Ayuda

Ramón Margalef López

Biografía

Margalef López, Ramon. Barcelona, 16.V.1919 ‒ 23.V.2004. Investigador y profesor en el campo de la Ecología.

Nació en una familia de agricultores ricos de Capçanes (Priorat) arruinada por la filoxera y la crisis cerealista.

Ramón Margalef Adell, su padre, entró a trabajar en el Banco Hispanoamericano y se casó con Vicenta López, de Almudévar (Huesca). Ramon Margalef hijo hizo sus primeras letras en una escuela de frailes de la calle Trafalgar. Cuando tenía siete años, la familia se trasladó a una casita de Gracia de la calle Encarnación, con corral, algo de terreno que incluía frutales, algo de huerta y flores y un surtidor con una balsita. Ramon pasó a una escuela de jesuitas cercana y en el jardín de su casa observaba insectos y coleccionaba mariposas, aficiones que completaba en un solar abandonado de la calle Escorial y, más tarde, se hizo miembro del Centre Excursionista de Catalunya. Extremadamente hábil, montaba y desmontaba toda clase de aparatos. A los catorce años, le matricularon en una academia de estudios de profesor mercantil. Aprendió alemán y francés con un profesor particular y empezó a usar libros alemanes para determinar las especies que encontraba. Tenía diecisiete años al estallar la Guerra Civil. En febrero de 1938 fue llamado a filas junto con un compañero de aficiones naturalistas, Josep Maria Marcé. Destinados a la onceava división del quinto cuerpo de ejército, al mando de Enrique Líster, participaron en la Batalla del Ebro. Marcé murió luego, parece que fusilado por su propio bando. Margalef le dedicaría la primera especie que describió, Chloroclonium marcei, en 1944. Entre 1941 y 1943, fue de nuevo reclutado para cumplir el servicio militar por el nuevo régimen franquista. Cuando su madre murió de embolia, no le permitieron desplazarse para el entierro. La guerra marcó profundamente su pensamiento, entre el amor a la naturaleza y la desconfianza en la capacidad de las sociedades para resolver sus conflictos, y le impulsó a centrarse en su vocación.

Empezó a escribir resultados de sus observaciones y a encuadernarlos bajo las denominaciones de Bulletí o Publicacions de la Societat Catalana d’Estudis Biològics, sociedad de la que él era el único miembro. Su primera publicación formal no aparecería hasta 1943.

Se construyó él mismo un microscopio para observar pequeños organismos. Para ganarse la vida, entró en la Mutua General de Seguros, pero ya participó en la reconstrucción de la Institució Catalana d’Història Natural como secretario provisional, hizo excursiones y exploraciones espeleológicas y se relacionó con investigadores como el geólogo mosén Bataller, presidente de la Institució, el entomólogo Francesc Español, el histólogo Jaume Pujiula (jesuita) o los botánicos Antoni de Bolós, Pius Font i Quer (fundador del Institut Botànic de Barcelona) y Karl Faust (creador del jardín Marimurtra de Blanes). Algunos profesores, viendo sus posibilidades, le facilitaron terminar el bachillerato en dos años con dispensa de escolaridad y tuvo la máxima calificación en la reválida. En 1944, obtuvo una beca del Instituto de Biología Aplicada, que dirigía Francisco García del Cid y dejó la Mutua. Hizo la carrera con gran brillantez y premio extraordinario de licenciatura en 1949. Le encargaron montar el laboratorio de Blanes del nuevo Instituto de Investigaciones Pesqueras del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que dirigía García del Cid. Se enamoró de una compañera de curso, Maria Mir, mallorquina, visitó Mallorca a menudo y publicó trabajos sobre plancton e hidrobiología. Presentó su tesis doctoral, “Temperatura y morfología de los seres vivos”, en Madrid en 1951, y luego pasó a la sede de Barcelona del Instituto como investigador.

En 1952 contrajo matrimonio con Maria, con la que tendría dos hijas y dos hijos.

En el Instituto de Investigaciones Pesqueras, hoy Instituto de Ciencias del Mar, Margalef fue un generoso e incansable generador de ideas y proyectos.

Hizo campañas en el Mediterráneo y Atlántico, en Italia, Venezuela y Puerto Rico, en Mauritania y Senegal.

García del Cid murió en un accidente y Margalef, que tenía una oferta para trabajar en California, fue nombrado director pese a su resistencia (menor que la de su esposa a desplazarse a Estados Unidos), estableció relaciones con muchos centros norteamericanos y europeos e impulsó la revista Investigación Pesquera. El año 1966 dio un curso de gran impacto en la Universidad de Chicago. Se había convertido en el científico español más citado, por sus trabajos de teoría ecológica, principios de la dinámica de los ecosistemas, diversidad e información, aplicación de la termodinámica, estudios sobre afloramientos marinos, papel del hombre dentro de la biosfera, etc. El curso de Chicago daría lugar a un libro, Perspectives in Ecological Theory, publicado en 1968, que se tradujo al japonés. Su reputación internacional era enorme, pero odiaba las tareas administrativas y dejó la dirección.

