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Francisco María Piquinoti Grimaldi

Biografía

Piquinoti Grimaldi, Francisco María. ? – ¿1710? Hombre de negocios de Carlos II y Felipe V.

Hijo del hermano mayor de Andrea Piquinoti, Juan Bautista Piquinoti y de Eugenia Grimaldi, residentes en Génova. Tras la muerte de Andrea Piquinoti en junio de 1670 en Madrid, quedaron como administradores de su casa sus sobrinos Ansaldo, Benito Galindo y el propio Francisco María. Los tres permanecieron en sus puestos de administradores pero, a partir de 1673, comenzaron las discordias entre los tres y Francisco María quedó excluido de su puesto quedando tan sólo como administradores su hermano Ansaldo y su primo Benito Galindo. La razón de esta exclusión fueron los pleitos que Francisco María había iniciado en contra de la firma, situación que le impedía seguir en la administración. Desde ese año, su actividad financiera ya emancipado fue muy importante superando en volumen de negocio a la de su difunto tío Andrea, administrada en solitario por sus parientes sólo durante un año, pues en 1674 entró un tercer administrador por orden de la Real Hacienda, el vizconde del Fresno, Diego Fernández Tinoco.

Mientras, Francisco María fue nombrado gentilhombre de boca del Rey desde 1678 y se convirtió en uno de los principales asentistas de Carlos II a partir de ese período. La administración de la casa de Andrea volvió a su poder en 1680 con sus familiares ya fallecidos. Formó compañía con Juan Bautista Crota y Juan Tomás Bianco con el fin de situar remesas de dinero en Italia. A partir de 1682 y a raíz del pleito interpuesto por Jerónima de Sada, la viuda de Benito Galindo Piquinoti que murió siendo conde de Villaleal, la firma de Andrea permaneció inoperante. La condesa viuda de Villaleal acusaba a Francisco María y al otro administrador, Juan de Guzmán, de haber intentado sacar de su domicilio los libros y papeles de la antigua casa Piquinoti para confundir las cuentas y el crédito de ambas. Tras el incidente Francisco María siguió realizando negociaciones por su cuenta y en 1687 se asoció con otro importante asentista de la época, Francisco Grillo de Mari, sobrino del famoso asentista de esclavos negros, Domingo Grillo. A partir de 1688 su nombre deja de aparecer en las negociaciones de crédito con la Monarquía en solitario.

En 1691 el pleito entre las dos ramas de la familia Piquinoti seguía pendiente y no se había ejecutado la partición de bienes entre los herederos aunque sí recibieron cantidades que oscilaban entre los 6000 y los 4000 ducados al año en concepto de alimentos ya que la Real Hacienda se había reconocido acreedora de ambas ramas del clan familiar.

Cuando en 1691 se comprobó que Francisco María y Juan de Guzmán no habían dado satisfacción a ninguna de las mandas testamentarias de Andrea Piquinoti, entre las que se encontraba destinar la mitad de su caudal a misas, el nuevo administrador que la Real Hacienda nombró, José de Aguerri, interrumpió la entrega de alimentos a los familiares y comenzó a cumplir con las últimas voluntades de Andrea. Entre tanto Francisco María actuó como administrador de la casa del marqués de Francavilla (sucesores de Domingo Grillo) que se encargó de la Comisaría de la Santa Cruzada hasta que fue sustituida por la casa del marqués de Santiago alrededor de 1710 y también de los bienes que quedaron por muerte de Francisco Grillo y Ambrosio Lomelín.

 

Bibl.: C. Sanz Ayán, Los banqueros de Carlos II, Salamanca, Universidad de Valladolid, Junta de Castilla y León, 1989; C. Sanz Ayán, Los banqueros y la crisis de la Monarquía Hispánica de 1640, Madrid, Marcial Pons Historia, 2013.

 

Carmen Sanz Ayán