López Ruiz, Pedro. Jerez de la Frontera (Cádiz), 1811 – 5.IV.1878. Bodeguero y alcalde de Jerez.
El nombre de este jerezano ha quedado escrito en la historia local por su relevante papel en la vida política y económica de su ciudad. En 1843, a la muerte de su padre, un hacendado montañés dedicado a la exportación de vinos llamado Pedro López de Villegas, él y su hermano Juan Antonio se hicieron cargo del negocio familiar, la firma Pedro López Villegas & Cía., que llegó a exportar al extranjero en un solo año la cantidad de 14.500 arrobas de vino. Apasionado por el arte, era propietario de la mejor galería de pinturas de la ciudad, en la que se podían encontrar obras de Rivera, Zurbarán, Alonso Cano y otros famosos pintores. Estuvo casado con una inglesa llamada Elisa Courtney, veinticuatro años menor que él y con quien no tuvo descendencia.
En 1854 tras el pronunciamiento de O’Donell, fue alcalde segundo de la ciudad. En 1868 tuvo un protagonismo decisivo en la revolución conocida por La Gloriosa, como miembro de la Junta Revolucionaria de Jerez en su calidad de presidente del Partido Progresista. Fue alcalde de la ciudad en 1869, señalándose por su valor y energía en los sucesos acaecidos dicho año en la ciudad. En 1870 fue elegido diputado, volviendo a repetir como alcalde en 1874. Bajo su mandato fueron muchas e importantes las obras que se realizaron. Formó parte de la junta que impulsó la terminación de la traída de aguas desde los manantiales de Tempul. El 16 de julio de 1869, como presidente de la corporación municipal, inauguró los nuevos depósitos situados en el cerro de Picadueñas y de la fuente conmemorativa construida en plaza del Arenal. Este proyecto, dirigido por el ingeniero Ángel Mayo e iniciado ocho años antes siendo alcalde Rafael Rivero de la Tixera, logró abastecer de agua potable a los jerezanos durante todo el siglo venidero. Fue decisiva también su participación en el proyecto de la línea ferroviaria Jerez-Trocadero, el primer ferrocarril de Andalucía y tercero de España.
A su fallecimiento, ocurrido el 5 de abril de 1878, la corporación municipal tomó el acuerdo de colocar una lápida en el salón de sesiones y dar su nombre a una calle cercana al mercado central de abastos.
Bibl.: E. Fedriani Fuentes, Jerezanos insignes, Jerez, Gráficas San Luis, 1969; D. Caro Cancela, Burguesía y jornaleros 1868-1874, Jerez, Colección Ensayo, Caja de Ahorros de Jerez, CAJ, 1990; I. Ruiz de Villegas, Montañeses en Jerez, Jerez, Eje Editorial, 1999.
Antonio Mariscal Trujillo
