Mella, Juan de. Zamora, p. s. xv – Roma (Italia), 13.X.1467. Cardenal, obispo de Zamora y de Sigüenza.
Juan de Mella era natural de Zamora. Su padre, Fernando de Mella, fue notario de número de la ciudad y actuaba también como notario de la curia episcopal.
Juan se formó en el Colegio de San Bartolomé de Salamanca, donde obtuvo el título de doctor en Cánones y ejerció la docencia como catedrático. Eugenio IV lo nombró auditor de la Rota y obispo de Zamora el 6 de abril de 1440, aunque nunca residió en la diócesis.
El papa Celestino III lo promovió al cardenalato el 17 de diciembre de 1456, pero siguió manteniendo la sede en Zamora, según los datos proporcionados por la Biografía Eclesiástica (1848-1868, III: 741).
Aunque ausente de la diócesis, en su episcopado se pueden distinguir dos etapas: la primera, antes de ser promovido a cardenal, y la otra, ya como tal. En ambos períodos la Iglesia zamorana se vio favorecida por un prelado cercano al poder pontificio. El Archivo de la catedral ha conservado la documentación necesaria para reconstruir su episcopado.
En el primer año de episcopado, Juan suplicó al papa Eugenio IV que instituyera perpetuamente en la catedral dieciséis clérigos de coro para mayor solemnidad de los oficios litúrgicos. El Pontífice accedió y expidió littera solemne el 14 de noviembre de 1440, y un año más tarde comisionó al obispo para que anexionase prestimonios para constituir la mesa para su propia subsistencia.
De sus buenas relaciones con el Cabildo hay testimonios suficientes. Un primer ejemplo de colaboración y también de nepotismo fue el nombramiento de su sobrino Juan de Mella como racionero, hecho por los capitulares en 1448.
Juan se hizo presente en la diócesis al tomar parte activa en la defensa de las propiedades y derechos de su Cabildo. En 1454 el obispo promovió la resolución de un pleito mantenido entre la cofradía de Santa Catalina, sita en Zamora, en la iglesia de Santa María de la Horta, y el Cabildo, iniciado ya en 1433, sobre la construcción de aceñas en el arrabal de San Frontis, cercanas a las aceñas capitulares. La sentencia fue favorable al obispo y al Cabildo, y fue dictada por jueces subconservadores el 24 de septiembre de 1454.
Del mismo modo, el obispo rogó al rey Enrique IV justicia por la usurpación de la tercia de Belver del Monte, perteneciente al Cabildo, y que había sido tomada por Juan Sánchez, oidor de la Audiencia. El Monarca, por medio de una provisión real, le condenó al pago de la deuda en 1455.
En su etapa como obispo y cardenal también favoreció a su Cabildo y catedral. A los dos meses ya había conseguido que Calixto III cediera su derecho de las medias anatas en favor de la conservación y restauración del templo catedralicio (19 de diciembre de 1457). Este mismo Pontífice confirmó la concesión de extender a los racioneros de Zamora el uso de solideo, como usaban el resto de las catedrales de León y Castilla (20 de abril de 1455). Asimismo, obtuvo con la colaboración del Cabildo una canonjía para otro sobrino suyo, Juan Romero, quien consiguió la colación el 23 de diciembre de 1460.
El sucesor de Calixto III, el papa Pío II, también favoreció a la sede zamorana concediendo al obispo jurisdicción superior sobre los jueces conservadores que actuaran en su territorio diocesano, a través de una littera solemne, expedida en Roma el 10 de febrero de 1462.
El 13 de julio de 1466, Pablo II, por medio de una littera solemne, aprobaba y confirmaba la fundación de la capellanía de San Ildefonso, llamada del Cardenal, fundada por el cardenal Juan de Mella, obispo de Zamora, en la catedral. El documento inserta la fundación, expedida en Roma el 11 de junio del mismo año. La capellanía con el título de San Ildefonso fue dotada con seis capellanes, un capellán mayor y cuatro menores, presbíteros, y dos acólitos.
Los capellanes del Cardenal debían de estar bien remunerados al poder tomar en arriendo unas casas en la calle del Mercadillo, propiedad del Cabildo catedral, como hizo Juan de Rocas en 1488. La integración con el resto de capellanes y canónigos se constató cuando fueron nombrados testamentarios del canónigo Diego Carasa en 1501, o cuando hicieron causa común con el resto de capellanes contra el obispo Juan de Meneses al querer éste obligarles a residir en sus beneficios curados.
Falleció en Roma el 13 de octubre de 1467 y tiene su sepulcro con su epitafio en el Hospital de Santiago de los Españoles.
Obras de ~: Portugalliae leges quadragintae duae, seu constitutiones Portugalliae Regis Joannis anno 1419, die 18 novembris promulgatae in civitate Ulissipone, et glosatae per Joannem de Mell Episcopum Zamorensem; sive de cognitionibus propiis regalium, sive ecclesiasticorum tribunalium, s. f.; Pantaleón contra Haereses Graecorum Germani Patriarchae de processione Spiritus Sancti. Joannis de Mella elucidarium, s. f.; Clericis licitum non esse urbes pestilenti lue infectadas deserere ob injucti sacerdotii curam, s. f.
Bibl.: B. S. Castellanos de Losada (dir.), Biografía eclesiástica completa: Vidas de los personajes del Antiguo y Nuevo Testamento, de todos los santos [...] papas y eclesiásticos célebres [...] en orden alfabético [...], vol. III, Madrid, Eusebio Aguado, 1848- 1868, pág. 741; C. Fernández Duro, Colección bibliográfica y biográfica de la provincia de Zamora, Madrid, Imprenta de Manuel Tello, 1891, págs. 454-455; M. Zataraín, Apuntes para la Historia Eclesiástica de Zamora, Zamora, Est. Tipográfico de San José, 1898; E. Fernández Prieto, Nobleza de Zamora, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), 1953; “Mella, Juan de (Zamora 1367 † Roma 13.X.1467)”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de Historia Eclesiástica de España, vol. III, Madrid, CSIC, Instituto Enrique Flórez, 1973, págs. 1466-1467; G. Ramos de Castro, La Catedral de Zamora, Zamora, Fundación Ramos de Castro, 1982; J. Sánchez Herrero, “Historia de la iglesia de Zamora, siglos v al xv”, en Historia de Zamora. Edad Media, t. I, Zamora, Diputación Provincial, Instituto de Estudios Zamoranos Florián de Ocampo, 1995, págs. 687-753; J. C. de Lera Maíllo, Catálogo de los documentos medievales de la Catedral de Zamora, Zamora, Diputación Provincial, Instituto de Estudios Zamoranos Florián de Ocampo, 1999; J. Á. Rivera de las Heras, La Catedral de Zamora, Zamora, Durius Cultural, 2001.
José Carlos Lera Maíllo
