Doménech Valls, Rigoberto. Alcoy (Alicante), 15.XI.1870 – Zaragoza, 30.V.1954. Catedrático, teólogo, obispo de Mallorca, arzobispo de Zaragoza.
En 1882 ingresó en el Seminario Conciliar Central, de Valencia, donde cursó las cuatro facultades de Humanidades, Filosofía, Teología y Derecho Canónico hasta 1895. El 22 de diciembre de 1887, y tras brillantes oposiciones, fue elegido becario del Real Colegio-Seminario de Corpus Christi, fundado por san Juan de Ribera en el siglo xvi. En 1893 se doctoró en Sagrada Teología. El 19 de mayo de 1894 recibió la ordenación sacerdotal y en 1897 el doctorado en Derecho Canónico. Desde 1893 hasta 1897 desempeñó la cátedra de Teología Dogmática en el mencionado seminario y, al ser creada la Universidad Pontificia, se le confió una cátedra del primer curso en la Facultad de Teología. Hizo brillantes ejercicios en diversas oposiciones a canonjías en las catedrales de Valencia y Orihuela hasta que, en 1902, entró a formar parte del cabildo metropolitano valentino y fue nombrado decano del Colegio de Doctores de la Facultad de Derecho Canónico de la Universidad Pontificia.
El arzobispo Guisasola le designó en 1906 rector del Seminario Central y le confió otras delicadas misiones.
En 1910 fue nombrado examinador sinodal; en 1911, delegado episcopal en la Junta Diocesana de Caballeros de Valencia para el XXII Congreso Eucarístico Internacional de Madrid y consiliario eclesiástico de la Junta Diocesana de Señoras, y en 1914, director del secretariado diocesano de la obra de Entronización del Sagrado Corazón de Jesús en el Hogar.
El 4 de diciembre de 1916 fue nombrado obispo de Mallorca, donde desplegó intensa actividad pastoral durante nueve años fecundos en iniciativas y realizaciones, entre otras la canonización de la beata Catalina Tomás, efectuada en 1925 por Pío XI. El 18 de diciembre de 1924 fue preconizado arzobispo de Zaragoza, archidiócesis que gobernó hasta su muerte durante tres décadas difíciles, condicionadas por cuatro situaciones políticas completamente diversas: la dictadura del general Primo de Rivera, la Segunda República, la Guerra Civil y el régimen de Franco. Procuró mantener siempre relaciones respetuosas con las autoridades civiles y militares, a la vez que defendió los derechos de los católicos y los intereses de la Iglesia.
A partir de 1939 tuvo que realizar una gran tarea de reconstrucción material y espiritual de la archidiócesis cesaraugustana, pues la persecución religiosa republicana había provocado el asesinato de ochenta y un sacerdotes, así como la destrucción de numerosos templos, imágenes y enseres sagrados incendiados y profanados.
Durante su pontificado adquirió notable incremento la devoción a la Virgen del Pilar, con la celebración de congresos y asambleas marianas, entre ellos el Congreso Mariano Nacional. Celebró un sínodo diocesano, creó nuevas parroquias, construyó templos y el nuevo Seminario Metropolitano. Fue el primer presidente de la Comisión episcopal que promovió la Obra de Cooperación Sacerdotal Hispanoamericana, con el fin de enviar misioneros del clero diocesano a las diócesis del continente americano.
Obras de ~: Formación de la juventud, Zaragoza, 1927; Enseñanza religiosa, Zaragoza, 1928; Formación y apostolado de las Juventudes Católicas, Zaragoza, 1929; Educación e instrucción religiosa, Zaragoza, 1933; Daños causados a la Iglesia y remedios, Zaragoza, 1935; Vinculación de los fieles al cuerpo místico de Cristo, Zaragoza, 1936; Liberación de España y regeneración moral y religiosa, Zaragoza, 1939; El matrimonio cristiano y sus obligaciones, Zaragoza, 1940; Función educativa de los padres, Zaragoza, 1942; Funciones educativas de la Iglesia, Zaragoza, 1943; Los derechos de la Iglesia en la educación, Zaragoza, 1944; Educación católica, Zaragoza, 1945; La familia cristiana, Zaragoza, 1946; El XIV centenario de la Venida de la Virgen en Carne Mortal, Zaragoza, 1947; El apostolado entre los hombres de edad madura, Zaragoza, 1949; La vida cristiana y los medios de perseverancia, Zaragoza, 1950; El arraigo de la fe católica y la observancia de la moral cristiana, Zaragoza, 1951; La formación moral e intelectual completa de las juventudes. Las bases del apostolado y su enlace con la práctica, Zaragoza, 1952.
Bibl.: V. Cárcel Ortí, “Los rectores del Seminario Conciliar de Valencia (1790-1936)”, en Anales Valentinos, 11 (1985), págs. 111-146; Actas de las Conferencias de Metropolitanos Españoles (1921-1965), Madrid, Biblioteca de Autores Cristianos, 1994; “Nombramientos de obispos en España durante el pontificado de san Pío X (1903-1914)”, en Analecta Sacra Tarraconensia, 68 (1995), págs. 235-423; Z. Pieta, Hierarchia Catholica, vol. IX, Padua, Edizioni Messaggero Padova, 2002, pág. 237.
Vicente Carcel Ortï
