Barra de la Juelva, Francisco Javier. Madrid, 1764 – II.1841. Ingeniero de Marina, ingeniero de Caminos y director de la Escuela de Caminos y Canales.
De padres napolitanos, venidos posiblemente en el séquito de Carlos III, hacia 1781 ingresó en la Real Compañía de Guardias Marinas y permaneció como ingeniero de Marina hasta 1790 en que pasó al servicio de Hacienda. En 1798, siendo teniente de fragata e ingeniero extraordinario de la Armada, fue agregado a Juan López de Peñalver, para la impresión del catálogo de máquinas del Real Gabinete. El 25 de julio de 1799, al crearse la Inspección general de Caminos y Canales, fue nombrado comisario, junto con Larramendi y Martín, a las órdenes del inspector, conde Guzmán.
Tuvo su primer trabajo en la carretera de Aragón, donde estudió el paso de la divisoria entre el Tajo y el Ebro, y fue destinado después a Santander, donde dirigió la carretera de Reinosa, teniendo como subalterno a Julián Rodríguez, a partir de 1805. Allí debió de conocer a su mujer, María Josefa Gutiérrez, y casarse, pues, en 1808, nació en Guarnizo su hijo homónimo.
Se conocen mal sus peripecias durante la Guerra de la Independencia, aunque hay dos datos que permiten conjeturar que estuvo a las órdenes del gobierno afrancesado, posiblemente en Madrid. Uno es su solicitud para imprimir un Prontuario de monedas francesas, que no consta llegara a publicarse. El segundo es el proyecto de cuerpo de ingenieros civiles realizado en 1810 por José María de Lanz, en que figuraba como ingeniero de sección. Tras la guerra debió de pasar por algún proceso de purificación; en cualquier caso, en octubre de 1816 estaba en activo y redactó un proyecto para la reedificación del arco arruinado en el puente de Almaraz, sobre el río Tajo.
Durante el trienio constitucional, al reabrirse la Escuela de Caminos y Canales, en 1821, fue nombrado director. Permaneció al frente del centro hasta su cierre, al término del trienio. Durante los años siguientes continuó trabajando en la casi desmantelada Inspección de Caminos y consta que apoyó y colocó a algunos de sus alumnos que, como milicianos nacionales, habían sido impurificados.
Durante la denominada “década ominosa” realizó dos trabajos de importancia. En 1826 escribió un libro sobre pavimentos, que tiene el mérito de ser la primera obra publicada en español sobre la materia, aunque sus ideas sobre los firmes “a la romana” resultaban ya anticuadas en la época. Realizó después un ensayo sobre trazado de canales y unas observaciones sobre el abastecimiento de aguas a Madrid, que le valieron el encargo del ayuntamiento para efectuar el proyecto de traída de las aguas. En abril de 1830 presentó un trabajo en el que proponía un acueducto desde el río Guadalix y otro con toma de agua en el Manzanares; se imprimió lujosamente, pero el proyecto no llegó a realizarse.
Tras la muerte de Fernando VII, Barra fue inspector general y miembro de la Junta Consultiva de Caminos, Canales y Puertos, aunque siempre a las órdenes de Larramendi, con quien mantuvo una fuerte rivalidad. Finalmente, tras la jubilación de éste, en 1840, pasó a ser director general, hasta su fallecimiento en febrero del año siguiente. Su hijo, que siguió sus mismos pasos, presidió la Junta Consultiva entre 1866 y 1873.
Obras de ~: Memoria sobre la construcción del pavimento o firme de los caminos, Madrid, 1826 (reed. Madrid, 2001); Ensayo sobre un nuevo método geodésico para hacer en el terreno y representar en el papel los proyectos de canales, Madrid, Imprenta de Miguel de Burgos, 1828; Observaciones sobre el abastecimiento de aguas a Madrid y el modo de aumentarlas, Madrid, Imprenta de Miguel de Burgos, 1828; Proyecto y memoria sobre la conducción de aguas a Madrid, Madrid, Imprenta Real, 1832; P. S. Girard, Comparación entre los caminos ordinarios, los caminos de hierro y los canales de navegación, trad. del francés y anotaciones de ~, Madrid, 1833.
Bibl.: F. Sáenz Ridruejo, Ingenieros de Caminos del siglo XIX, Madrid, Editorial A. C., 1990; C. Domínguez López y F. Sáenz Ridruejo, José Agustín de Larramendi: primer ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, Bilbao, Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos del País Vasco, 1999; E. López Moreno y A. Zaragoza Ramírez, “Estudio preliminar”, en F. J. Barra, Memoria sobre la construcción del pavimento o firme de los caminos, op. cit., 2001.
Fernando Sáenz Ridruejo