El mismo año 1967, ganó la primera cátedra de Ecología de España en la Universidad de Barcelona (los demás candidatos se retiraron al presentarse él), y siguió en ella hasta jubilarse y pasar a profesor emérito en 1984. Hasta 1974 había alternado el trabajo en la Universidad y la dirección de investigaciones del Instituto. Nuevas norma sobre dedicación al CSIC le obligaron a centrarse exclusivamente en la Universidad. Allí dirigió un estudio fundamental sobre la Ecología Comparada de lagos y embalses españoles, creó el Instituto de Alta Montaña de Vielha y, en 1978-1980, con un proyecto cooperativo hispano- norteamericano codirigido con F. Bormann, de la Universidad de Yale, ayudó a lanzar la ecología terrestre en la Universidad Autónoma de Barcelona y la de Alicante.

En 1980, el Instituto Bedford de Oceanografía de Halifax (Canadá) le otorgó el primer premio A. G. Huntsman, considerado el Nobel del Mar. En 1984 recibió el premio Santiago Ramón y Cajal, en 1989 el premio italiano Italgas de ciencias ambientales, en 1990 el premio de la Fundació Catalana per a la Recerca, en 1990 el premio Humboldt de Alemania, en 1997 el premio Excellence in Ecology.

Recibió también las Medallas Príncipe Alberto del Instituto Oceanográfico de Mónaco y Naumann- Thienemann de la Sociedad Internacional de Limnología (1989). Fue comendador de la Orden de Alfonso X, doctor honoris causa de las Universidades de Laval (Québec), Aix-Marseille (Francia), Alicante e Instituto Químico de Sarriá y miembro de la Nacional Academy of Science de Estados Unidos (1985). Poco antes de su muerte recibió la Medalla de Oro del CSIC, que sólo poseían cuatro investigadores españoles. Cuando le comunicaron que el Premio Nacional de Medio Ambiente le sería otorgado el 5 de junio de 2004 dijo que para entonces ya habría muerto. Acertó. Falleció el 23 de mayo, debido a un cáncer intestinal. Su esposa y compañera constante murió ocho días después, de un ataque cardíaco. El legado científico de Ramon Margalef supera las cuatrocientas publicaciones, de las que reseñamos las más influyentes.

 

Obras de ~: Datos para la flora algológica de nuestras aguas dulces, Barcelona, Publicaciones del Instituto Botánico de Barcelona, 1944; “Limnosociología”, en Monografías de Ciencia moderna, 10 (1947); con M. Massutí, Introducción al estudio del plancton marino, Madrid, Patronato Juan de la Cierva, 1950; “La vida en las aguas dulces de Andorra”, en Monografías del Instituto de Estudios Pirenaicos, 69 (1952), págs. 1-107; Los crustáceos de las aguas continentales ibéricas, Madrid, Instituto Forestal de Investigaciones y Experiencias, 1953; “La teoría de la información en ecología”, en Memorias de la Real Academia de Artes y Ciencias de Barcelona, 32 (1957), págs. 373-449 (trad. al ingl. en General Systems, 3); “Modelos físicos simplificados de poblaciones de organismos”, en Memoria de la Academia de Ciencias y Artes de Barcelona, 34 (1962), págs. 83-146; “Sucesión in marine populations”, en Advancing Frontiers of Plant Sciences, 2 (1962), págs. 137-186; “On certain unifying principles in ecology”, en American Naturalist, 97 (1963), págs. 357-374; “Some concepts relative to the organization of plankton”, en Oceanography and Marine Biology Annual Review, 5 (1967), págs. 257-289; Perspectives in ecological theory, Chicago, University Press, 1967; “Diversity and stability: a practical proposal and a model of interdependence”, en Brookhaven Symposium of Biology, 22 (1970), págs. 25-37; “Ecological theory and prediction in the study of the interaction between man and the rest of the niosphere”, en H. Sioli (ed.), Ökologie und Lebensschutz in internationaler Sicht, Freiburg, Rombach, 1973, págs. 307-353; Ecología, Barcelona, Editorial Omega, 1974; “Diversity, stability and maturity in natural ecosystems”, en Van Dobben y Lowe-McConnel (eds.), Unifying concepts in ecology, The Hague, Junk, 1975, págs. 161-170; “General concepts of population dynamics and food links”, en O. Kinne (ed.), Marine ecology, London, Wiley, 1978, págs. 617-704; “Life-forms of phytoplankton as survival alternatives in an unstable environment”, en Oceanological Acta, 1 (1978), págs. 493-510; “The organization of space”, en Oikos, 33 (1979), págs. 152-159; La biosfera, entre la termodinámica y el juego, Barcelona, Editorial Omega, 1980; Ecología, Barcelona, Editorial Planeta, 1981; (coord.) Western Mediterranean, Oxford, Pergamon Press, 1985; Teoría de los sistemas ecológicos, Barcelona, Universidad, 1991; Oblik biosfery, Moscú, Academia de Ciencias de Rusia, 1992; Our Biosphere, Oldendorf/Luhe, Germany, Ecology Institute, 1997.

 

Bibl.: P. Cáceres, “Ramón Margalef, pionero de la Ecología en España”, en El Mundo, 25 de mayo de 2004; http://www.gencat.cat/premiramonmargalef/pdf/publicacions_cat.pdf;

http:// www.gencat.cat/premiramonmargalef/cas/biografia.htm.

 

Jaume Terradas