Borja Centelles, Francisco Tomás de. Duque de Gandía (VI). Gandía (Valencia), 21.XII.1551 – Valencia, 29.VIII.1595. Noble.
Francisco Tomás, VI duque de Gandía, nació el domingo 21 de diciembre de 1551, entre las cinco y las seis de la mañana, y cuarenta años después (22 de junio de 1592) recibió el solemne homenaje de fidelidad de sus vasallos de Gandía.
El 3 de noviembre de 1591, siendo aún marqués de Llombay (o sea, heredero del ducado de Gandía), Felipe II lo envió como comisario regio a Aragón ante el estallido de las “alteraciones aragonesas”. Entró por Calatayud con el ofrecimiento real de respetar los fueros; el día 28 de ese mes estaba en Zaragoza (donde se hospedó en el palacio del duque de Villahermosa, su pariente); al día siguiente compareció ante la Diputación y jurados de Zaragoza, pero no los convenció.
Tras las detenciones del duque de Villahermosa y del conde de Aranda, Felipe II le retiró la confianza a su embajador, desentendiéndose de su misión hasta el punto de que, como se quejaba con amargura el duque de Gandía a Idiáquez, los criados de su hijo, el marqués de Llombay, procuraban ocultar la personalidad de su amo cuando salían de Aragón.
El 19 de agosto de 1595 dictó su último testamento, en castellano, a su confesor, padre Melchor de Vallpedrosa, ante el notario Luis Castelló; en él designaba como uno de sus albaceas al patriarca Juan de Ribera, arzobispo de Valencia. Murió en esta ciudad el martes 29 de agosto, a las tres de la tarde, de modo que sólo gobernó el ducado durante tres años. Fue enterrado en la colegiata de Gandía con el hábito franciscano.
Francisco Tomás inauguró los enlaces de la casa de Gandía con la aristocracia foránea del reino de Valencia, sobre todo la castellana, pues sólo las más grandes familias podían aportar las cien mil libras de dote exigidas para casarse con el heredero del ducado. Aunque en julio de 1569 el duque Carlos llegó a firmar poderes para casar a su primogénito con Isabel de la Cueva (hija del difunto duque de Alburquerque), en 1572 se casó con Juana Fernández de Velasco y Aragón, hija de Íñigo Fernández de Velasco (V condestable de Castilla, duque de Frías y conde de Haro) y de Ana de Aragón y de Guzmán, lo que significa que Juana estaba emparentada por parte de padre con la duquesa regente de Gandía María Enríquez y con el arzobispo de Valencia patriarca Ribera (como nieta que era de Juana Enríquez de Ribera); por parte de madre era nieta de Juana de Aragón, tía de san Francisco de Borja.
Hijos suyos fueron: Carlos, el heredero; Íñigo (1574-1622), maestre de campo en Flandes (donde en 1606 obtuvo una dramática victoria contra las tropas rebeldes del conde Mauricio) y castellano de Amberes, se casó con Hélène d’Hénin-Liétard; Francisco (nacido en 1575), franciscano en el convento de San Roque de Gandía; Gaspar (1580-1645), primado de España y arzobispo de Sevilla, cardenal, virrey de Nápoles, miembro del Consejo de Estado y embajador en Roma; Baltasar (1586-1611), obispo y virrey de Mallorca; Melchor (nacido en 1587 y muerto hacia 1645), caballero de San Juan de Jerusalén y comendador de Aliaga, del Consejo de Guerra y capitán general de las Galeras de España, se casó con Leonor de Recalde; Juan, quien nació en 1589 y murió, de niño, siendo ya caballero de Santiago; Magdalena, quien se casó con su primo Íñigo F. de Velasco y Tovar (conde de Haro), y Catalina, clarisa en Gandía.
Reconoció, además, a otros dos hijos naturales: Rodrigo (canónigo de Valencia, se hizo luego franciscano —fray Francisco de Jesús—, y marchó como misionero a México) y Justa, monja clarisa en Gandía.
Bibl.: J. M. Borja Devesa y S. la Parra, La imagen de los Borja, Oliva, Producciones Altair, 1993; M. Batllori, Obra Completa, IV. La família Borja, València, Elisèu Climent editor, 1994; S. la Parra, La ruta valenciana de los Borja, Gandía, Escapada-Punto Cero, 1997.
Santiago la Parra López
