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José Marín-Baldo Caquía

Biografía

Marín-Baldo Caquia, José. Murcia, 10.VI.1828 – 28.I.1891. Arquitecto.

De personalidad polifacética, se expresó a través del dibujo, la pintura o la literatura, al mismo tiempo que en la arquitectura. Su itinerario profesional refleja su espíritu inquieto; sus obras se reparten por Andalucía oriental y Murcia; viajó en repetidas ocasiones a París; participó en exposiciones y congresos, siendo reconocido por la elite cultural madrileña. Sus intereses incluyeron desde la teoría de la arquitectura a su dimensión social o la conservación del patrimonio.

Sus trabajos se pueden considerar de un eclecticismo romántico en el que el interés por el pasado está teñido de un nacionalismo y costumbrismo utópicos.

Era hijo de Salvador Marín Baldo, varias veces alcalde de la ciudad de Murcia. Fue alumno de la recién creada Escuela de Arquitectura de Madrid. Tras obtener el título de arquitecto en 1853, amplió estudios en París. En Murcia realizó sus primeros trabajos. Tras el incendio de la capilla mayor de la catedral en 1854, diseñó un retablo renacentista, actualmente en el lateral de la epístola. Realizó también algunos edificios de viviendas.

En 1859 inició su carrera administrativa. Durante una década ocupó el cargo de arquitecto provincial de Almería; allí intervino en la renovación arquitectónica de la ciudad, realizó el trazado de una de sus vías más significativas, el paseo del Príncipe D. Alfonso, y construyó viviendas tanto para la burguesía como para la clase obrera, tipología por la que se interesó a lo largo de su trayectoria profesional. En 1866 expuso el diseño de un megalómano monumento a Colón que le daría una gran proyección tanto en España como en el extranjero. El complejo arquitectónico —que se pretendía emplazar en el ensanche madrileño— integraba un programa de fuerte contenido simbólico acerca de las dimensiones de la epopeya colombina y su trascendencia histórica en un mundo de progreso. La reina Isabel II subvencionó la maqueta que, realizada por el arquitecto junto al escultor Bellver y al pintor Valdivieso, fue presentada con éxito a la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1866. Una década más tarde, el proyecto recibió la Medalla de Oro de la Exposición Universal de Filadelfia.

En 1869, se instaló de nuevo en Murcia como arquitecto provincial e inició su etapa más prolífica desde el punto de vista arquitectónico. Así, en 1873 realizó, entre otras obras, el cementerio de Jumilla y la torre de la iglesia de la Asunción en Cieza, ambas de un eclecticismo en el que predominan rasgos medievalizantes.

En 1879, con motivo de la inundación que asoló Murcia, se implicó en unas serie de actuaciones solidarias que se plantearon desde Madrid, diseñando barracas sobre zancos —a modo de palafitos— para evitar que las riadas destruyeran las viviendas campesinas.

Renovados sus vínculos con la capital, al año siguiente, fue nombrado arquitecto de Hacienda.

En esta etapa madrileña desarrolló su vocación literaria, publicando una serie de novelas costumbristas y una curiosa obra en la que, desde la ficción, realiza un ensayo de arquitectura: Lo que dijo Juan de Herrera.

Llevó a cabo también algunas incursiones en el campo de la arquitectura efímera —carroza de la Prensa en el centenario de Calderón— y en el diseño de interiores. En 1884, tras el seísmo de Alhama de Granada, participó en la reconstrucción de esta población y en la de Güevéjar. En sus últimos años residió en Murcia, donde desde 1887 ocupó el cargo de arquitecto del Ayuntamiento.

 

Obras de ~: Retablo de las Reliquias de la catedral, Murcia, 1854; Casa de Lope Gisbert, Murcia, 1857; Casa de Fernando Roda, Almería, 1864; Vivienda en la calle Marín, Almería, 1865; Proyecto de monumento a Colón, Madrid, 1866; Vivienda en la calle Lope de Vega, Almería, 1868; Cementerio de Santa Catalina, Jumilla (Murcia), 1873; Torre de la iglesia de la Asunción, Cieza (Murcia), 1873; Matadero, Yecla (Murcia); Proyectos de monumentos a Diego Saavedra Fajardo y al Cardenal Belluga, Murcia, 1875 y 1876; Proyecto de barracas sobre zancos, Madrid, 1879; Diseño de viviendas modestas, Alhama de Granada; Trazado de nueva población, Gëvéjar (Granada), 1884; Proyecto de capilla del cementerio de Nuestro Padre Jesús, Murcia, 1888.

Escritos: Proyecto de una torre para la iglesia parroquial de Cieza, Murcia, Tipografía Centro Editorial, 1873; Proyecto de un monumento a la gloria de Cristóbal Colón y de España por el descubrimiento del Nuevo Mundo: memoria facultativa, Madrid, Est. Tipográficos de M. Minuesa, 1876; “La Inundación: cuadro dramático dedicado por los poetas al socorro de las víctimas de las inundaciones en las provincias de Levante”, en VV. AA., Libro de la Caridad, Madrid, Imprenta de Enrique Rubiños, 1879; La Barraca en cuadros de costumbres murcianas, Murcia, Imprenta El Diario, 1879; “Fuensantica. Episodio novelesco de costumbres murcianas”, en Semanario Murciano, 160-177 (1881); Lo que dijo Juan de Herrera. Cuento original, Madrid, Est. Tipográfico de G. Juste, 1882; “Enseñanza práctica”, en Revista de la Sociedad Central de Arquitectos (RSCA), IX (1882); “Casas para jornaleros”, en Anales de la Construcción y de la Industria, 7 (1882); “El criterio artístico”, en RSCA, X (1884); “Ruinas del convento de S. Francisco de Ávila”, en RSCA, X (1884); El día de Todos los Santos, Madrid, Imprenta y Litografía Universal, s. f.

 

Bibl.: J. Martínez Tornel, “Nota necrológica”, en El Diario de Murcia, 29 de enero de 1891, pág. 1; A. Baquero Almansa, Los profesores de las Bellas Artes Murcianos, Murcia, Imprenta Sucesores de Nogués, 1913, págs. 412-418; A. E. Pérez Sánchez et al., Tierras de España. Murcia, Madrid, Fundación Juan March, 1975, pág. 305; F. J. Pérez Rojas, “Arquitectura y Urbanismo”, en VV. AA., Historia de la Región Murciana, vol. VIII, Murcia, Mediterráneo, 1980, págs. 195 y 200-203; D. Nicolás Gómez, Arquitectura y arquitectos del siglo XIX en Murcia, Murcia, Ayuntamiento y Colegio Oficial de Arquitectos, 1992, págs. 141-145, 204 y 217; E. A. Villanueva Muñoz, “José Marín-Baldo: facetas artísticas de un arquitecto decimonónico”, en Cuadernos de Arte de la Universidad de Granada, 35 (2004), págs. 109-124; A. Moreno Atance, Cementerios murcianos. Arte y arquitectura, Madrid, Universidad Complutense, 2005, págs. 486-496.

 

Ana Moreno Atance