Pérez Conde, Gil. Portugal, p. t. s. XIII – s. m. s. XIII. Trovador.
Trovador portugués cuyo perfil biográfíco se muestra incierto. Las recientes propuestas de A. Resende de Oliveira sostienen que su apellido familiar se asocia en el Livro de Linhagens do Conde Don Pedro a una rama bastarda del linaje de los Sousa a la que podría haber pertenecido Martim Peres Conde (presbítero y canónigo de Coímbra, fallecido en 1242), que pudo haber sido hermano del trovador, así como otros individuos de nombre Pero Conde que figuran en las inquisitiones de 1220 y 1258. En cambio, C. Michaëlis de Vasconcelos —y con ella una buena parte de estudiosos— identifica al trovador con el aristócrata Gil Pérez Feijó mencionado en los libros de linajes portugueses y que fue tío del trovador Rodrigu’Eanes de Vasconcelos y cuñado del también poeta Johan Soarez Coelho. Como consecuencia del conflicto que enfrentó a Sancho II y su hermano Afonso III, Gil Pérez Conde, contrario a la deposición del primero, se exilió a Castilla, donde desde 1269 fue vasallo del rey Alfonso X y, con otros caballeros, participó en la campaña andaluza. Su presencia en la Corte castellana está testimoniada en 1286 como infanzón de Sancho IV, quien, como a los también trovadores Johan Vasquiz de Talaveira y Rodrigu‘Eanes Redondo, le otorga un subsidio de 2000 maravedís para que lo acompañase en su entrevista con el rey de Francia, Felipe IV el Hermoso.
Bajo su nombre se conservan dieciocho poemas en la sección final del Cancioneiro da Biblioteca Nacional de Lisboa (B 1515-1532). La mayor parte de sus textos ayudan a situarlo en la Corte de Alfonso X. Un buen número de ellos son, en efecto, escarnios políticos o personales que hacen referencia a acontecimientos y personajes relacionados con la guerra de Granada (B 1516, 1517, 1518, 1520, 1522, 1523, 1524); en ellos el trovador critica no sólo a los vasallos que tomaban parte en la contienda sino también al propio Monarca en la medida en que éste y aquéllos incumplían la reciprocidad exigida por las relaciones vasalláticas, poniendo así muy sutilmente en entredicho el poder centralizador del Monarca. También relacionan al trovador con la Corte alfonsí las cantigas B 1527 y B 1528, en las que Gil Pérez Conde dirige duros ataques contra Dios por haberle arrebatado a su dama y recluirla en un convento; el tema, que refleja una realidad bien documentada en la época, fue, en efecto, tratado por otros autores que desarrollaron su actividad en la Corte de Alfonso X (Pero Goterres, Pero Garcia Burgalês y Vasco Gil), por lo que, en opinión de V. Beltrán, todas esas composiciones forman un pequeño ciclo elaborado en el entorno de aquel Monarca. Y quizás ahí Gil Pérez Conde pudo haber escrito también la crítica a un juglar que carecía de los requisitos básicos para ejercer su profesión (B 1515), pues en tiempos de Alfonso X se sintió de manera especial la necesidad de establecer fronteras entre los distintos agentes de la actividad lírica (como prueban la Supplicatio de Guiraut Riquier y la correspondiente Declaratio de Alfonso X). Testimonios de su estancia en la Corte castellana son también los ataques contra personajes del entorno regio (B 1521, 1526, 1531), la cantiga moral Non é Amor en cas de Rei (B 1525), en la que denuncia el ambiente que se vivía en la Corte y la mala fortuna que él había tenido en ella, así como el escarnio Ben sabedes, senhor Rei (B 1532), dirigido, como sugiere V. Beltrán, contra Sancho IV (o su hijo Fernando IV), según indica la referencia a Toledo como lugar de coronación del Monarca al que se dirige el trovador (vv. 11-12). Exceptuado el texto Assy and’eu por serviço que fiz (B 1530) —una auténtica cantiga de amor, pese a incluirse en la sección de las cantigas de escarnio en el cancionero que la conserva—, el corpus de cantigas de Gil Pérez Conde portugués se completa con otras dos piezas, Mia senhor, já eu morrerei (B 1519) y Quer-mi a mi u)a dona mal (B 1529), que contienen elementos del género amoroso, pero parodian el universo del amor cortés y se destacan aún más en su cancionero por la destreza del trovador en el manejo de técnicas como el dobre y la palavra-perduda.
