Ocón y Trillo, Juan de. Antequera (Málaga), c. 1542 – Madrid, 19.VIII.1618. Juez, consejero de Castilla, consejero de la Inquisición y consejero de la Cámara.
Hijo de Pedro González de Ocón y de Catalina de Trillo, versada en latín y griego y considerada por algún autor como la Safo de su tiempo, fueron sus abuelos paternos Miguel de Ocón y Catalina González Pareja, y sus abuelos maternos, Juan de Trillo y Leonor de Alarcón, vecinos y naturales de Antequera.
Fue colegial del Colegio Imperial de Granada y catedrático de Instituta de su Universidad. Más tarde, el 17 de agosto de 1571, ingresó en el Colegio de San Bartolomé de la Universidad de Salamanca, donde se graduó de licenciado en Cánones el 26 de abril del año siguiente y desempeñó una Cátedra de Decretales. En 1583 accedió a la carrera judicial al ocupar una plaza de oidor de la Real Chancillería de Valladolid, vacante por fallecimiento de Pedro Enríquez. Por estas fechas contrajo matrimonio con Ana de Pineda y Nieto, nacida en Plasencia. Fruto de este enlace fueron dos hijos: por un lado, Pedro, el primogénito, casado con María de Coalla y Córdoba, y, por otro, Juan, el segundo, que casaría con María de Chacón y Rojas, sin descendencia. Pedro de Ocón tuvo una hija natural, Juana, y dos legítimas: Ana, casada con Pedro de Porres Vozmediano, y Clara, esta última casada por vez primera el 7 de diciembre de 1631 con Antonio Hurtado de Mendoza, ayuda de cámara del Rey y secretario de la Suprema, y en segundas nupcias con Juan de Lemos, segundo conde de Amarantes y teniente general de Caballería en Extremadura.
El 8 de enero de 1593 juró como consejero de Órdenes, con el hábito de Calatrava, sucediendo a Francisco de Albornoz, comendador del tesorero de esa Orden, promovido al Consejo Real. Desde octubre de 1599 ejerció de magistrado del Consejo de Indias, donde protagonizó un ruidoso incidente a propósito del orden que se había de observar en las votaciones, y el 17 de julio de ese año la Cámara de Castilla le propuso para una plaza numeraria del Consejo de Castilla, vacante por fallecimiento de Juan Sarmiento de Valladares, siendo nombrado para ella por Felipe III y de la que tomó posesión a comienzos del año siguiente. Protegido del valido Lerma, a partir de 1617 formó parte de la nómina de los consejeros de la Suprema y el 24 de febrero de 1618, pocos meses antes de su fallecimiento, accedió a un puesto del Consejo de la Cámara que había quedado vacante por el óbito de Diego de Alderete. Ocón poseía varias casas en Puerta Cerrada, enfrente de la Fuente.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Simancas, Escribanía Mayor de Rentas, Quitaciones de Corte, leg. 28; Archivo Histórico Nacional, Estado, leg. 6408; Órdenes Militares, Calatrava, n.º 1818.
J. de Rojas y Contreras, marqués de Alventos, Historia del colegio viejo de San Bartolomé de Salamanca, Salamanca, 1766, 2 vols.; E. Schäfer, El Consejo Real y Supremo de las Indias. Su historia, organización y labor administrativa hasta la terminación de la Casa de Austria, t. I, Sevilla, 1935; G. Gascón de Torquemada, Gaçeta y nuevas de la corte de España desde el año 1600 en adelante, ed. de A. Ceballos-Escalera y Gila, marqués de la Floresta, Madrid, Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía, 1991; C. Domínguez Rodríguez, Los Oidores de las Salas de lo Civil de la Chancillería de Valladolid, Valladolid, Universidad, 1997; J. Martínez Millán y C. J. de Carlos Morales, Felipe II (1527-1598). La configuración de la Monarquía Hispana, Valladolid, Junta de Castilla y León, 1998; I. Ezquerra Revilla, El Consejo Real de Castilla bajo Felipe II. Grupos de poder y luchas faccionales, Madrid, Sociedad Estatal para la Conmemoración de los Centenarios de Felipe II y Carlos V, 2000; R. Gómez Rivero, “Consejeros de Castilla de Felipe III”, en Anuario de Historia del Derecho Español, t. LXXIV (2004), págs. 97-138.
Ricardo Gómez Rivero
