Hurtado de Mendoza, Juan. Cuenca, p. m. s. xvi – Madrid, 1607. Consejero de Inquisición.
Hijo del marqués de Cañete, virrey de Perú, estudió en la Universidad de Salamanca. Fue caballero de la Orden de Santiago y maestrescuela y canónigo de la catedral de Cuenca. En julio de 1590, tras la fuga de Antonio Pérez al reino de Aragón, fue nombrado inquisidor en el Tribunal de Zaragoza, debido a su vinculación con el antiguo obispo de Cuenca e inquisidor general Gaspar de Quiroga. La huida de Pérez y las alteraciones posteriores tuvieron como consecuencia la renovación de la Inquisición de Zaragoza, contexto en el que se acusó a Antonio Morejón y a Hurtado de Mendoza, protegidos de Quiroga, de falta de celo en su labor. A consecuencia de ello, en enero de 1592 fue trasladado al Tribunal de la Inquisición de Sevilla en calidad de inquisidor, aunque a fines de ese año juró como consejero de Inquisición. Tras la muerte de Quiroga en 1594, logró mantenerse en el cargo buscando el acercamiento a García de Loaysa, pero sin que su actividad en el Consejo, durante cuyo servicio habría de fallecer, alcanzara particular significación.
Fuentes y bibl.: Archivo Histórico Nacional, Inquisición, lib. 1.338, fol. 16v.
J. Martínez Millán y T. Sánchez Rivilla, “El Consejo de Inquisición (1483-1700)”, en Hispania Sacra, vol. XXXVI, n.º 73 (1984), pág. 123; H. Pizarro Llorente, “Juan Hurtado de Mendoza”, en J. Martínez Millán y C. J. de Carlos Morales (dirs.), Felipe II (1527-1598). La configuración de la Monarquía Hispana, Valladolid, Junta de Castilla y León, 1998, pág. 403.
Alejandro López Álvarez