Regla, Juan. Hecho, Jaca (Huesca), 1500 – San Lorenzo de El Escorial (Madrid), 16.VIII.1574. Jerónimo (OSH), confesor real, teólogo, canonista, conciliarista.
A pesar de su origen humilde con catorce años fue a Zaragoza, donde estudió Gramática y Artes. Con veintidós años sirvió como ayo y maestro de buenas costumbres a los hijos de un caballero de Zaragoza, circunstancia que también aprovechó para hacer algunos estudios. Estuvo con ellos siete años y los devolvió a su padre. Después retornó a Salamanca con ánimo de completar su formación teológica junto al maestro Francisco de Vitoria, y aprovechó también para estudiar Cánones, Griego y Hebreo. Regresó a Zaragoza y, siendo ya de treinta y seis años solicitó en el monasterio de Santa Engracia el hábito jerónimo.
A los cuarenta años, a pesar de la resistencia que presentó, fue ordenado de sacerdote.
Fue designado como uno de los dos teólogos que representaron a la Corona de Aragón en la segunda convocatoria del Concilio de Trento (1551). Aun cuando a primera vista pueda extrañar que, siendo Regla un teólogo imperial, falten en las Actas sus intervenciones conciliares, hay que observar que cuando él llegó a Trento ya se habían distribuido las materias a los teólogos y, de hecho, al poco tiempo cesaron las congregaciones de los teólogos, no volviéndose a tener discusiones conciliares de este tipo durante toda la segunda etapa. Su trabajo se redujo, pues, a asesorar privadamente a los prelados. En esta forma debió de trabajar activamente, pues en carta del embajador Toledo a Carlos V, le decía: “El Doctor Arce es un hombre muy docto y leído y de muy religiosa vida; ha dado muy buen ejemplo de sí y servido mucho con sus letras [...], lo mismo ha hecho fray Regla, de la Orden de San Hierónimo, que vino aquí por Aragón, hombre de religiosísima vida y buen letrado”.
Cuando volvió de Trento (1553) fue elegido prior de su monasterio por dos trienios seguidos. Cuando estaba comenzando su segundo trienio, Carlos V entabló conversaciones con el padre general de la orden jerónima respecto a su retirada a Yuste; todo lo dejó a voluntad del padre general, excepto nombrar para su confesor a fray Juan Regla. Entró en Yuste con el Emperador (3 de febrero de 1557) y allí estuvo atendiéndole espiritualmente hasta su muerte en 1558. Desde entonces estuvo implicado en el proceso inquisitorial del arzobispo Bartolomé Carranza, como uno de sus principales acusadores. Pasó luego a Madrid donde quedó como testamentario del Emperador y, al terminar esta misión, se reintegró a su monasterio, en el que al año siguiente (1567) fue elegido prior por tercera vez. Unos meses antes de terminar este priorato fue elegido para el de San Jerónimo el Real de Madrid, de lo que recibió nuevo contento Felipe II, que lo escogió por su consejero y confesor en ausencia del obispo de Cuenca, que era el ordinario. Estando en San Lorenzo de El Escorial, le dieron unas calenturas, allí murió y allí lo enterraron (1574).
Obras de ~: Muchas graves consultas de asuntos importantes; Notas marginales al Concilio de Trento (en el ejemplar que fue de su uso); Sermones; Otros papeles recomendables por su mérito y Cartas, s. l., s. f.
Bibl.: L. B. Martón, Origen y antiguedades de el subterraneo y celeberrimo Santuario de Santa María de las Santas Massas, oy Real Monasterio de Santa Engracia de Zaragoza, Zaragoza, Juan Malo, 1737, págs. 530-539; M. Gómez Uriel, Bibliotecas antigua y nueva de escritores aragoneses de Latassa, aumentadas y refundidas en forma de Diccionario Bibliográfico-Biográfico, vol. III, Zaragoza, Imprenta de Calixto Ariño, 1886, págs. 31- 32; C. Gutiérrez, Españoles en Trento, Valladolid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Instituto Jerónimo Zurita, 1951, págs. 697-701; J. I. Tellechea Idígoras, “Carlos V y Bartolomé de Carranza”, en Príncipe de Viana, 19 (1958), págs. 33-82; I. de Madrid, “Regla, Juan”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de Historia eclesiástica de España, vol. III, Madrid, CSIC, Instituto Enrique Flórez, 1973, pág. 2068; J. I. Tellechea Idígoras, Así murió el Emperador, Salamanca, Universidad Pontificia, 1995; J. de Sigüenza, Historia de la Orden de San Jerónimo, vol. II, Valladolid, Junta de Castilla y León, 2000, págs. 161-175 y 369-371; F. Pastor, Las Memorias Sepulcrales de los Jerónimos de San Lorenzo del Escorial, vol. I, San Lorenzo de El Escorial, 2001, págs. 209-210.
Ignacio de Madrid, OSH