Casado Martín, César. Pitillas (Navarra), 4.VI.1914 – Barcelona, 25.VII.1991. Militar.
Hijo de Victoriano Casado Salvador y de Juana Martín Fraile. El 31 de octubre de 1930 ingresó como soldado voluntario en la 1.ª compañía del 1.er batallón del Regimiento de Telégrafos. En mayo de 1932, ascendido a cabo, fue destinado a la Agrupación de Radiotelegrafía y Automovilismo de África, en la que cesó en abril de 1934 por pasar a la Guardia Civil. En esta fue destinado a la Comandancia de Logroño, en el puesto de Aguilar del río Alhama, como guardia de 2.ª. Cesó el 20 de abril de 1936 al pasar a la Comandancia de Oviedo, grupo B, para hacerse cargo como primer jefe del puesto de La Felguera. Se incorporó el 16 de mayo, pero cayó enfermo y le fue concedido un mes de licencia desde el 7 de julio. Marchó a convalecer en Aguilar del Río Alhama, donde le sorprendió la guerra. Partidario de la sublevación, de inmediato se sumó a la fuerza del puesto y el día 29 partió hacia Vitoria, desde donde al día siguiente marchó a Pamplona.
Allí formó parte de una sección de veinticinco hombres que fue encuadrada en la 4.ª centuria de Falange y se incorporó el 31 a la columna establecida en Lesaca, que mandaba el comandante Federico Galbis Murphy, un mutilado de guerra de las campañas africanas. Tomó parte en las operaciones llevadas a cabo para ocupar las peñas de Aya y continuó combatiendo hasta el 3 de septiembre, cuando cayó herido en la toma de Behovia y ocupación de los dos fortines que rodeaban el fuerte de San Marcial. Esta batalla se saldó con tan sólo dos falangistas ilesos, ya que todos los demás habían sido heridos o habían muerto. Casado Martín ofreció una excepcional resistencia hasta la llegada de refuerzos, por lo que le fue concedida la Cruz Laureada de San Fernando y se le ascendió a cabo.
El 8 de septiembre, restablecido, se reincorporó a su unidad y el 12, en la toma del monte Jaquelviz, volvió a ser herido gravemente en el muslo derecho con fractura de fémur; tuvo que permanecer hospitalizado hasta el 4 de diciembre.
Convaleciente hasta el 7 de mayo de 1937, partió para Aguilar del Río Alhama con dos meses de licencia. Se incorporaba a Vitoria el 6 de julio, donde quedó prestando servicio en puestos auxiliares al no hallarse plenamente restablecido.
Por orden de la Secretaría de Guerra del 21 de ese mes (Boletín Oficial del Estado, 278) le fue otorgada la Medalla de Sufrimientos por la Patria. El 27 de agosto se incorporaba en Navarra a la 5.ª bandera de Falange, aunque por poco tiempo, ya que el 20 de septiembre pasó a la Comandancia de Procedencia y el 26 de octubre se incorporaba como jefe al puesto de Ciaño.
El 9 de febrero de 1938 fue destinado a la Comandancia de Logroño y se le nombró comandante del puesto de Casa Burgos. Allí permaneció hasta el 15 de junio, fecha en que pasó a prestar servicios de investigación e información en los campos de concentración, donde permaneció hasta el final del año.
El 25 de marzo de 1939 fue destinado al Ministerio de la Gobernación, puesto en que se encontraba cuando finalizó la guerra.
Su salud estaba seriamente quebrantada y el 1 de junio le fueron concedidos otros dos meses de licencia; luego se reincorporó al Ministerio hasta el 19 de noviembre, en que fue destinado a la Comandancia de Badajoz. Allí ascendió a sargento por méritos de guerra el 13 de diciembre.
El 1 de enero de 1940 contrajo matrimonio con Florentina María del Pilar Ugarte García, y en abril le fueron concedidas la Medalla de la Campaña, dos cruces al Mérito Militar y otras dos de Guerra, por el tiempo que estuvo en combate. El 21 de junio ascendía a brigada y el 5 de julio le volvían a ser concedidos otros dos meses de licencia por enfermedad. Reincorporado, se le destinó a la Comandancia de Marruecos, aunque continuó prestando servicios en el Ministerio de la Gobernación, y en él permaneció hasta que el 10 de marzo de 1941 se le destinó al 1.er Tercio Móvil, prestando servicios en el mismo Ministerio. El 8 de julio se le autorizaba a marchar como voluntario a combatir en Rusia con la División Azul. En Alemania y Polonia realizó servicios de gendarmería. En el segundo de los países citados cayó enfermo y hubo de ser hospitalizado el 22 de septiembre. Se le dio de alta el 27 de octubre.
