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Jerónimo de Villegas

Biografía

Villegas, Jerónimo de. Burgos, c. 1504 – Perú, 1555. Conquistador, expedicionario.

Nació en Burgos hacia 1504 en una familia de mercaderes de nivel medio-alto. Poco se conoce hasta que se le encuentra en el Perú en 1536, probablemente con Pedro de Alvarado. Poco después, en 1538 acompañó al burgalés Alonso de Alvarado en la conquista de la provincia de Moyabamba, en la que fue nombrado capitán. La expedición fracasó por no encontrar indígenas que distribuirse en encomiendas.

Fue compañero de Gonzalo Pizarro en la expedición a la Amazonia o País de la Canela, entre 1540 y 1542. Nuevamente la empresa fracasó y Villegas no obtuvo encomienda. Desde la amazonía se dirigió a Quito y de allí a Piura, con el propósito de llegar al Cuzco, donde estaba el cuartel de Pizarro. En Piura casó con María Calderón, viuda encomendera de esa ciudad. Así finalmente se convirtió en encomendero, pero sin título legal.

En 1543 se unió al gobernador Vaca de Castro en Cuzco, después se unió al virrey Núñez Vela. Villegas estuvo en los dos bandos en las guerras civiles aunque en el último momento se halló al lado del ejército realista. Pizarro le dio una encomienda en Cuzco, de allí pasó a Arequipa con su mujer, dedicándose a comerciar con los indígenas. En esta ciudad lo sorprendió en 1547 la reacción contra Pizarro. Los leales de Arequipa, acaudillados por Villegas el Astrólogo (como lo denominaba Gutiérrez de Santa Clara), se unieron a las fuerzas del realista Diego Centeno (Zárate, Santa Clara). Todo ello ocurrió sin derramamiento de sangre.

A Villegas le concedieron la encomienda que tenía Lucas Martínez de Vegaso en Tarapacá (Villalobos). Villegas, ya en calidad de leal, se encontró en la batalla de Huarina, como capitán de una compañía de caballería formada por los encomenderos de Arequipa. En dicha acción, el bando real fue derrotado y él escapó herido.

Fue a Jaula a unirse a las fuerzas de La Gasca, a la vez que los pizarristas le daban un terrible castigo: su esposa fue llevada al Cuzco y por orden de Francisco de Carvajal le fue dado garrote. En Juaquijaguana sirvió junto a La Gasca, pero no como capitán, porque el ejército ya estaba organizado. Después de la victoria realista intentó dar muerte a Carvajal, pero Centeno se lo impidió. En premio a sus servicios, el licenciado le concedió las encomiendas de Arica y Tarapacá, situadas en territorios que posteriormente pertenecerían a Chile. Villegas residió en Arequipa desde 1548, con intervalos en Lima, hasta su muerte en 1555.

En 1548 obtuvo la encomienda de los pueblos de Arica y Tarapacá, en el llamado Norte Grande de Chile, por haberse hecho leal a la corona después de haber sido hombre de confianza —y hasta nigromante— de Gonzalo Pizarro. Villegas organizó la encomienda con mentalidad moderna o capitalista, consiguiendo que la zona ariqueña alcanzase gran prosperidad. En ellos se instaló junto a su sobrino Diego de Villegas y con su mayordomo Íñigo de Bocanegra (uno de los diez hombres que administraban sus negocios y que fue su albacea), ambos burgaleses.

En 1553 los oidores de la Audiencia le designaron corregidor de Arequipa durante la insurrección de Francisco Hernández Girón. Estando encargado de la defensa de la ciudad la entregó a los insurgentes y terminó convenciendo a los vecinos de Arequipa de la conveniencia de nombrar procurador general a Girón. Algunos vecinos no estuvieron de acuerdo y huyeron a la costa, tomaron un navío dirigiéndolo a Lima. Esta actuación fue fatal a sus intereses como encomendero. Su encomienda fue devuelta a Lucas Martínez.

Murió en Lima en 1555, después de haber otorgado su testamento el 22 de enero de ese mismo año. El inventario de sus bienes se otorgó el 27 de agosto de 1556. Tuvo dos hijos con María Calderón, un hijo que murió en Cuzco en 1547, y una hija, Ana, su sucesora, nacida ese mismo año y que quedó a la tutela de Juan de la Torre quien la casó a los siete años. Tuvo un hijo natural, Pedro Ruiz de Villegas.

 

Bibl.: A. de Zárate, Historia del descubrimiento y conquista de las provincias del Perú, Madrid, Atlas, 1947; G. Fernández de Oviedo, Historia General y Natural de las Indias, Madrid, Atlas, 1959 (Biblioteca de Autores Españoles, vols. 117-121); H. López Martínez, Diego Centeno y la rebelión de los encomenderos, Lima, 1970; P. Pizarro, Relación del descubrimiento y conquista de los Reinos del Perú. Lima, Pontificia Universidad Católica del Perú, 1978; S. Villalobos, La economía de un desierto, Santiago, Talleres Salesianos, 1979, pág. 32; J. Lockhart, El Mundo hispanoperuano. 1532-1560, México, Fondo de Cultura Económico, 1982; F. López de Gómara, Historia General de las Indias, I. Hispania Victrix, Barcelona, Orbis, 1987; J. de la Puente Brunke, Encomienda y Encomenderos en el Perú, Sevilla, Diputación Provincial, 1992; C. Ruiz González, Los Burgaleses en Chile durante el siglo XVI (tesis doctoral), Valladolid, Universidad, 1993 (inéd.); A. Pereda López, Conquistadores y encomenderos burgaleses en Indias (1492-1600), Burgos, Universidad, 2001.

 

María Monserrat León Guerrero