Gallé, Jean. Lieja (Bélgica), 1580-1585 – ¿Lieja (Bélgica)?, 1635 pos. Matemático e ingeniero militar al servicio de la Monarquía Hispánica.
Era hijo de Guillaume Gallé, conocido como le Montois, y de Elisabeth de Beyne. Su padre trabajaba en el metal, la ferretería, el comercio y posiblemente en la fabricación de armas. Jean se casó hacia 1615 con María de Salme, con quien tendría ocho hijos.
La primera obra de Jean Gallé fue un libro de matemáticas, Nouvelle építomé d'arithmétique, publicado en Lieja en 1616 y reeditado en París en 1635, evidenciando así su dedicación a la formación científica. Posteriormente fue técnico de minas, ingeniero hidráulico y fortificador, activo entre 1624 y 1633. En 1624 daba su opinión sobre la construcción de un muro de fortificación en Lieja, que modificaba el curso del Mosa. En 1626, informó sobre el mal estado del Pont des Arches.
Entre 1626 y 1628, trabajó para España, al ser nombrado director o inspector de las fortalezas de los Países Bajos por el archiduque Alberto. Al respecto, en Bruselas opinó sobre los proyectos de navegabilidad del Demer y el Geer, así como parte del enlace Mosa-Escaut, proyectado en 1626 por el marqués de Spínola, enlace que invadía el territorio del principado de Lieja. Se trataba de volver a excavar estos dos ríos, para hacerlos navegables. Este proyecto fue defendido, entre otros, por Wenceslas Cobergher. La infanta Isabel envió a Gallé con tres ingenieros a reconocer los lugares susceptibles de hacerse navegables. El 22 de julio de 1627, Gallé presentó un presupuesto para el canal Meuse-Escaut. El mismo año participó como experto en las negociaciones con los habitantes de Lieja. Como recompensa por su trabajo recibió en 1629 la excepcional suma de 12.000 libras del tesoro de los Países Bajos.
Con anterioridad, en 1628, el obispo de Osnabrück, aliado del príncipe-obispo de Lieja, le pidió su opinión sobre las minas de plata y plomo y los manantiales de agua salada en Westfalia. Gallé era superintendente de la excavación de minerales: oro, plata, plata, alumbre, cobre, peltre, plomo, calamina, sal y otros existentes por todo el país y el obispado de Lieja. También reconoció los afluentes del Rin en la margen derecha, para hacerlos navegables.
En 1629 fortificó Osnabrück y en 1632 Deutz. Al año siguiente, fue citado como testigo por el Consejo de Magistrados de Lieja, en el marco de una investigación sobre un fuerte construido en 1625 en Chenée. Por último, François Blondel, en su libro L’art de jetter les bombes, dedicó dos capítulos de su tratado de artillería a las tablas de cálculo del alcance de los cañones propuestas por Gallé, ingeniero del archiduque Alberto y del marqués de Spínola. Estos cálculos podrían habérselos proporcionado a Gallé otro ingeniero, Michel Coignet. Hacia 1635, se pierden la pista del ingeniero de Lieja, que también se había ocupado de la mecánica musical con la construcción de órganos (en 1626 y 1633).
Obras de ~: Nouvelle épitomé d’arithmétique, Lieja, 1616 (reed., París, 1635).
Bibl.: P. Bragard, Dictionnaire biographique des ingénieurs des fortifications: Pays-Bas espagnol, principauté de Liège, Franche-Comté, 1504-1713, Namur, Les Amis de la Citadelle de Namur, 2011; J. M. Muñoz Corbalán, “Los ingenieros flamencos en el Ejército español”, en Presencia de ingenieros militares extranjeros en la milicia española, Revista Internacional de Historia Militar, 97 (2019), págs. 91-170.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño
