Badosa Cuatrecasas, Arcángela. El ángel de la caridad. Sant Joan les Fonts (Gerona), 16.VI.1878 – Elda (Alicante), 27.XI.1918. Venerable carmelita (OCarm.).
La hermana Arcángela Badosa (bautizada con el nombre de Carmen), conocida como El ángel de la caridad, nació en el seno de una familia profundamente piadosa y fue probada por la adversidad desde su infancia. Fue la tercera de ocho hermanos.
Su padre, Pedro Badosa Bassols, labrador de profesión, murió el 24 de julio de 1888 a los treinta y ocho años de edad. Su madre, Teresa Cuatrecasas Casanova, murió el 28 de agosto de 1889 a los treinta años de edad.
Quedaron huérfanos siete hermanos, uno de ellos, Ignacio, había fallecido. Los huérfanos fueron acogidos y educados cristianamente por sus tíos Francisco Gelada, mecánico de profesión, y Joaquina, matrimonio, sin hijos, que vivía en la Canya, caserío situado entre Sant Joan les Fonts y Olot. Muerto prematuramente su tío, Joaquina decide trasladarse con sus sobrinos a Olot en busca de nuevos horizontes. A los doce años, Carmen comienza a trabajar en el Taller Vayreda, donde se moldeaban imágenes de santos, industria de gran solera en la ciudad de Olot. Fue un modelo de laboriosidad y entrega al trabajo que hacía compatible con las prácticas de la vida cristiana. Tenía un precedente admirable en la obrera santa de Olot, Liberada Ferrarons, quien, como ella, va camino de los altares.
Todos los hermanos abrazaron la vida religiosa, mientras ella permaneció en Olot cuidando a su buena tía Joaquina hasta su muerte, ocurrida el 17 de noviembre de 1907.
Con vocación decidida a la vida religiosa y siguiendo el ejemplo de sus hermanas mayores, pidió ingresar en el noviciado de las Hermanas de la Bienaventurada Virgen María del Monte Carmelo, cuya casa madre radicaba en Orihuela. El 1 de enero de 1908 inició el postulantado y el 7 de julio vistió el hábito de carmelita, con el nombre de Hermana Arcángela. El 2 de agosto de 1909 hizo la profesión religiosa.
Destinada al hospital de Elda, fue el único lugar donde trabajó como hermana carmelita; su estancia, por otra parte, no fue muy larga. Durante diez años aproximadamente estuvo entregada con el alma y la vida al cuidado de los enfermos hasta el día de su muerte, el 27 de noviembre de 1918. El hecho de que se la conozca como El ángel de la caridad resulta suficientemente elocuente. Entre otros tuvo a su cargo a los enfermos de tuberculosis; esta enfermedad fue la que la llevó al sepulcro.
Entre el pueblo fiel ha tenido siempre fama de santidad. A pesar de los años transcurridos no se ha perdido, más aún, ha ido incrementándose.
Recogiendo el deseo de sus numerosos devotos, la congregación de sus hermanas y el propio obispado de Orihuela se creyó conveniente incoar el proceso diocesano de canonización. Se abrió en la capilla del Carmen de dicha ciudad el día 18 de diciembre de 1999 y se clausuró, en una ceremonia emotiva, el día 30 de diciembre de 2002. Exhumados sus restos en el cementerio de Elda el 30 de octubre de 2002, descansan actualmente en la parroquia de Santa Ana de Elda, adonde fueron trasladados el día 1 del mes de noviembre de 2002.
Bibl.: Q. Padorns (OCarm.), Biografía de la Hna. Arcángela Badosa, ms., s. f. (Archivo General de las Hermanas Carmelitas de la Bienaventurada Virgen María del Monte Carmelo, Orihuela); R. López Melús (OCarm.), Vida de la Hna. Arcángela Badosa Cuatrecasas, religiosa carmelita de Orihuela, Orihuela, Hermanas Carmelitas, 1964.
Balbino Velasco Bayón, OCarm.