César, Julio Ramón de. España, p. m. s. xviii – ?, p.s. xix. Ingeniero.
Con motivo de la firma del Tratado de San Ildefonso (1 de octubre de 1777) entre España y Portugal, cuyo objeto era finiquitar el litigio fronterizo entre ambos dominios coloniales, la corona hispana comisionó a un grupo de demarcadores de límites que partió de Lisboa el 14 de noviembre de 1781, llegando a Buenos Aires en febrero del siguiente año.
Es probable que de César se haya unido a ellos en la citada ciudad, pues antes había trabajado en el Perú, por orden del virrey, Manuel de Amat, en la elaboración de los planos de la Casa de la Moneda (1770).
Una vez en la capital porteña (1780), realizó los planos de la ciudad, tarea encomendada por el virrey Juan José de Vértiz y Salcedo.
Ascendido a teniente coronel, el 3 de diciembre de 1783, en compañía de otros demarcadores, partió con destino a la capital de la provincia del Paraguay, travesía que duró 116 días. Entre 1784 y 1785 realizó el relevamiento de Asunción y confeccionó el primer plano conocido de la ciudad, tarea en la cual trabajó cinco meses. Al año siguiente, elaboró un segundo plano y dibujó un mapa del gran Chaco. Mientras dirigía la construcción de la fachada de la catedral asunceña, fue comisionado por el gobernador Pedro Melo de Portugal para inspeccionar las iglesias de San Blas y la de los ex jesuitas (21 de noviembre de 1786). Juntamente con su consorcio, el ingeniero Pedro Cerviño y los funcionarios José García Rodríguez de Francia y Antonio de Viana, realizaron la revisión de dichos templos que amenazaban una pronta ruina. Efectuada la verificación, de César recomendó el apuntalamiento de los edificios, hecho que permitió la seguridad de los mismos.
Hacia 1789, trabajó junto con otro demarcador, el teniente de navío Juan José de Aguirre, en la realización de varias obras, entre ellas la refacción del fuerte Borbón (1791-1792), tarea encomendada por el gobernador Joaquín de Alós y Brú. Hacia 1802 aún se encontraba en Asunción en compañía de su esposa y cuatro años más tarde se lo ubica en la provincia de Entre Ríos realizando el deslinde de las parroquias de Gualeyguaychú, Gualeguay, Paraná y Yapeyú.
Dejó escrito un diario en el cual dejó traslucir su aversión sobre el Paraguay. Antipatía que lo impulsó a falsear reiteradamente los sucesos. Sin embargo, de su fecundo trabajo, lamentablemente sólo se conservaron sus diseños de la iglesia de la Compañía, el proyecto de fachada de la capital y el plano de Asunción, habiéndose extraviado más de un centenar de láminas que ilustraban su minuciosa descripción de la fauna y flora de la región, elementos agrícolas, vestimentas y costumbres de los habitantes del Paraguay y de otros sitios visitados, a más de varios dibujos sobre diversas obras que constituirían, sin duda, el mejor testimonio gráfico del Paraguay colonial.
Fuentes y bibl.: Archivo Nacional de Asunción, Col. Río Blanco, cat. n.º 32; Secc. Historia, vol. 176, año 1799; Secc. Nueva Encuadernación, vol. 251, año 1799.
R. Lafuente Machain, La Asunción de antaño, Buenos Aires, 1942; G. Furlong, Arquitectos argentinos durante la dominación hispánica, Buenos Aires, Ediciones Huarpes, 1945; R. Gutiérrez, Evolución urbanística y arquitectónica del Paraguay.
1537-1911, Asunción, Editorial Comuneros, 1983; J. R. de César, Noticias del Paraguay, estud. prelim. de Beatriz Rodríguez Alcalá de González Oddone, Asunción, Unión Academique Internacionale, Academia Paraguaya de la Historia, 2002.
Alberto Duarte de Vargas