Lasaña Mathe, Juan. Ferrol (La Coruña), 21.IX.1778 – Madrid, 19.XII.1852. Militar y político.
Estrechamente vinculado a la Armada tanto por su ciudad natal (capital de departamento marítimo) como por la dedicación familiar, sin embargo, Juan Lasaña, manteniendo la tradición militar, se decantó por la Infantería, ingresando el 1 de 1795 como cadete en las Guardias Españolas. Dentro de este Cuerpo Real, en que realizó toda su carrera en el Ejército, participó inmediatamente en la guerra contra la República Francesa, después en 1801 contra Portugal y desde 1808 en la de la Independencia, descollando en la misma en los sitios de Zaragoza, en el bloqueo de Pamplona, en la defensa de la Isla de León, en las batallas de Albuera y Chiclana, así como en las acciones finales en la frontera vasca para expulsión y derrota de los franceses, por lo que recibió las correspondientes condecoraciones y ascensos, ostentando en 1814 el empleo de capitán. Entonces, a pesar de contar por su antigüedad desde finales del año inmediato con la Cruz y Placa de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, se vio relegado por ser su adhesión a la Constitución de Cádiz opuesta al absolutismo restablecido por Fernando VII con la paz. Por el contrario, con la recuperación en 1820 del anterior modelo liberal, se abrió en la carrera de Juan Lasaña la faceta civil-administrativa, con los nombramientos de jefe político de las provincias de Segovia, en abril de 1822, y de Madrid, en abril del siguiente año.
Con todo, al poco se vio desplazado por el retorno de nuevo a la Monarquía tradicional, y la implacable represión que le acompañó le obligó a exiliarse a Burdeos, uno de los núcleos galos de la emigración liberal española. Regresó a finales de 1832 con la tímida amnistía decretada tras los sucesos de La Granja, pero no fue reincorporado al Ejército como comandante militar hasta mayo de 1834, una vez iniciada, ya bajo la Regencia de María Cristina, la senda de la Monarquía constitucional con el Estatuto Real. Sin embargo, considerando que seguía postergado en la milicia por el moderantismo gobernante, finalmente, en junio de 1836 la abandonó. Cerró la página militar de su carrera, pero a continuación, con el dominio de los correligionarios progresistas después del éxito de la movilización del verano que recuperó provisionalmente el Código político gaditano, se abrió la estrictamente política. Inmediatamente, en septiembre, fue elegido alcalde de Madrid y, en octubre, por La Coruña diputado de las Cortes que, al siguiente verano, aprobaron una nueva Carta Magna más transaccional. Bajo su imperio, Juan Lasaña, manteniéndose durante la etapa de gobierno de los conservadores como diputado por su provincia natal, afirmó posiciones con el nuevo tiempo progresista liderado por Baldomero Espartero tras la revolución estival de 1840: en octubre fue nombrado jefe político de la provincia de Madrid, en enero de 1841 alcalde de esta villa-capital y en febrero senador por Lugo. Ya, a finales de 1843, con la férrea consolidación de los moderados en el poder al inicio del reinado efectivo de Isabel II, concluyó su actividad pública, pasando a disfrutar la jubilación asignada de 40.000 reales anuales.
Fuentes y bibl.: Archivo del Senado, exps. personales, HIS-0242-02; Archivo del Congreso de los Diputados, Serie documentación electoral, 13 n.º 24, 14 n.º 33, 16 n.º 5.
P. Janke, Mendizábal y la instauración de la Monarquía constitucional en España (1790-1853), Madrid, Siglo XXI, 1974; A. Gil Novales, Diccionario biográfico del trienio liberal, Madrid, Ediciones del El Museo Universal, 1991, pág. 361.
Javier Pérez Núñez
