Villegas Gómez, Juan José. Cóbreces (Cantabria), 28.II.1815 – 23.II.1890. Militar.
Fueron sus padres don Gregorio Villegas y doña Francisca Gómez. En 1833 entró en el ejército carlista, en el que alcanzó el empleo de capitán. Un año después se pasó al ejército isabelino en clase de soldado, combatiendo a sus antiguos compañeros con gran valentía y destacando en multitud de combates.
En agosto de 1838 fue destinado por el general Espartero como ayudante del general Castañeda y con el empleo de teniente de la Compañía de Caballería de Francos de Cantabria. Al año siguiente se le dio el mando de la Compañía de Salvaguardias de las Merindades de Castilla la Vieja, con la que en el mes de septiembre ganó el grado de teniente de Milicias.
En 1839 le fue concedida la Cruz de San Fernando de 1ª clase por la acción de Ampuero (Santander), el 2 de enero, en marzo fue declarado teniente de Milicias Provinciales, en mayo se le otorgó el grado de capitán de Milicias por su intervención en la toma de los fuertes de Ramales y Guardamino y en junio el empleo de capitán de Milicias. Seguidamente fue encargado de la pacificación de la zona del Alto Ebro y antes de finalizar el año se le destinó a la Columna del brigadier Zurbano.
En febrero de 1840 pasó al Ejército de Aragón, con destino en la Escuadra de Flanqueadores de la Rioja Alavesa, y a las órdenes de Espartero combatió en el fuerte de Segura, Castellote, Pitarque, Beceite, Gandesa y Morella, pasando a Cataluña en el mes de mayo en persecución de la facción de Cabrera hasta que se le hizo refugiarse en Francia.
Los años siguientes guarneció las Provincias Vascongadas, Navarra y Burgos, destinado entre 1841 y 1843 en el Regimiento Provincial de Santander. En mayo de 1840 obtuvo el grado de comandante de Milicias y en el mes de diciembre siguiente fue declarado de Infantería.
En agosto de 1843 fue ascendido a segundo comandante y puesto de reemplazo en la plaza de Santander, donde al año siguiente fue detenido y conducido a Logroño, como consecuencia de la muerte de Zurbano.
Permaneció de reemplazo hasta que en 1853 fue colocado en el Batallón de Cazadores de África, en el que en mayo de 1854 se le concedió el empleo de primer comandante, volviendo a quedar de reemplazo hasta que en octubre pasó a servir en el Regimiento de Gerona, del que en diciembre del año siguiente se le trasladó al Provincial de Santander.
En agosto de 1856 volvió a quedar de reemplazo, desempeñando este año y el siguiente el cargo de vocal de las Comisiones Permanentes de Estadística de Grandas de Salime y de Cangas de Onís (Oviedo). En febrero de 1858 pasó al Provincial de Monforte y dos meses después al Regimiento de León, en el que en noviembre de 1862 fue ascendido a teniente coronel y destinado al Regimiento de Gerona, del que, en diciembre de 1865, tras su ascenso a coronel, pasó a mandar el de África, seguidamente la 1ª Media Brigada de Provinciales y a continuación el Regimiento del Rey, en el que se mantuvo hasta que en enero de 1868 le fue expedido el retiro a petición propia.
Participó activamente en el levantamiento de septiembre de 1868, poniéndose al frente del movimiento revolucionario que estalló en Santander y prendiendo al gobernador militar de la plaza. En el mes de octubre volvió al servicio activo con el empleo de brigadier y fue nombrado gobernador militar de Santander y plaza de Santoña, pasando en abril de 1871 a ejercer el mismo cargo en Zamora y en agosto en Toledo, pero su mal estado de salud le obligó a dimitir al mes siguiente.
En agosto de 1872 fue nombrado segundo cabo de Andalucía y gobernador militar de Cádiz, un mes después se le concedió el empleo de mariscal de campo, en marzo del año siguiente fue nombrado capitán general de Andalucía y en abril de 1874 de Burgos, cesando en este cargo tres meses después.
Llamado a Somorrostro por el marqués del Duero, general en jefe del Ejército del Norte, tras los combates de los días 25 a 27 de marzo de 1874 le asesoró sobre la forma de flanquear el campo atrincherado, marchando a continuación a Santander para asegurar las comunicaciones del Ejército y reclutar fuerzas, con las que persiguió y neutralizó las gavillas que habían invadido la provincia, de la que seguidamente pasó a la de Burgos, que también consiguió liberar de los carlistas. Tras la muerte del general en jefe consiguió recuperar el fuerte de Ramales. Continuó combatiendo durante la tercera guerra civil al mando de la 1ª División del 3er Cuerpo, por lo que en noviembre de 1875 fue recompensado con el ascenso a teniente general por méritos de guerra y en marzo del año siguiente se le dieron las gracias por el valor, pericia e inteligencia demostrados en las operaciones llevadas a cabo al frente de su división.
Entre 1876 y 1882 se mantuvo en situación de cuartel, siendo en febrero de dicho último año nombrado consejero del Consejo Supremo de Guerra y Marina, cargo del que dimitió medio año más tarde. En noviembre de 1883 se le confió la Capitanía General de las Provincias Vascongadas, cesando en febrero de 1885 y pasando un mes después a la situación de cuartel. En marzo de 1885 pasó a la Sección de Reserva del Estado Mayor del Ejército
Poseía las Grandes Cruces de San Hermenegildo (1872) y al Mérito Militar con distintivo rojo (1868), y dos Cruces de San Fernando de 1ª clase.
El general Villegas ha sido uno de los escasos militares que consiguieron por su valor ascender desde el empleo soldado al de teniente general.
Fuentes y bibl.: Gaceta de Madrid; Hemeroteca Nacional; Escalafones del Arma de Infantería; Archivo General Militar de Segovia, expediente personal.
P. A. de Villegas, Héroe olvidado, Santander, 1964; J. L. Isabel Sánchez, Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando. Infantería, t. II, Madrid, Ministerio de Defensa, 2001.
José Luis Isabel Sánchez
