Caldera Rebolledo, Juan. Cáceres, 1897 – 1946. Pintor, cartelista y profesor.
Estudió en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, donde recibió clases de los maestros Pla, Muñoz Degrain, José Moreno Carbonero y Enrique Simonet, del que se consideró discípulo directo.
En 1918 obtuvo la Primera Medalla en la Exposición Regional de Arte celebrada en Badajoz. En la Exposición del Ateneo de Badajoz de 1921 obtuvo Medalla de Primera Clase por su obra Jueves Santo (1919). Participó en la Exposición Nacional de Bellas Artes del año 1924 con dos obras; no obtuvo galardón, pero la crítica fue muy favorable a su obra La huevera (1920), que recoge otra escena costumbrista cual es la venta ambulante de huevos de una anciana y su nieta por las calles de Malpartida en Cáceres. También en 1924 participó en la Exposición Regional Extremeña de Arte con cinco obras. Se presentó a la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1926 con la obra de gran formato El mercado de Plasencia; no obtuvo premio, sino una bolsa de viaje. Esta misma obra fue expuesta en la Exposición de Bellas Artes de Sevilla de 1927.
Después de la decepción sufrida en la última Exposición Nacional no volvió a pintar hasta 1941. Durante este largo período de tiempo participó en los concursos de carteles que convocaba el Ayuntamiento de Cáceres para la Feria de mayo, obteniendo el Primer Premio en los años 1930 y 1944.
Desde 1925, fecha en la que fue nombrado profesor ayudante de Dibujo del Instituto de Enseñanza Media de Cáceres, se dedicó a la docencia. Continuó su labor docente en el colegio de San Francisco a partir de 1931, en que obtuvo el nombramiento de profesor de Dibujo; en 1932 pasó a ejercer la docencia en la Escuela de Magisterio de la misma ciudad y, en 1940, figuraba como profesor de Dibujo Artístico en la Escuela de Trabajo de Cáceres. Fue maestro, entre otros artistas, de Juan José Narbón.
Además de sus obras de corte claramente costumbrista (lo más característico de su producción), practicó también el retrato de la clase media cacereña, el paisaje y el cartelismo. Destacó en el campo de la publicidad: creó una agencia y realizó proyectos para prensa, radio y cine; también desarrolló proyectos de escaparatismo.
La pintura de Caldera, practicada en diferentes técnicas, representa en la provincia de Cáceres lo más floreciente del realismo y del costumbrismo extremeño de la época, practicado con rigor académico y con mayor moderación que en la provincia de Badajoz. Sus personajes son los del pueblo y las sencillas escenas recogen costumbres y asuntos cotidianos, que, a veces, recuerdan la pintura de Eugenio Hermoso, pero que son obras de gran colorido, un tanto afectadas de estatismo y algunas escenas de cierto planismo.
Obras de ~: Jueves Santo, 1919; Rincón de Cáceres, 1919; La huevera, 1920; El mercado de Plasencia; Mantillas y Escena campestre, s. f.
Bibl.: B. de Pantorba, Historia y crítica de las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes en España, Madrid, Jesús Ramón García-Rama, 1980; J. Guerrero Ramos, El pintor Juan Caldera, Cáceres, Institución Cultural El Brocense, 1983; M.ª del P. Lozano Bartoli et al., Plástica extremeña, Badajoz, Caja de Badajoz, 1990; M. A. Paz, J. L. Morales y Marín y W. Rincón García (dirs.), Diccionario de pintores y escultores españoles del siglo xx, t. 3, Madrid, Forum Artis, 1994; V. Méndez Hernán, “La pintura extremeña: costumbrismo y regionalismo como señas de identidad en 1898”, en Revista de Estudios Extremeños, t. LV, n.º I (1999).
Román Hernández Nieves
