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Fernando de Nestares y Grijalba Carranza

Biografía

Nestares y Grijalba Carranza, Fernando de. Marqués de la Hinojosa (VI). Cenicero (La Rioja), 1737 – Madrid, 17.XII.1803. Consejero de Castilla y de la Cámara.

Hijo de José Nestares Carranza, natural de Cenicero, y de Isabel Grijalba y Gutiérrez, nacida en Fuenmayor. Con diecinueve años ingresó en la Secretaría de Estado y del Despacho de Gracia y Justicia en el oficio de lo que entonces se conocía como paje de bolsa, una suerte de meritorio que se encargaba de aprender los entresijos y funcionamiento de la Secretaría. En 1757 obtuvo una plaza de oficial sexto o de partes en esta Secretaría. En los años siguientes ascendió gradualmente en las distintas plazas de oficial: quinto (1764), cuarto (1767), tercero (1773), segundo (1774), mayor segundo (1776) y mayor primero (1780). Por esta última percibiría 42.000 reales anuales.

Habiendo fallecido Íñigo de la Cruz Manrique de Lara Ramírez de Arellano y Mendoza, XI conde de Aguilar de Inestrillas, Grande de España, V marqués de la Hinojosa, IV conde de Villamor, III conde de Frigiliana, XV señor de los Cameros, sin descendencia el 9 de febrero de 1733, por haber muerto ya su hija única, fruto de su matrimonio con Rosa María Pignatelli de Aragón y Pimentel, se facultó a la colegiata de Castrojeriz que pudiera enajenar la merced de marqués de la Hinojosa, con autorización real el 26 de octubre de 1777, en favor de Fernando de Nestares y Grijalba, caballero de la Orden de Carlos III. En el primer libro del Catastro del marqués de la Ensenada, en el folio 82, Luis de Alcalá, administrador y apoderado de la colegiata de Nuestra Señora del Manzano, certificaba que por las Pías Memorias fundadas por el anterior marqués, le pertenecían a dicha colegiata la villa de Hinojosa y su término y por tanto disfrutaba de los derechos enajenados de la Corona: el oficio de escribano del Ayuntamiento, las alcabalas (impuesto sobre la circulación de mercancías), que valían 6000 reales de vellón, los dineros de las penas de Cámara, Mostrencos y Portazgo, este último “no está en uso y nada produce”, así como el vasallaje que pagaba la villa, que valía 17 reales y 22 maravedís.

Durante el movimiento reformador promovido por los ministros ilustrados del rey Carlos III en la agricultura, una de cuyas ideas fueron las Nuevas Poblaciones, en un intento de repoblar terrenos que al estar despoblados no producían ninguna riqueza, Fernando de Nestares, marqués de la Hinojosa, pretendió repoblar San Leonardo (despoblado por las guerras con Portugal), ofreciendo para dicha repoblación una ayuda exagerada a los colonos, pero a cambio solicitó que se le concedieran los privilegios jurisdiccionales de que gozaron los anteriores marqueses de la Hinojosa y la colegiata de Castrojeriz, pero no lo logró por considerarlos abusivos y propios de épocas pasadas. No obstante, el marqués de la Hinojosa descubrió una mina de topacio que explotó durante quince años, según el economista aragonés Eugenio Larruga en sus Memorias políticas y económicas sobre los frutos, comercio, fábricas y minas de España de 1795; que, en realidad debió de ser falso topacio, conocido precisamente como “topacio de Hinojosa”, piedra semipreciosa que aún se encuentra, aunque raramente, en los lugares donde abunda el cuarzo, en las cercanías del pueblo de Hinojosa de Duero.

En el año 1785 fue promovido a secretario interino del Consejo de Órdenes, plaza que adquirió en propiedad dos años después. La dotación de esta secretaría era de 50.000 reales anuales. En 1794 se le confió interinamente la Secretaría de la Cámara de Gracia y Justicia y Estado de Castilla. Carlos IV, de quien Nestares fue gentilhombre de cámara, por un Decreto despachado en San Ildefonso el 30 de septiembre de 1795, le nombró consejero de Castilla y de la Cámara. Por la primera de estas consejerías recibió 55.000 reales anuales y por la otra 11.000. Contrajo matrimonio con Manuela Chapín y Salcedo, natural de Badajoz, con la que tuvo tres hijos, Fernando, María de la Encarnación y Manuela. Cuando falleció se concedieron a su viuda 14.000 reales anuales de pensión. Al morir ésta, el 16 de noviembre de 1834, se transfirió la pensión a su hija Manuela, nacida en Madrid el 17 de septiembre de 1779, soltera.

 

Fuentes y bibl.: Archivo General de Simancas, Dirección General del Tesoro, invent. 13, leg. 5; Archivo Histórico Nacional, Ministerio de Hacienda, leg. 527.

R. Gómez Rivero, Los orígenes del Ministerio de Justicia (1714-1812), Madrid, Ministerio de Justicia, 1988; El Ministerio de Justicia en España (1714-1812), Madrid, Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 1999; A. Alonso de Cadenas y V. Cadenas y Vicent, Elenco de grandezas y títulos nobiliarios españoles, Madrid, Instituto Salazar y Castro-Revista Hidalguía, 2003; J. V. Ledesma Aguado, “El Señor Marqués, mi Señor”, en Revista Cultural La Hinojosa (Hinojosa de Duero), n. 5 (s. f.).

 

Ricardo Gómez Rivero