Beobide Cendoya, Juan Manuel. Azpeitia (Guipúzcoa), 16.V.1900 – Urnieta (Guipúzcoa), 9.VIII.1987. Fundador de salesianos (SDB) en Guipúzcoa.
Nació en Azpeitia (Guipúzcoa) el 16 de mayo de 1900, y fue bautizado al día siguiente en la misma pila que san Ignacio de Loyola en la iglesia parroquial de la villa. Fue el undécimo y último hijo del matrimonio formado por Juan José Beobide Echaniz, de Zumaya, y Josefa Ignacia Cendoya Querejeta, de Azpeitia.
Los años de su infancia corresponden a los del ascenso socialista, después de su primer congreso celebrado en 1888, y a los de afirmación católica sostenida por otros tantos congresos a partir de 1889. Por su parte, el panorama de la Iglesia española se había ensombrecido con la división integrista (1888), que llegó a afectar a amplios sectores españoles, siendo Azpeitia uno de los condensadores y motores más afianzados.
El golpe de espada integrista del valle del Urola suponía poner a Guipúzcoa al borde del catolicismo más en punta de lanza de toda España.
Juan Manuel hizo su primera comunión en Azpeitia en 1909 y en 1911 decidió hacerse salesiano, después de un estudiado forcejeo por parte de sus hermanos religiosos para llevárselo a la Orden de cada uno: Ignacio María, a la de los padres lateranenses de Oñate, y Ricardo, a los salesianos. Al final, desde muy pequeño, vencía Ricardo, que le venía contando las maravillas de san Juan Bosco. El 25 de septiembre de 1918 emitía su primera profesión y el 17 de diciembre de 1927 le ordenaba de sacerdote el obispo de Madrid-Alcalá, Eijo e Garay, después de efectuar sus estudios de teología en Salesianos- Carabanchel y de haber trabajado durante sus años de maestro en Salesianos-La Habana primero y después en Salesianos-La Víbora, también en Cuba.
Sin perder piezas por el camino —como no fuera la de la salud, siempre en él delicada—, dirigió Salesianos- La Coruña durante los años de la Guerra Civil y Salesianos-Estrecho, en Madrid, en la primera posguerra, en esa llamada Era Azul, proceso de autoconstrucción, a pesar de tanta inseguridad, pobreza y contratiempos.
Pero el padre Beobide, que se había ido forjando a sí mismo “como un arma” (Neruda) para sobrevivirse, fue enviado a San Sebastián, en octubre de 1951, a fin de iniciar los primeros contactos para las posibles fundaciones salesianas en Guipúzcoa y el afianzamiento de las presencias vascas.
Maquillado de experiencia, Beobide se alojó en casa de los Zaragüeta, principales cooperadores y prohombres de la obra salesiana, y en agosto de 1953 abría la Obra Social Virgen del Coro, en la cuesta de Aldaconea, de la Caja de Ahorros Municipal, de donde sería rector y capellán durante treinta años; después, en 1955, en Zuazo de Cuartango (Álava) lograba abrir un seminario menor para unos doscientos seminaristas; en 1964, aunque entre obras sin acabar, se daba inicio al centro Salesianos-Urnieta (Guipúzcoa), de reconocido influjo en toda la zona como escuela profesional. Pero Beobide era el patriarca delgado, la alegría esbelta de una acción social prometeica y prometedora, prometeico él mismo, y convertía el caserío Pake-Leku de Urnieta en Casa de Ejercicios en 1978, construía el Grupo Don Bosco con trescientas viviendas sociales en Intxaurrondo, de San Sebastián, inaugurado ya antes una parroquia de María Auxiliadora en 1971 y un colegio parroquial, de lámina popular y obrera. La cosa es que Beobide no paraba y quiso dar más prestigios de tiempo, en su regazo paterno, a lo que había nacido para los chicos de las clases populares en Salesianos- Deusto, Salesianos-Baracaldo, Salesianos-Cruces, Salesianos- Rentería-Pasajes, con edad y porvenir y pasó a fundar un seminario mayor o noviciado, que consolidara los recursos humanos de la nueva provincia salesiana de Cantabria. Desde 1962 hasta 1965 pateó Carranza de la mano de Polin Santisteban, y Vergara, de la Fundación Balzola y Segura (Guipúzcoa), bajo los cuidados de Cesáreo Elgarresta y Luis Alustiza. Hasta tuvo que ver en la fundación de las salesianas en Alegría de Oria (Guipúzcoa).
Desde bien pequeño, Beobide, camaleónico de alma, llegó a confundirse con lo que creía y a sentir lo que vivía y decía. En cualquier caso, fue para los salesianos y sus obras en el País Vasco lo que Ramón Zábalo para Salesianos-Madrid o Pedro Ricaldone para Salesianos- Sevilla. Falleció en Urnieta el 9 de agosto de 1987.
Bibl.: Aita Beobide Juan Manuel (1900-1987), Carta edificante, Urnieta (Guipúzcoa), 9 de agosto de 1987.
Francisco Rodríguez de Coro, SDB
