Bustamante Rivero, Vicente. Carandeja (Cantabria), 21.I.1750 – Fresneda de Aragón (Teruel), 1809. Militar, caballero de Orden de Santiago.
Hijo de Ángel Bustamante y Bernarda Rivero, ingresa en el Ejército como cadete el 23 de junio de 1769, sirviendo en los Regimientos Asturias y Toledo.
El 15 de marzo de 1775 asciende a subteniente, y con este empleo y destino en el Regimiento de Cazadores de Infantería de Saboya se encuentra en la expedición contra dicha ciudad y desembarco sobre su playa el 8 de julio, expedición organizada por Carlos III al pretender ocupar Argel por ser el centro de las operaciones corsarias.
Entre los años 1776 y 1777 participa en la expedición a Buenos Aires bajo las órdenes de Pedro Ceballos, y, en 1779, durante veintidós meses, en el bloqueo de la plaza de Gibraltar contra los ingleses, llevado a cabo con apoyo francés hasta 1783, año de la firma de la Paz de Versalles, en la que el conde de Aranda ordenó el fin del bloqueo. También durante la Guerra de Sucesión se encuentra en la conquista de Menorca y el sitio y rendición del castillo de San Felipe.
El 27 de mayo de 1784 asciende a capitán de granaderos, y como teniente coronel pasa agregado al Regimiento de Provinciales de Laredo el 3 de junio de 1787.
En la guerra contra Francia se le nombra, el 13 de julio de 1791, corregidor y gobernador de la ciudad de Alcañiz, puesto que ocupa durante siete años.
El 25 junio de 1799, con el grado de coronel, ocupa el cargo de gobernador del castillo de la Alfajería y teniente de Rey de la plaza de Zaragoza, realizando destacados servicios durante el primer sitio entre el 15 de junio y el 15 de agosto de 1808.
En 1809 el capitán general José Palafox le nombra en comisión para recoger a los jóvenes que se alistaban voluntariamente para el servicio de las armas, reunir dispersos y proporcionar auxilios al Ejército.
Sin embargo, al lograr los franceses dispersar la tropa que tenía reunida, fue obligado a retirarse a la villa de Fresneda de Aragón.
Indignado el pueblo con motivo de la retirada y queriendo que se resistiese, sin conocer la cantidad y calidad de nuestras tropas y la de las francesas, lo asesinaron cruelmente, robándole su equipaje y manchando su fama con mil dicterios, calificándole de traidor.
Sobre este suceso se inició la causa correspondiente, que no pudo concluirse por las turbulencias de aquellos tiempos; pero habiendo tomado conocimiento de este hecho la sala del Crimen de la Real Audiencia de Zaragoza, declaró injusta y atentado la muerte tumultuosa y violenta del coronel Bustamante, castigando a los responsables y restaurando su fama como la correspondiente a un militar de honor.
Su viuda, María Benita de Vial y Gonzalo, acudió con posteridad a Su Majestad en solicitud de que se declarase a su marido un buen militar y fiel servidor del Rey.
Previo dictamen del Supremo Consejo de la Guerra, Su Majestad, en julio de 1819, declaró al coronel Vicente Bustamante inocente y fiel servidor e impunemente asesinado, sin que su buena opinión debiera padecer por uno de aquellos actos frenéticos y tumultuosos que desgraciadamente ocurrieron en aquella época, resolviendo que se insertase en la Gaceta la anterior declaración como el único medio de indemnizar la memoria de aquel benemérito y antiguo oficial, digno de mejor suerte, y cuyos servicios habían merecido la gratitud del Rey.
Fuente: Archivo General Militar (Segovia), exp. personal.
Emilio Montero Herrero
