Capánaga, Victorino. Mañaria (Vizcaya), 8.XI.1897 – Marcilla (Navarra), 1.VIII.1983. Profesor agustino (OSA), agustinólogo, escritor, traductor y editor.
El día siguiente de su nacimiento recibió el bautismo en la parroquia de su pueblo, y en él permaneció hasta los once años de edad, año en el que ingresó en el Colegio Apostólico de los Agustinos Recoletos de San Millán de la Cogolla (La Rioja). Después del año de noviciado en Monteagudo (Navarra), emitió la profesión religiosa el 14 de julio de 1914.
Los estudios filosóficos los cursó en Monteagudo y los teológicos en Marcilla (Navarra). Concluidos éstos, fue ordenado sacerdote el 15 de mayo de 1921, en Pamplona por el obispo de esta diócesis, el agustino José López de Mendoza (1848-1923). En septiembre de 1921 superó, ante el tribunal formado por cinco lectores jubilados, los ejercicios de lector, capacitándole para la enseñanza de Filosofía y Teología en centros de agustinos recoletos.
Durante los cursos comprendidos entre 1921 y 1926 explicó en Marcilla las materias de Teología dogmática, Arqueología, Sagrada Escritura y Liturgia. Una vez trasladado a San Millán de la Cogolla en septiembre de 1926, se ocupó de enseñar Matemáticas y Ética. En septiembre de 1930 regresó a Marcilla para dictar clases de Teología dogmática y Sagrada Escritura. Dos años más tarde se celebró el Capítulo General de la Orden de Agustinos Recoletos, y Victorino Capánaga fue nombrado consejero general, trasladando su residencia a Roma. El verano de 1935 dictó un curso sobre San Agustín en la Universidad de Santander. Una vez concluido el sesenio de consejero general, regresó a Marcilla para ocuparse de la docencia, los estudios y del “apostolado de la pluma”. De 1938-1939 a 1940-1941 explicó las asignaturas de Apologética, Sagrada Escritura, Misionología y Griego. Desde el 24 de noviembre de 1941 hasta el 20 de mayo de 1943 estuvo en Italia, primero como director de la casa de Civita Castellana, de Agustinos Recoletos, y los últimos ocho meses en Roma. El 20 de mayo de 1943 regresó a España, con destino a Marcilla. Del curso 1943-1944 a 1949-1950 enseñó a sus alumnos Sagrada Escritura, Metodología científica, Apologética y Teología fundamental. En mayo de 1949, el Capítulo Provincial le eligió definidor provincial y discreto para asistir al Capítulo General de 1950. De nuevo salió nombrado consejero general y hubo de trasladarse a Roma, donde llegó el 19 de julio de 1950. A los seis años, cuando tocaba celebrar el Capítulo General en Marcilla, abandonó la Ciudad Eterna el 7 de mayo de 1956. El resto de su vida residió, con carácter habitual, en Madrid. De la revista Augustinos fue director desde su fundación, en 1956, hasta su muerte, siempre ayudado por un eficaz secretario y colaborador, José Oroz Reta (1923-1996).
Otra faceta destacada de Victorino Capánaga, además de la docente y de gobierno, fue la de investigador y escritor. En efecto, es autor de temas muy variados, pues lo mismo se ocupó de la psicología de los convertidos que del papel desempeñado por la Virgen María o la eucaristía en el proceso de la conversión. Estudió con semejante interés y profundidad la doctrina de San Agustín como la de San Juan de la Cruz o San Juan de Ávila. Desde que las Confesiones de San Agustín despertaran su interés en el año de noviciado, siempre estuvo buceando en el amplio campo de la agustinología. Victorino Capánaga fue un incansable estudioso de San Agustín y divulgador de su pensamiento, que procuró exponer con natural sencillez. A lo largo de los casi setenta años de escritor empleó para sus publicaciones algunos seudónimos, tales como P. Artamendi, P. Aguirre, Víctor Masino, Victoriano Menosa, y otras veces, tan sólo sus iniciales V.C.
