Fernández Temiño, Pedro. Puente de Valdivielso (Burgos), p. m. s. xvi – Ávila, 13.VIII.1590. Consejero de Inquisición y obispo de Ávila.
En agosto de 1552 ingresó en el Colegio Mayor de Oviedo de la ciudad de Salamanca, donde se licenció en Derecho canónico. Tras la obtención de un canonicato en la iglesia de León, entró a servir en el Santo Oficio como inquisidor en el tribunal de Calahorra.
Vinculado a Diego de Espinosa, inquisidor general, fue enviado a Roma para seguir el proceso contra Carranza en 1567 e informar desde allí de los avatares de la causa a su protector. En 1569 y 1570, respectivamente, rechazó la prelacía de Cuzco y la mitra de Agrigento, argumentando que deseaba ocupar un cargo en la Corte hispana, lo que había de lograr finalmente en 1571, cuando fue nombrado consejero de Inquisición, a pesar de que la provisión no fue efectiva hasta julio de 1572. Por este tiempo, fue también nombrado canónigo de la Iglesia de Toledo y, junto a Diego de Simancas, se ocupó de la gobernación interina del reino de Nápoles, tras la marcha del cardenal Granvela a Roma.
Deseoso de retornar a la Península, cosa que no logró hasta el fin del proceso a Carranza en 1576, su buena relación con el secretario de la Inquisición, Jerónimo Zurita, le facilitó el entendimiento con el nuevo inquisidor general, Gaspar de Quiroga, entre otras cosas para que se le asignara su salario de consejero y se respetara su antigüedad frente a otros consejeros provistos con posterioridad a él. Vuelto a Castilla, juró su cargo de consejero y se alineó con el “partido papista”, colaborando activamente según las directrices de Quiroga en los asuntos de la Inquisición.
El posterior ascenso del “partido castellanista” trajo a la secretaría de la institución a Mateo Vázquez en 1581 y tuvo como consecuencia el alejamiento de la Corte de Quiroga y que sus protegidos fueran relegados.
Fernández Temiño fue nombrado así obispo de Ávila el 11 de noviembre de 1581, en sustitución de Sancho Busto de Villegas. Allí, sus intentos de poner en práctica los presupuestos de la reforma tridentina en el obispado le acarrearon conflictivas relaciones con el cabildo de la catedral. Falleció en la capital abulense en agosto de 1590.
Fuentes y bibl.: Archivo Histórico Nacional, Inquisición, lib. 1232, fol. 63r., y lib. 1338, fol. 3r.
J. Martín Carramolino, Historia de Ávila, su provincia y obispado, vols. I y II, Madrid, Don Juan Aguado, 1873, pág. 396 y pág. 324, respect.; J. L. González Novalín, El Inquisidor General Fernando de Valdés (1483-1568), vol. I, Oviedo, Universidad de Oviedo, 1969-1971, págs. 167 y 176; J. Martínez Millán y T. Sánchez Rivilla, “El Consejo de Inquisición (1483-1700)”, en Hispania Sacra, vol. XXXVI, n.º 73 (1984), pág. 122; A. M.ª Carabias Torres, “Catálogo de colegiales del Colegio Mayor de Oviedo (siglo xvi)”, en Studia Histórica, Historia Moderna, vol. III, n.º 3 (1985), pág. 82; J. Martínez Millán, “Grupos de poder en la corte durante el reinado de Felipe II: la facción ebolista, 1554-1573”, en J. Martínez Millán (ed.), Instituciones y elites de poder en la Monarquía Hispana durante el siglo xvi, Madrid, Ediciones de la Universidad Autónoma, 1992, pág. 189; H. Pizarro Llorente, “Pedro Fernández Temiño”, en J. Martínez Millán y C. J. de Carlos Morales (dirs.), Felipe II (1527-1598). La configuración de la Monarquía Hispana, Valladolid, Junta de Castilla y León, 1998, págs. 374-375.
Alejandro López Álvarez