Ascoz Cabañero, Mariano. Barrachina (Teruel), 3.III.1898 – Zaragoza, 18.IX.1970. Militar y caballero laureado de San Fernando.
Ingresó en el Ejército en 1917. Combatió durante muchos años en la zona del Protectorado, distinguiéndose en numerosas acciones de guerra.
Al iniciarse el 3 de septiembre de 1925, la presión del enemigo en el frente de Gorgues-Kudia Tahar- Nator-Ben Karrich, el blocao Nator n.º 3 del sector Vázquez-Nator, guarnecido por cinco cabos y diecisiete soldados al mando del sargento Ascoz, fue atacado con fuego de fusil a las dos de la mañana por numeroso enemigo, que fue rechazado, sosteniendo su guarnición un intenso combate, recrudecido a las pocas horas por el fuego de cañón, cayendo dos proyectiles dentro del blocao, por lo que dispuso que la fuerza saliera de él y se situara fuera de la alambrada, en la que se continuó la lucha hasta que al anochecer, por haber disminuido la intensidad del fuego, volvió la guarnición al puesto, dedicándose durante la noche a reparar los numerosos desperfectos con los escasos medios de que se disponía.
Al amanecer el día 4, el enemigo reanudó el ataque con mayor intensidad, intimidando a la rendición del puesto, y en vista del decidido propósito de defenderlo se solicitaron refuerzos de la posición del Nator principal debido a la escasez de municiones y tener siete heridos y cuatro enfermos, siéndole enviados nueve hombres, transcurriendo la noche con continuos ataques del enemigo. En los combates de este día resultó herido por tiro de fusil y casco de metralla en la mano derecha y en la pierna y costado del mismo lado.
En la madrugada del día 5, el enemigo intensificó sus ataques con fuego de fusil y cañón, pero los valientes defensores consiguieron alejarlo, empleando las granadas de mano de que disponían, pero, agotadas éstas, y con pocas municiones de fusil, con once muertos y nueve heridos, entre ellos Mariano Ascoz, que en este combate sufrió nuevas heridas en distintas partes del cuerpo y en el pómulo y ojo izquierdo, con pérdida de la visión, pudo el enemigo acercarse nuevamente al puesto y quitar la alambrada de un frente, por lo que, considerando materialmente imposible continuar la defensa, ordenó la evacuación, siendo el último en abandonarla junto con un cabo y un soldado, intensamente perseguidos por los disparos del enemigo, hasta que fueron recogidos por la guarnición de un blocao próximo.
Tras recuperarse de sus heridas, pasó destinado al Regimiento de las Órdenes Militares, en el que en 1926 fue recompensado con la Cruz al Mérito Militar de plata por su destacada actuación en campaña.
Encontrándose sirviendo con el empleo de suboficial en el Regimiento del Infante, en Zaragoza, por Real Orden de 18 de enero de 1929 le fue concedida la Cruz Laureada de San Fernando, que el 27 de febrero siguiente le fue impuesta con todos los honores por el capitán general de la Región Militar. En ese mismo año ingresó en la Escala de Reserva con el empleo de alférez.
Al llegar la República, Mariano Ascoz se retiró del Ejército, concediéndosele el empleo de capitán.
En 1939 reingresó en la escala complementaria con el mencionado empleo y antigüedad de marzo de 1937, siendo ascendido en 1943 a comandante de dicha escala y agregado más tarde al Batallón de Cazadores de Montaña de Talavera, pasando destinado en 1950 al Patronato de Huérfanos de la 5.ª Región Militar, manteniéndose en este destino hasta que en 1956 pasó a la situación de disponible en la 5.ª Región Militar, en la que fue nombrado teniente coronel al siguiente año.
A su muerte fue ascendido a coronel por ser caballero laureado. Estuvo casado con Trinidad Corbatón Cabañero.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar, secc. 1.ª, leg. A-2692.
J. L. Isabel Sánchez, Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando. Infantería, t. I, Madrid, Ministerio de Defensa, 2001.
José Luis Isabel Sánchez