Capánaga preparó los primeros tomos de las obras de San Agustín. En efecto, él preparó la introducción general a la edición bilingüe (latín-español) de las Obras completas de San Agustín, editadas por la Biblioteca de Autores Cristianos (BAC) (Madrid, 1946). Este amplio escrito de carácter introductorio y general, al que añade una extensa bibliografía, puede ser considerado como el mejor de los escritos generales sobre San Agustín en castellano durante el siglo xx. En la misma edición de la BAC, Victorino Capánaga se encargó de la preparación de varias obras del obispo de Hipona (Contra Académicos, De libero arbitrio, De quantitate animae, De magistro, De natura et origine animae, De natura boni, De vera religione, De correptione et gratia; De diversis quaestionibus ad Simplicianum; De peccatorum meritis et remissione), con la correspondiente introducción, traducción y notas complementarias. También compuso la introducción y las notas a La Ciudad de Dios, de San Agustín, tomos XVI y XVII de las Obras completas de San Agustín (Madrid, 1977-1978).
Aparte de las introducciones y notas antes citadas, Victorino Capánaga elaboró tres obras importantes de agustinología: Agustín de Hipona, maestro de la conversión cristiana (Madrid, 1974), Pensamientos de San Agustín (Madrid, 1977) y Buscando a Dios con San Agustín (Madrid, 1983). Los tres escritos presentan con claridad y hondura los múltiples aspectos de la espiritualidad agustiniana. Del alemán al español tradujo la obra de Otto Barrer, San Agustín. La vida religiosa. Antología agustiniana (Madrid, Ediciones Avgustinus, 1962), que principia con una introducción del mismo Capánaga bajo el título “San Agustín, genio religioso” (págs. 5-29).
En el convento recoleto de Marcilla (Navarra) falleció el 1º de agosto de 1983 Victorino Capánaga, “uno de los más universales y auténticos representantes del pensamiento agustiniano”, escribió José Oroz Reta (Avgustinus, 28 [1983], pág. 353).
Obras de ~: La Virgen en la historia de las conversiones, Zaragoza, Industrias Gráficas Uriarte, 1932 (Zaragoza, Industrias Gráficas Uriarte, 1934; Madrid, Ediciones y Publicaciones Españolas, 1951); La eucaristía en la historia de la conversión, Zaragoza, 1936 (Madrid, Ediciones Apostolado Misional Agustino Recoleto, 1946; ed. corr. y aum., Madrid, Ediciones Studium, 1952); El beato Juan de Rieti, Zaragoza, 1938; Santo Tomás de Villanueva, Madrid, Editorial Nueva Biblioteca, 1942; San Juan de la Cruz. Valor psicológico de su doctrina, Madrid, 1950; San Agustín, Editorial Labor, Barcelona, 1951; La mediación mariana y la gracia de las conversiones, San Sebastián, Editorial Dinor, 1962; Agustín de Hipona, maestro de la conversión cristiana, Editorial Biblioteca de Autores Cristianos (BAC), Madrid, 1974; Pensamientos de San Agustín. El hombre, Dios y el Dios-hombre, Madrid, Editorial Católica, 1977; Madrid, BAC, 1979 (Madrid, BAC, 1996); “Buscando a Dios con San Agustín (Introducción de José Oroz Reta)”, en Avgustinus 28 (1983), págs. 9-343; J. Oroz Reta, “Bibliografía del P. Victorino Capánaga”, en Avgustinus 30 (1985), págs. 5-96.
Bibl.: T. Calvo Madrid, “La figura del P. Victorino Capánaga”, en Acta Ordinis Augustinianorum Recollectorum 19 (1983), págs. 346-350; reimpr. en Boletín de la Provincia de San Nicolás de Tolentino (BPSN), 73 (1983), págs. 209-214; J. Oroz Reta, “In memoriam. Ha muerto el P. Victorino Capánaga”, en Avgustinus 28 (1983), págs. 345-353; reimpreso en BPSN 73 (1983), págs. 129-135; “Victorino Capánaga Artamendi”, en BPSN 73 (1983), págs. 135-145; P. Panedas, “El P. V. Capánaga, apóstol de la conversión. Bibliografía”, en Mayéutica, 12/33-34 (1986), págs. 225-234.
Rafael Lazcano González
