Benavides y Merino, Mendo de. Santisteban del Puerto (Jaén), ¿1569? – Murcia, 17.X.1644. Jurista, fiscal del Consejo de Órdenes Militares, oidor del Consejo de la Inquisición, presidente de la Chancillería de Granada y obispo.
Era hijo natural de Diego de Benavides y de la Cueva, conde de Santisteban y caudillo mayor del obispado de Jaén, y de Teresa Merino, sobrina nieta del cardenal Esteban Gabriel Merino, cuando ambos eran solteros.
Fue dedicado al estudio, comenzando su preparación primero en la Universidad de Salamanca y después en la de Valladolid como colegial en el Colegio Mayor de Santa Cruz, donde se licenció en Derecho Canónico. En 1598 ejerció la docencia en esta universidad impartiendo Instituciones Civiles.
En 1609 ocupó la plaza de oidor en la Chancillería de Valladolid. En 1610 recibió el hábito de la Orden Militar de Santiago y muy pronto pasó a ocupar el cargo de fiscal del Consejo de Órdenes Militares. En 1617 ingresó en el Consejo Supremo de la Inquisición, primero como oficial para ascender posteriormente a fiscal y oidor. El 23 de julio de 1624 fue nombrado presidente de la Chancillería de Granada en sustitución de Martín Fernández Portocarrero.
A propuesta de Felipe IV fue nombrado en 1633 obispo de Segovia y consagrado el 1 de enero de 1634 en la iglesia colegial del Sacromonte en Granada.
En mayo de 1635 por disposición del Rey hizo una visita de inspección a los cuatro colegios mayores de Salamanca, los cuales comunicaron el hecho al colegio mayor de Santa Cruz de Valladolid para que supieran a qué atenerse. En 1641 fue promovido al obispado de Cartagena-Murcia y en esta ciudad falleció; en el trascoro de su catedral recibió sepultura. Se afirma que su cuerpo fue trasladado posteriormente a la iglesia que fundara en Castellar.
Por el amor a su tierra y por hacer bien a sus habitantes llevó a cabo lo que desde muy joven tenía pensado, que era fundar una iglesia bajo la advocación de Santiago, que decidió establecer en Castellar, en tierras señoriales del condado, para lo que dedicó los bienes y rentas conseguidos antes de ser obispo de Segovia según escrituras ante notario de 1633 y 1634. Fue una fundación eclesiástica, a modo de Colegiata (así se le llama), con carácter de centro docente aprobada por el obispo de Jaén Fernando de Andrade y Castro, pues de las veinticuatro capellanías (doce mayores y doce menores), cinco de las mayores, por oposición, estaban dedicadas a impartir Decretales, Decreto, Doctrina Moral y Gramática para enseñar a medianos y mayores; en las capellanías de menores dos estaban dotadas para maestros, una de niños y otra de gramática, mientras que otras las dedicaba a una capilla de música con organista y ministrales. No se conocen las constituciones que redactara Mendo de Benavides, pero se conservan los estatutos de la fundación aprobados en 1693 por el papa Inocencio XII. El edificio destaca por su sobriedad; en él el clasicismo queda resaltado por elementos greco-romanos. En el centro de la fachada hay una hornacina con la escultura de Santiago flanqueada por escudos gemelos con las armas de los Benavides.
Bibl.: Fvndación, constitvción y patronazgo de la Yglesia o Capilla del Castellar condado de Santisteban [...], Nápoles, Regia Emprenta de Carlos Porfile, 1693 (Capilla de Santiago del Castellar); M. Sanjuán Moreno, Santisteban del Puerto y su comarca: datos históricos, Madrid, R. Velasco, 1909, págs. 113-116; J. L. Martínez Bara, Catálogo de informaciones genealógicas de la Inquisición de Córdoba conservadas en el Archivo Histórico Nacional, vol. I, Madrid, 1970, págs. 89- 90; J. Mercado Egea, La muy ilustre villa de Santisteban del Puerto, Madrid, 1973, págs. 262-263; P. Galera Andreu, Arquitectura de los siglos XVII y XVIII en Jaén, Granada, Caja General de Ahorros y Monte de Piedad, Seminario de Estudios, 1977, pág. 192; M. Caballero Venzalá, Diccionario Bio-Bibliográfico del Santo Reino, vol. I, Jaén, Instituto de Estudios Giennenses, 1979, págs. 230-232; P. Gan Giménez, La Real Chancillería de Granada (1505-1834), Granada, Centro de Estudios Históricos de Granada y su Reino, 1982, pág. 198; J. Martínez Millán y T. Sánchez Rivilla, “El Consejo de Inquisición: (1598-1700)”, en Hispania Sacra, 36 (1984); R. Gómez-Rivero, “Consejeros de Órdenes. Procedimiento de designación (1598-1700)”, en Hispania. Revista Española de Historia, vol. LXIII/2, n.º 214 (mayoagosto, 2003).
Luis Coronas Tejada