Ayuda

Francisco Rodríguez-Chacón y González

Biografía

Rodríguez-Chacón y González, Francisco. Marqués de Iniza (I). Paterna del Río (Almería), 31.V.1687 baut. – Berja (Almería), 23.XI.1746. Regidor perpetuo de la villa de Paterna y coronel de las Guardias Viejas de Castilla de la costa del Reino de Granada.

Nacido en la pequeña localidad de Paterna, hoy Paterna del Río, en las Alpujarras almerienses, Francisco Rodríguez-Chacón escenifica a la perfección el tremendo ascenso social que experimentaron cientos de familias de medianos labradores asentados en el Reino de Granada tras la expulsión de los moriscos bajo Felipe II. Tras la sangrienta guerra que se sostuvo durante el bienio de 1568-1570, los nuevos pobladores, venidos del interior peninsular, se beneficiaron de los bienes agrarios confiscados a los cristianos nuevos, y entre ellos sin duda alguna se encontraron los primeros ascendientes de quien, con el tiempo, llegó a ser I marqués de Iniza.

Su ascendencia lleva hasta su abuelo y homónimo, Francisco Rodríguez Arévalo, casado en 1669 con Ángela de Valdivia, quienes tuvieron por hijo a Jerónimo Rodríguez, quien empezó a usar también el más ilustre apellido de Chacón. De éste y de su esposa Ana González López nació Francisco Rodríguez-Chacón, bautizado en la parroquia de Paterna el 31 de mayo de 1687.

Muy escasos, por no decir nulos, eran los títulos de nobleza que por aquel entonces disfrutaba esta estirpe, hablando en puridad. Su parentela se hallaba inserta en la categoría social que se puede denominar como labradores ricos, que habían conseguido, a través de muy diversas prácticas y estrategias, acumular numerosas suertes de población, controlando importantes patrimonios agrarios. Desde ahí comenzaron a controlar algunos cargos de regidor en el Ayuntamiento, a la vez que el muy lucrativo oficio de escribano público de localidades vecinas, como la de Laujar de Andarax. Tras el poder, como sucedió con tantas otras familias de similar trayectoria, Francisco Rodríguez-Chacón fue recorriendo de forma acelerada la carrera de los honores. Entre ellos, una serie de cargos relacionados con la milicia. Aprovechando las siempre enormes necesidades financieras del Estado, Francisco Rodríguez-Chacón asentó en 1734 con la Corona la leva de un regimiento de infantería, que habría de pagar a su costa. A cambio de ello, obtendría no sólo la patente de coronel para su persona, sino además los empleos de capitán, coronel y subteniente para otros tantos de sus hijos, a los que además se les habría de premiar con sendos hábitos de la Orden de Santiago. De esta forma, en 1740, sus vástagos Pedro Antonio y Francisco Jerónimo ingresaron en ella como caballeros, lo mismo que su propio padre, quien vino a utilizar la merced destinada al primogénito, Fabián Bernardo, que había muerto poco antes.

En el mismo sentido hay que integrar la obtención del marquesado de Iniza, un título beneficiado que Felipe V había entregado al prior y canónigos del Real Monasterio de San Isidoro de León para que lo vendiesen y aplicasen su producto a la reedificación de la iglesia y convento. Por la considerable cantidad de 22.000 ducados, en 1730 el rico oligarca alpujarreño pasó a formar parte de la nobleza titulada.

Su extenso e interesante testamento, otorgado en 1745 de mancomún con su mujer María de Moya y Alcázar, muestra una clara elevación social, simbolizada a nivel local en su condición de patronos de la capilla mayor del Convento de religiosas de San Pedro de Alcántara de la villa de Laujar. De sus varios hijos proceden diversas ramas familiares, de entre las que destacan, aparte de la primogénita por la que fue discurriendo el marquesado de Iniza, una segunda, que arrancó de su hijo tercero, Francisco Jerónimo, que acabó dando a los condes de Chacón, título pontificio autorizado en España en 1871.

 

Fuentes y bibl.: Archivo General de Simancas, Cámara de Castilla, leg. 2500; Archivo Histórico Nacional, Consejos, leg. 8977, pieza 742; Órdenes Militares, Santiago, exp. 2318; Archivo de la Real Chancillería de Granada, 402-3380-11; Archivo del Ministerio de Justicia, Títulos Nobiliarios, Marquesado de Iniza.

V. de Cadenas y Vicent, “De cuatro títulos de Castilla que, para beneficiar, concedió el rey Felipe V a Real Colegiata de San Isidoro”, en Hidalguía (Madrid), n.º 19 (1956), págs. 753-776; J. L. Ruz Márquez, Los escudos de Almería. Estudio heráldico y genealógico de los linajes de Almería y provincia, Almería, Gráficas Murgis, 1986, pág. 194; A. Gil Albarracín, “El convento de San Pascual Bailón de Laujar de Andarax: conjunto barroco de la Alpujarra almeriense”, en M. Peláez del Rosal (dir. y ed.), VII y VIII Curso de Verano. El Franciscanismo en Andalucía (I). Conferencias del VII curso de verano. El arte franciscano en las catedrales andaluzas (Priego de Córdoba, 31 de julio al 5 de agosto de 2001). Conferencias del VIII curso de verano (Priego de Córdoba, 22 al 26 de julio de 2002), Córdoba, Cajasur, 2003, págs. 456-470; F. Andújar Castillo, El sonido del dinero. Monarquía, ejército y venalidad en la España del siglo XVIII, Madrid, Marcial Pons, 2004, págs. 122-123; E. Soria Mesa, “La nobleza del reino de Granada: estado de la cuestión y líneas de investigación”, en M. Barrios Aguilera y Á. Galán Sánchez (eds.), La Historia del Reino de Granada a debate. Viejos y nuevos temas. Perspectivas de estudio, Málaga, Diputación, 2004, pág. 382; F. Andújar Castillo, “Capitanes generales y capitanías generales en el siglo XVIII”, en Revista de Historia Moderna. Anales de la Universidad de Alicante (Alicante), n.º 22 (2004); Á. Atienza López, “Fundaciones y patronatos conventuales y ascenso social en la España de los Austrias”, en E. Soria Mesa (dir.), Congreso Internacional, Las Elites en La Época Moderna. La Monarquía Española (25-27 de octubre de 2006), Córdoba, Universidad, 2006 (inéd.); La nobleza en la España Moderna. Cambio y continuidad, Madrid, Marcial Pons, 2007, pág. 53.

 

Enrique Soria Mesa