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Úrsula de Cristo

Biografía

Úrsula de Cristo. ?, s. xvi – Monasterio de la Asunción (Toledo), 24.III.1605. Monja cisterciense (OCist.), reformadora, fundadora del Convento de la Anunciación.

Aunque se desconozcan muchos datos personales sobre esta monja, sin embargo, los conocidos sobran para considerarla como personalidad de interés de la Orden del Císter y de la Iglesia española por haber sido una de las principales propulsoras de la reforma “recolecta” llevada a cabo en el Císter femenino español.

A fines del siglo xvi, en el Císter femenino español surgió un fenómeno similar al que hacía más de un siglo se había dado entre los monjes, al echar éstos los cimientos de la Congregación de Castilla, también las religiosas deseaban entrar por un camino de reforma.

En 1593, algunas monjas del Monasterio leonés de Gradefes mostraron deseos de secundar a los padres benedictinos de San Claudio de León, que habían abrazado una vida más estrecha, llamada “recolecta”. El prior, fray Jerónimo de Ulloa, se interesó por dichas religiosas y trató a fondo el asunto con Catalina de Castilla, monja de Las Huelgas de Burgos, que había sido abadesa de Gradefes. Ésta comunicó los planes a la abadesa de Las Huelgas, Juana de Ayala —de cuya filiación dependían las religiosas que intentaban la reforma—. Mientras se daban los primeros pasos buscando un grupo de religiosas comprometidas, se fijaron en Úrsula de Cristo, monja de San Bernardo de Burgos, la cual se ofreció para integrarse a las pioneras de la reforma.

El 21 de noviembre de 1594 fue la fecha cumbre en los anales de la Recolección, por haberse comprometido ese día las veintidós religiosas a entrar por el camino estrecho de la reforma, aunque pronto desistiría la mitad de ellas. Entre las que perseveraron firmes en el camino emprendido estaba Úrsula de la Cruz. Y cuando finalizó el trienio abacial de sor Catalina de Castilla, los votos de todo el capítulo se volcaron sobre ella, elevándola a la dignidad abacial el 18 de enero de 1597. Transcurridos los tres años de gobierno cesó en el cargo, y le sucedió Francisca de San Bernardo el trienio 1600-1603, y al terminar ésta, de nuevo volvieron las religiosas a acordarse de Úrsula de Cristo, eligiéndola para un nuevo trienio; pero no lo terminó, sino que a mitad del mismo se ofreció a llevar a cabo la primera fundación salida de la reforma que ella misma había promovido, la Asunción de Toledo, iniciada el 18 de enero de 1605. Dícese que al llegar a la ciudad fueron tantas las dificultades surgidas, tan tenaz la oposición de algunas personas para impedirlo, que tardaron cerca de dos meses en poderse instalar en el nuevo monasterio, ocupado antes por religiosos carmelitas.

Cuando se vieron vencidas las principales dificultades para el nuevo monasterio, acaeció la muerte de la santa fundadora. Dícese que al día siguiente de la fiesta de San Benito, 21 de marzo, en que se había dado a sor Úrsula la posesión del monasterio, y de haber sido nombrada abadesa, cayó enferma de manera inesperada, arrebatándole la muerte antes de una semana. El tumbo de Santa Ana de Valladolid recoge su memoria con este breve panegírico, resumen de su vid: “Era la Madre Ursula de Cristo una persona de gran virtud muy puntual en el cumplimiento de las cosas de la Religión, Regla y Constituciones y en todas las cosas mujer de mucha prudencia y gobierno, así para lo espiritual como temporal”.

Puede considerársele como cofundadora de la Recolección, no sólo por haber cooperado como la primera a su establecimiento y propagación, sino también por haber sido la que ordenó que se ratificase la profesión para más afianzar la perseverancia de la nueva observancia, acto que se verificó en el Monasterio de Santa Ana de Valladolid, en presencia de fray Gaspar de Úbeda, de escribano y de testigos, el día 16 de febrero de 1597, al mes solamente de haber sido elegida abadesa. Dejó gran fama de santidad en Toledo por el modo que tuvo y como se hubo en las ocasiones de dificultades que se le ofrecieron antes de comenzar y desde que llegaron a la ciudad.

 

Fuentes y bibl.: Archivo del Monasterio de Santa Ana de Valladolid, Tumbo del mismo monasterio, fols. 35-36.

D. Yáñez, “Fundación de Ntra. Sra. de la Asunción de Toledo”, en Cistercium IX (1957), págs. 21-22; “R. M. Ursula de Cristo, abadesa de Santa Ana de Valladolid y fundadora de Nuestra Señora de la Asunción de Toledo”, en Cistercium, X (1958), págs. 220-22l; El monasterio cisterciense de San Bernardo de Burgos, Editado por el Monasterio de San Bernardo, Burgos, Monte Carmelo, 1999, pág. 119.

 

Francisco R. de Pascual Rubio, OCist.