El 4 de agosto de 1942 regresó a España y, tras disfrutar dos meses de licencia, se incorporó al Ministerio.
Transcurrieron sin novedad el resto del año y el siguiente. En junio de 1944 realizó un curso de aptitud para el ascenso a teniente y fue considerado apto.
Continuó en su mismo destino en comisión de servicios hasta el 9 de mayo de 1945, cuando se le trasladó al Parque de Automovilismo, donde se hizo cargo de la 3.ª sección de la 2.ª compañía.
Ante el problema que plantearon los maquis al final de la Segunda Guerra Mundial, el 27 de mayo de 1946 partió concentrado hacia Jaén; su destino era el sector del Centenillo. Allí permaneció hasta el 27 de septiembre, fecha en que marchó a Alcalá la Real; fue felicitado por su actuación en un encuentro con maquis que se saldó con la muerte de tres de ellos.
A requerimiento del comandante jefe de la Comandancia de Jaén continuó a sus órdenes, incorporándose el 21 de marzo de 1947 al puesto de Alcaudete.
Pasó al mes siguiente, habiendo sido ascendido a teniente, al de Villapalacios (Albacete), y fue definitivamente destinado a la Comandancia de Jaén, causando baja en su anterior destino por Orden de 9 de octubre.
Fue entonces cuando se hizo cargo del mando de la 1.ª compañía y línea de Valverde del Júcar, aunque no llegó a tomar posesión de él por encontrarse concentrado en la 135 Comandancia (Albacete). Se le nombró comandante accidental de la línea de Villarrobledo el 30 de noviembre, ocasión en que fue de nuevo felicitado, en febrero de 1948, por su labor contra los maquis. Había detenido a dos de ellos, uno de cierta fama, Sebastián Moya Moya, apodado Chichango, y a ciento veintinueve enlaces y encubridores de los mismos. Se le concedió por ello la Cruz de la Orden del Mérito Militar con distintivo blanco de la 1.ª clase. En mayo de ese mismo año capturó a otro conocido maquis, Francisco Castillo Parras, alias Maravillas, panadero de Villarrobledo.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), hoja de servicios; Archivo Histórico de la Guardia Civil (Madrid).
Galería Militar Contemporánea, vol. I, Madrid, Servicio Histórico Militar, 1980-1984, pág. 225; M. Morales Romero- Girón, La guerra civil en Guipúzcoa. Julio-agosto 1936, Valladolid, Librería Santarén, 1937, págs. 99-102; J. Martínez Esparza, Con la división Azul en Rusia, Madrid, Ejército, 1943; T. Cossias, La lucha contra el “Maquis” en España, Madrid, Editora Nacional, 1956; R. García Valiño, “La campaña del Norte”, en R. Fernández Cuesta y Merelo et al., Guerra de Liberación Nacional, Zaragoza, Universidad, 1961, págs. 259-313; J. M. Martínez Bande, La guerra en el Norte (hasta el 31 de marzo de 1937), Madrid, San Martín, 1969, págs. 68-70 y 75-76; F. Aguado Sánchez, El maquis en España: su historia, Madrid, San Martín, 1975; C. Revilla Cebrecos, Tercio de Lácar, Madrid, G. del Toro, 1975, pág. 57; J. M. Garmendia, “La batalla de San Marcial”, en Historia General de la Guerra Civil en Euskadi, vol. I, San Sebastián-Bilbao, Luis Aramburu-Naroli, 1979, págs. 77-83; S. Saint-Loup y S. Balaguer, La división Azul: cruzada española de Leningrado al Gulag, Madrid, Fuerza Nueva, 1980; J. J. González Sevillano, Muerte y pasión de un maquis, “El Chichango”, s. l., J. J. González Sevillano, 1985; J. García Hispan, La Guardia Civil en la división Azul, Alicante, J. García Hispan, 1992; F. Moreno Gomez, La resistencia armada contra Franco. Tragedia del maquis y la guerrilla, Barcelona, Crítica, 2001, págs. 452 ss. y 639; J. Sánchez Cervello, Maquis: el puño que golpeó al franquismo: la Agrupación Guerrillera de Levante y Aragón (AGLA), Madrid, Flor del Viento, 2003; J. Rodrigo Sánchez, “Campos de concentración en tiempos de guerra: Historia del mundo concentracionario franquista (1936-1939)”, en Campos de concentración y el mundo penitenciario en España durante la guerra civil y el franquismo, Barcelona, Crítica, 2003, págs. 133-149; J. Blázquez Miguel, Historia Militar de la Guerra Civil española, vol. II, Madrid, J. Blázquez, 2003, pág. 252.
Juan Blázquez Miguel
