Díaz Benito, Vicente. Toledo, 1713 – Madrid, 10.XI.1776. Mercader, fabricante de tejidos de seda.
Procedía de una familia de Castroviejo, diócesis de Calahorra (La Rioja), con carácter de hijosdalgo de sangre, aunque su padre, Francisco Díaz Benito, y su abuelo, ya eran naturales de Toledo. Su madre, también toledana, se llamó Ana María del Castillo. Vicente se casó en Madrid el 8 de febrero de 1746 con Josefa Moreno Bote, de diecinueve años (él contaba treinta y tres), en la parroquia de San Sebastián. Tuvieron cuatro hijos.
Fue un arquetipo de fabricante “protoindustrial”. Destacó por su importancia y poderío. Fue el mercader- fabricante más fuerte económicamente y el que más telares mantuvo en producción en el siglo xviii (el más alto número lo llegó a alcanzar en 1766, con ochenta y un telares de ancho y de 400 a 456 de angosto), los cuales tenía no sólo en Toledo, sino en los pueblos del contorno de la capital. Actuaba de la forma típica de los mercaderes de escritorio: por un lado, tenía sus propios telares repartidos por distintos barrios y entre diferentes maestros u oficiales que trabajaban a su costa; por otro, tenía fábrica propia con telares instalados y a los que acudían a trabajar maestros y oficiales a los que abonaba un jornal; por otra parte, proporcionaba telares, seda y dinero a laborantes independientes con los que contrataba las labores que les pedía y con los que posteriormente ajustaba cuentas, y en otros casos les prestaba dinero, para que labrasen por su cuenta; el préstamo le era devuelto en plazos o con géneros.
Fue uno de los fundadores de la Compañía de Comercio y Fábricas de Toledo (10 de febrero de 1748), junto a otros mercaderes de escritorio y fabricantes de telas de seda y con la ayuda inestimable de Bernardo de Rojas y Contreras, superintendente de Fábricas de Toledo y subdelegado de la Junta de Comercio desde el 15 de junio de 1747. En la reunión previa para la formación de la compañía, de 22 del diciembre de 1747, se le dio poder para que tramitara en la Corte todos los documentos y diera los pasos necesarios para su establecimiento.
Su importancia llegó a ser tal, que en 1755 logró que Fernando VI le concediera un privilegio real con las mismas exenciones y gracias que a la Real Compañía de Comercio y Fábrica de Toledo, así como unas ordenanzas particulares de producción. Todo esto le trajo grandes complicaciones con el gremio del Arte Mayor de la Seda de Toledo, el cual elevó multitud de quejas y recursos porque se veía perjudicado por tales concesiones, y denuncias contra él por parte de los veedores.
Díaz Benito consiguió que Carlos III le concediera el título de “hijodalgo de sangre”, para él, sus hijos y descendientes, con fecha 27 de agosto de 1771, título nobiliario, con derecho a escudo, que ya habían poseído sus ascendientes en Castroviejo.
Fue enterrado, con el hábito de Nuestra Señora del Carmen, en el convento de Jesús Nazareno (trinitarios descalzos), de Madrid.
Bibl.: E. Larruga y Boneta, Memorias políticas y económicas sobre los frutos, comercio, fábricas y minas de España, con inclusión de los reales decretos, órdenes, cédulas, aranceles y ordenanzas expedidas para su gobierno y fomento, Madrid, Imprenta de Benito Cano, 1787-1800, 45 vols.; A. P. Villanueva, Los ornamentos Sagrados en España, Barcelona, Editorial Labor, 1935, págs. 278-283; M.ª J. Martín-Peñato Lázaro, Fábrica toledana de ornamentos sagrados de Miguel Gregorio Molero, Toledo, Caja de Ahorro Provincial, 1980; M. García Ruipérez, La Real Compañía de Comercio y Fábricas de Toledo, Toledo, Caja de Ahorro, 1986; C. García Colorado, Bordados y Bordadores de Toledo. Siglos XVI-XX, Madrid, Editorial Universidad Complutense, col. Tesis Doctorales, n.º 69/89, 1989, págs. 198-201; A. Santos Vaquero, “Vicente Díaz Benito: el mercader-fabricante sedero más poderoso de Toledo en el siglo xviii”, en Anales Toledanos, XXXVI (1998), págs. 115- 131; La industria textil sedera de Toledo en el siglo XVIII, tesis doctoral, Madrid, Universidad Nacional de Educación a Distancia, 1999 (inéd.); L. F. Peñalver Ramos, La Real Fábrica de Tejidos de Seda, Oro y Plata de Talavera de la Reina, Talavera de la Reina, Ayuntamiento, 2000.
Ángel Santos Vaquero
