Andícano y López de Celáa (o Zeláa), Juan de. Conde de Monterrón (I). Mondragón (Guipúzcoa), 1638 – Madrid, IV.1691. Caballero de la Orden de Santiago, miembro del Consejo Real y Supremo de Castilla, alcalde de Casa y Corte y oidor de la Real Chancillería de Valladolid.
Hijo de Diego de Andícano y de Isabel López de Celá, o Zeláa, pertenecientes ambos a linajes de antiguos hijosdalgo de Guipúzcoa, entroncados con parientes mayores, como los Gamboa o Villarreal de Bérriz.
En 1665 ingresó en la Universidad de Salamanca para cursar Cánones y Leyes como colegial del Colegio Mayor de Santiago el Zebedeo o del Arzobispo con el propósito de realizar carrera administrativa y la recomendación de su tío Melchor de Zeláa, antiguo colegial mayor a su vez de San Ildefonso en Alcalá y a la sazón canónigo de la catedral de Toledo. En 1665 dejó la universidad, donde había desempeñado la cátedra de Vísperas de Sexto, para ocupar el cargo de oidor en la Real Chancillería de Valladolid, y posteriormente el de alcalde de Casa y Corte en 1680, año en que es nombrado el 13 de septiembre miembro del Consejo Real y Supremo de Castilla. En 1676 ingresó en la Orden de Santiago, y en 1687 compró por 60.000 reales el señorío de la villa de Monterrón en Guadalajara, instituyendo un mayorazgo en el apellido Andícano para el que Carlos II le concedió en 1689 el título de conde de Monterrón como recompensa a los servicios prestados. De un primer matrimonio con Francisca Ignacia de Loyola, natural de Vergara en Guipúzcoa, le nació Juan Antonio de Andícano y Loyola, su primogénito, que en 1687 ingresó colegial asimismo en el Mayor del Arzobispo ocupando luego el cargo de alcalde de los Hijosdalgo.
Habiendo quedado viudo, Andícano contrae nuevas nupcias en 1679 con María Eugenia Muñoz y Velarde, viuda a su vez de Esteban de Arroyo, que fuera también alcalde de Casa y Corte. Nacen de este segundo matrimonio dos hijas, Juana Teresa e Isabel María, que casan respectivamente con Francisco Nieto Bootello y Maldonado y Martín Antonio de Vega, caballero de Santiago, siendo Isabel María quien herede el mayorazgo y edifique en la propiedad adquirida en 1688 por su padre en el término de Mondragón el palacio de Monterrón declarado monumento histórico artístico en 1964. Juan de Andícano fallece en Madrid en abril de 1691 y fue enterrado en Mondragón por disposición testamentaria.
Deja un legado de 100 ducados al colegio salmantino del Arzobispo, 8 millones de maravedíes garantizados sobre sisas de Madrid, amén de otras cantidades y bienes raíces, y entre los bienes muebles tasados constan en su testamentaría dos importantes colecciones: una de joyas y plata, y otra de ochocientos quince cuerpos de libros reunidos en la biblioteca de su casa de la calle de la Ballesta en Madrid, en la que en 1689-1690 se había alojado su sobrino Pedro Bernardo Villarreal de Bérriz y Sáez de Andícano.
Fuentes y bibl.: Archivo Histórico de Protocolos Notariales (Madrid), prot. 10618, 18 de abril de 1691; Archivo General de Simancas, Libros de Relaciones de la Cámara, R.10, 10 de octubre de 1689; Archivo de la Universidad de Salamanca, Colegio del Arzobispo, Expedientes de Alumnos, lib. 2186, fol. 360; lib. 2192, fol. 406.
A. Basanta de la Riva, Archivo de la Real Chancillería de Valladolid. Sala de los Hijosdalgo, vol. I, Valladolid, Imprenta de Diario Regional, 1920; VV. AA., Diccionario Enciclopédico Vasco, vol. II, San Sebastián, Editorial Auñamendi, 1976, pág. 39; J. Fayard, Los miembros del Consejo de Castilla (1621- 1746), Madrid, Siglo xxi , 1979; M.ª S. Martín Postigo, Presidentes de la Real Chancillería de Valladolid, Valladolid, Institución Cultural Simancas, 1982; A. M.ª Rodríguez Cruz, Historia de la Universidad de Salamanca, Salamanca, Congregación de Santo Domingo, 1990; H. Kamen, La España de Carlos II, Barcelona, RBA, 2005; M.ª F. Puerta Rosell, Platería madrileña: colecciones de la segunda mitad del siglo xvii, Madrid, Fundación Universitaria Española, 2005.
Guadalupe Rubio de Urquía
