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Antonio Rivera Ramírez

Biografía

Rivera Ramírez, Antonio. El Ángel del Alcázar. Riaguas de San Bartolomé (Segovia), 26.II.1916 – Toledo, 20.XI.1936. Presidente de la Unión Diocesana de la Juventud de Acción Católica.

Segundo hijo del matrimonio, profundamente cristiano, formado por José Rivera Lema y Carmen Ramírez Grisolía, nació en Riaguas de San Bartolomé, localidad de la que era médico don José. En 1916 la familia se trasladó a Toledo donde un hermano de éste, Antonio Rivera Lema, era profesor de la Escuela de Artes. Antonio Rivera cursó los estudios de bachillerato en el Instituto de Toledo y la licenciatura en Derecho en la Universidad de Madrid. En 1931 se incorporó a la Federación de Estudiantes Católicos creando en Toledo la “Casa del Estudiante”. En febrero de 1932, el obispo auxiliar de Toledo, Feliciano Rocha Pizarro, le propuso la organización en la diócesis de las Juventudes de Acción Católica, y desde ese momento Antonio se entregó por completo a esta tarea, en estrecha colaboración con el consiliario, Antonio Gutiérrez Criado, un capellán de la Armada retirado por las leyes de la República. En 1933, el cardenal Gomá le nombró presidente de la Unión Diocesana de la Juventud de Acción Católica y le encomendó la organización en Toledo la IV Asamblea Nacional, que tuvo lugar en el mes de octubre, colaborando estrechamente con Manuel Aparici y Alfredo López. En marzo de 1934 participó en la peregrinación a Roma de la Juventud de Acción Católica y en el verano de 1935 en el Curso de Verano que la Junta Central organizó en Santander, así como en el III Congreso Nacional reunido en Valencia. Tras licenciarse en Derecho en 1935 comenzó a preparar las oposiciones a Registros, al tiempo que recorría la extensa diócesis primada. El 12 de julio de 1936 fue detenido en Guadalajara y tras declarar en comisaría fue puesto en libertad. Quizá este suceso influyó en su ánimo a la hora de determinar, sin el conocimiento de la familia, incorporarse a las fuerzas que se concentraban en la Academia de Infantería, tras escuchar por radio la lectura del bando de declaración del estado de guerra en Toledo el 21 de julio de 1936.

En el Alcázar fue destinado, en principio, a tareas de intendencia en el Museo Romero Ortiz, pero se ofreció voluntario para pasar a la defensa de la sección de tropa, una de las dependencias exteriores de la Academia, donde fue herido en el pecho en los primeros días de lucha. Desde el primer momento mantuvo contacto con otros defensores miembros de la Acción Católica, con los que celebraba Círculos de Estudio, y participó en los actos religiosos que diariamente se realizaban en el Alcázar, dirigidos por el catedrático don Andrés Marín, el comandante Martínez Simancas y el capitán Sanz de Diego.

El 18 de septiembre de 1936, tras la explosión de la mina, fue herido por una granada de mano, que le arrancó el brazo izquierdo, cuando combatía como sirviente de una ametralladora. Las muestras de valor y serenidad impresionaron a los que lo trataron en aquéllas circunstancias, incluido el coronel Moscardó. El 28 de septiembre, tras la liberación del Alcázar, fue trasladado en estado de extrema debilidad a la casa familiar, en la que recibió la visita del cardenal Gomá durante se breve estancia en Toledo el día 3 de octubre. Murió en la tarde del 20 de noviembre de 1936. Propuesto como modelo del Joven de Acción Católica en obras aparecidas poco después de su muerte, después de la guerra se incoó el proceso de beatificación, que tras completar la fase diocesana, fue remitido a Roma.

 

Bibl.: S. Beguiristain, Biografía de Antonio Rivera, héroe y “Ángel del Alcázar”, Burgos, Consejo Superior de la Juventud Masculina de Acción Católica, 1937; L. Moreno Nieto, El Ángel del Alcázar. Ensayo de biografía de Antonio Rivera Ramírez, pról. del cardenal I. Gomá, Toledo, Publicaciones del Consejo Superior de la Juventud de Acción Católica, 1940; ¿Un nuevo santo? Perfil biográfico de Antonio Rivera Ramírez, Toledo, Junta Pro-glorificación del Ángel del Alcázar, Editorial Católica Toledana, 1944; El “Ángel del Alcázar”, Madrid, Juventud de Acción Católica, 1945; VV. AA., Artículos para el proceso informativo de beatificación y canonización del siervo de Dios Antonio Rivera Ramírez, Toledo, Editorial Católica Toledana, 1962; J. M. de Córdoba, Un católico en la gran crisis de España (testimonio de vida de Antonio Rivera Ramírez, “Ángel del Alcázar”), Toledo, Diputación Provincial, 1964; A. Sáinz Pardo, “Rivera Ramírez, Antonio”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de la Historia Eclesiástica de España, vol. IIII, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Enrique Flórez, Madrid, 1973, pág. 2095; M. de Pablos Ramírez de Arellano, Antonio Rivera y su ambiente. Biografía de "El Ángel del Alcázar", Madrid, Hermandad Nacional Universitaria, 1987; J. F. Rivera Recio, La persecución religiosa en la diócesis de Toledo (1936-1939), 3.ª ed., Toledo, Instituto Teológico San Ildefonso, 1995, págs. 623-624; J. Díaz Rincón, Antonio Rivera Ramírez, apóstol y santo seglar, Toledo, Toledo, Jóvenes Acción Católica General, 2000.

 

José Carlos Vizuete Mendoza