Alcázar, Pedro del. ?, s. m. s. XV – c. 1521. Veinticuatro de Sevilla, mercader y financiero.
Vecino de Sevilla, Pedro del Alcázar fue un señalado hombre de negocios durante la última parte del siglo XV y principios del siglo XVI. Sus negocios abarcaban tanto la hacienda real como la producción y venta de diferentes productos. Vivía en la colación de Santa María la Blanca y sus bienes personales incluían casas, heredades y molinos en Sevilla y su entorno.
Amparado por el apoyo de la casa de Medina Sidonia, en 1483 firmó uno de sus primeros arrendamientos de rentas gracias a una puja sobre las sierras de Sevilla —zona en la que desarrollará buena parte de sus actividades—, mientras que entre 1501 y 1503 accedió a la receptoría de composiciones de Canarias. Pedro del Alcázar, muchas veces en compañía de su hijo Francisco —también veinticuatro, jurado, alcalde y tesorero de la casa de la moneda en la susodicha ciudad—, arrendó numerosas rentas reales en Andalucía y otras zonas de Castilla a partir de 1504. Los totales acumulados por los Alcázar en estos años superaban los doscientos cincuenta millones de maravedíes. Además, Pedro del Alcázar participó en las obligaciones a guardas y fue tesorero de encabezado de partidos como Jerez de la Frontera o Medina del Campo. Pedro del Alcázar accedió a la receptoría de bienes incautados a otros procesados por la Inquisición a pesar de tener dificultades por su origen converso.
Sus actividades en el ámbito de lo mercantil incluyeron la comercialización de sardinas y, especialmente, la producción, almacenaje y venta de aceite. Es aquí donde el grupo familiar de los Alcázar se reveló como uno de los más importantes de Sevilla, como demuestra un contrato de venta de cuarenta mil quintales de aceite al genovés Jacobo Sopranis.
Pedro del Alcázar fue el primer representante de una familia llamada a mantener un gran ascendiente en la vida social y política sevillana, hasta el punto que el poeta Baltasar del Alcázar, conocido como el Marcial sevillano, fue descendiente de este personaje.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Simancas, Escribanía Mayor de Rentas, legs. 142, 551 y 582-1.
R. Pike, Aristócratas y comerciantes. La sociedad sevillana en el siglo xvi, Barcelona-Caracas-México, Ariel, 1978, págs. 44-52; C. Morales García, El pacto de Sevilla con el Imperio. Presión fiscal, deuda pública y administración en el siglo xvi, Sevilla, Ayuntamiento de Sevilla, 1997; J. M. Carretero Zamora, “Los arrendadores de la Hacienda de Castilla a comienzos del siglo xvi (1517-1525)”, en Studia Historica. Historia Moderna, 21 (1999), págs. 153-190; R. de Andrés Díaz, El último decenio del reinado de Isabel I a través de la tesorería de Alonso de Morales (1495-1504), Valladolid, Universidad de Valladolid, 2004; D. Alonso García, Fisco, poder y monarquía en los albores de la Modernidad. Castilla, 1504-1525, tesis doctoral, Madrid, Universidad Complutense, 2004 (inéd.); “Poder financiero y arrendadores de rentas en Castilla a principios de la Edad Moderna”, en Cuadernos de Historia Moderna, 31 (2006).
David Alonso García