Obras de~: Los poemas de Gil Pérez Conde se conservan, precedidos de la correspondiente rúbrica atributiva, en el sector de las cantigas de escarnio del Cancioneiro da Biblioteca Nacional de Lisboa, si bien Assy and’eu por serviço que fiz es una cantiga de amor. Cancioneiro da Biblioteca Nacional (cód. 10991), reprod. facs. (introd. de L. F. Lindley Cintra), Lisboa, Biblioteca Nacional-Imprensa Nacional-Casa da Moeda, 1982, fols. 317r.-320v., n.os 1515-1532. Los textos se encuentran editados en C. Michaëlis de Vasconcelos, “Randglossen zum altportugiesischen Liederbuch. VI. Kriegslieder. Genetes. -Non ven al mayo!”, en Zeitschrift für Romanische Philologie, XXV (1901), págs. 285-321 [ahora en traducción portuguesa en Y. Frateschi Vieira et al., Glosas Marginais ao Cancioneiro Medieval Português de Carolina Michaëlis de Vasconcelos, Coimbra, Universidade de Santiago de Compostela-Universidade de Coimbra-Editora Unicamp, 2004, págs. 175-217 (en particular págs. 193-201, 203-207)]; M. Rodrigues Lapa, “Nótulas trovadorescas. I. Tres cantigas de Gil Peres Conde”, en Cuadernos de Estudios Gallegos, XXVII (1954), págs. 5-14 [incluido después en Miscelânea de Língua e Literatura Portuguesa Medieval, Coimbra, Coimbra Editora, 1982, págs. 263-272]; Cantigas d’escarnho e de mal dizer dos cancioneiros medievais galego-portugueses, Vigo-Lisboa, Ir Indo Edicións-Edições João Sa da Costa, 1995 (1.ª ed., 1965), págs. 110-119 [n.os 151-167]; C. P. Martínez Pereiro, “Nova proposta textual da cantiga B 1528 de Gil Perez Conde. Frustração amorosa e blasfémia”, en A. Aires Nascimento y C. Almeida Ribeiro (eds.), Literatura Medieval. Actas do IV Congresso da Associação Hispânica de Literatura Medieval (Lisboa, 1-5 Outubro 1991), vol. II, Lisboa, Cosmos, 1993, págs. 215-220; L. G. Videira Lopes, Cantigas de Escárnio e Maldizer dos Trovadores e Jograis Galegoportugueses, Lisboa, Editorial Estampa, 2002, págs. 153-170 [n.os 111-127].
Bibl.: C. Michaëlis de Vasconcelos, “Randglossen zum altportugiesischen Liederbuch. VI”, art. cit., 1901; Cancioneiro da Ajuda, vol. II, Lisboa, Imprensa Nacional-Casa da Moeda, 1990 (reimpr. de la ed. de Halle, 1904), págs. 543, 598 y 653; J. L. Couceiro, “Gil Perez Conde”, en Dicionário de Literatura medieval galega e portuguesa (s.v.), Lisboa, Caminho, 1993, págs. 295-296; A. Resende de Oliveira, Depois do espectáculo trovadoresco. A estrutura dos cancioneiros peninsulares e as recolhas dos séculos XIII e XIV, Lisboa, Colibri, 1994, págs. 350-351; V. Beltrán, “Tipos y temas trovadorescos. XI. La corte poética de Sancho IV”, en C. Alvar y J. M. Lucía Megías (eds.), Actas del Congreso Internacional “La Literatura en la época de Sancho IV” (Alcalá de Henares, 21-24 de febrero de 1994), Alcalá de Henares, Universidad, 1995, págs. 121-140 (en particular, págs. 131-132); A. Resende de Oliveira, Trobadores e xograres. Contexto histórico, Vigo, Xerais, 1995, págs. 135-136; V. Beltrán, “Pero Goterres y la retórica de la impiedad: Alfonso X, Pero Garcia Burgales, Gil Perez Conde y Vasco Gil”, en J. M. Lucía Megías (ed.), Actas del VI Congreso Internacional de la Asociación Hispánica de Literatura Medieval (Alcalá de Henares, 12-16 de septiembre de 1995), vol. I, Alcalá de Henares, Universidad de Alcalá de Henares, 1997, págs. 279-295; G. Tavani, Trovadores e jograis. Introduça)o à poesia medieval galego-portuguesa, Lisboa, Caminho, 2002, pág. 397; J. d’Assunça)o Barros, “Afrontando o rei através da poesia. Um estudo sobre as lutas de representaço)es entre os trovadores medievais-ibéricos dos séculos XIII e XIV”, en História e Perspectivas, Uberlândia, 34 (2006), págs. 49-82.
Gerardo Pérez Barcala