infanta M.ª Teresa con el infante Fernando María de Baviera, 1906; La boda de Alfonso XIII, 1906; Recepción en el Palacio Real la noche de la boda de Alfonso XIII, 1906; El portal de la casa de Isabel Tintero, donde por primera vez se rindió culto a la Virgen de la Paloma, techo del Salón del Trono, palacio Arzobispal de Madrid, s. f. (fresco).
Bibl.: B. de Pantorba, Historia y crítica de las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes celebradas en España, Madrid, Alcor, 1948; P. Gómez Aparicio, Historia del periodismo español. De la Revolución de Septiembre al desastre colonial, Madrid, Editora Nacional, 1971; C. González y M. Martí, Pintores españoles en París, 1850-1900, Barcelona, Tusquets, 1996; J. M. Sánchez Vigil, La fotografía en España, de los orígenes al siglo xxi, Madrid, Espasa Calpe, 2001; M. Bobo Márquez, Análisis, catalogación e indización de la obra de Juan Comba y García, informador gráfico de “La Ilustración Española y Americana”, tesis doctoral, Sevilla, Universidad, 2002 (inéd.).
Miguel Bobo Márquez
