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María Josefa Alhama Valera

Biografía

Alhama Valera, M.ª Josefa. Esperanza de Jesús. Santomera (Murcia), 29.IX.1893 – Collevalenza (Italia), 8.II.1983. Fundadora de las Congregaciones de Esclavas del Amor Misericordioso (EAM) e Hijos del Amor Misericordioso.

Nació el 29 de septiembre del año 1893 en Santomera, bello pueblo de la Huerta Murciana, en el seno de una familia humilde. Hija de José Antonio Alhama y de M.ª del Carmen Valera. Fue la mayor de nueve hermanos. A la edad de siete años fue a vivir a casa del entonces párroco, Manuel Aliaga. Sus hermanas Inés y María se encargaron de darle un poco de instrucción y cultura. Nunca frecuentó la escuela.

El ambiente en el que M.ª Josefa transcurrió su infancia y adolescencia propició en ella la formación en un profundo sentido religioso y el propósito de consagrarse a Dios. En el año 1914 decidió entrar en el convento de las Hijas del Calvario en Villena (Alicante). El 15 de agosto de 1916 emitió sus votos asumiendo el nombre de Esperanza de Jesús Agonizante.

Este instituto se dedicaba a la educación de niñas pobres y la vida del convento se caracterizaba por una intensa contemplación de la pasión de Cristo.

Con el apoyo del padre Juan Otero, CMF, “Las Hijas del Calvario” comenzaron a pensar en la posibilidad de unirse a las “Misioneras Claretianas”, congregación dedicada a la educación cristiana. El 19 de noviembre de 1921 la madre Esperanza hizo sus votos como Misionera Claretiana con el nombre de sor M.ª Esperanza de Santiago. Entre las Claretianas desempeñó diversos oficios: sacristana, portera, ecónoma, procuradora y educadora de niñas. Se dedicó a esta obra en cuerpo y alma, pero con el paso del tiempo y la ayuda del padre espiritual, entendió que Dios esperaba de ella una obra de más amplio horizonte. Se sintió llamada no tanto a proponer una reforma en el ámbito de las Misioneras Claretianas, sino a realizar la fundación de dos nuevas congregaciones: las Esclavas y los Hijos del Amor Misericordioso.

En mayo de 1929 escribió: “Entendí que el Buen Jesús quería se llevase a cabo la fundación de una Congregación titulada Esclavas del Amor Misericordioso para abrir colegios y educar en ellos huérfanos, pobres, hijos de familias numerosas y clases modestas de la sociedad. Además colegios para niños y niñas anormales, así como también asilos y Hospitales para toda clase de necesitados, retirando de estos colegios todo lo que pueda tener aspecto de asilos. Asimismo comprendí que en estos colegios los niños recibieran sólida educación y además aquellos que por su inteligencia fueran capaces, pudieran hacer estudios superiores [...] porque esto generalmente no está al alcance de los pobres”.

En Madrid, en un apartamento de la calle de Velázquez número 97, la noche de Navidad de 1930 dio comienzo, de forma privada, la nueva fundación de las Esclavas del Amor Misericordioso. El 14 de enero de 1931, madre Esperanza obtuvo la inscripción en el Registro Civil, con el nombre de Asociación de Esclavas del Amor Misericordioso.

En abril de 1931 inauguró el primer colegio en Madrid; a éste le siguieron numerosas fundaciones en otras partes de España, con el único fin de anunciar el Amor Misericordioso a través del ejercicio de la caridad.

En 1936, cuando comenzó la Guerra Civil, la Asociación contaba ya con nueve casas.

El 6 de Enero de 1935, la Asociación fue erigida como congregación de derecho diocesano. Desde este momento se llamará Congregación de Esclavas del Amor Misericordioso.

En mayo de 1936, la madre Esperanza junto a Pilar de Arratia, insigne benefactora de la congregación, fue a Roma y alquiló una casa en una zona muy pobre: la congregación empezó así a extenderse por Italia.

El 15 de agosto de 1951 fundó la Congregación de los Hijos del Amor Misericordioso, cuyo fin principal es promover la unión fraterna con los sacerdotes, siendo destinatarios y ministros de la misericordia de Dios.

“Entre las muchas obras de caridad a realizar a favor de toda la humanidad, la principal para vosotros es la unión con los Sacerdotes diocesanos. Unidos a ellos como hermanos realizaréis con entusiasmo y sólo por amor al Señor todas las otras obras.” En los años cincuenta, Madre Esperanza empezó a concretizar el proyecto que ya en mayo de 1949 había entendido era voluntad de Dios: la construcción de un santuario dedicado al Amor Misericordioso.

El santuario fue su obra definitiva; en este lugar ella fue flauta, como le gustaba definirse, y alma que se consumía por dar a conocer a todos los hombres que “Dios es un Padre que ama, perdona, olvida y no tiene en cuenta los pecados de sus hijos”.

Mientras la Congregación se extendía en diversas regiones italianas, en Fermo (Italia), el 11 de febrero de 1957 fundó un nuevo grupo de Esclavas del Amor Misericordioso llamado a insertarse en diversos ambientes de trabajo, sin ningún signo externo de consagración.

La madre Esperanza fijó su residencia en Collevalenza (Italia), y permaneció aquí hasta el día de su muerte, el 8 de febrero de 1983.

El 24 de abril de 1988 en la diócesis de Orvieto- Todi (Italia), tuvo lugar la apertura del proceso diocesano de beatificación.

El 23 de abril del año 2002, en la sala Clementina, el papa Juan Pablo II presidió la lectura del decreto de reconocimiento de las virtudes heroicas de la madre Esperanza. Desde ese momento se convirtió en venerable.

 

Obras de ~: Diario, 1927-1962 [en Archivo Congregaciones Amor Misericordioso de Collevalenza (ACAMC)]; Constituciones para la Congregación de Esclavas del Amor Misericordioso, 1936 (ACAMC); La Pasión, 1943 (ACAMC); Libro de Constituciones para los Hijos del Amor Misericordioso, s. f., ACAMC.

 

Fuentes y bibl.: Archivo Congregaciones Amor Misericordioso, Libro de Constituciones para los Hijos del Amor Misericordioso, Collevalenza (Perugia), 1954. M.ª J. Alhama Valera, Diario, 1927-1962, en Archivo Congregaciones Amor Misericordioso, Collevalenza (Perugia).

 

María del Carmen Ventura Navas, EAM