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Isidro de las Cagigas López de Tejada

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Biografía

Cagigas López de Tejada, Isidro de las. Carmona (Sevilla), 17.IV.1891 – Madrid, 9.I.1956. Diplomático, africanista e historiador arabista.

Primogénito del magistrado Ramón de las Cagigas Larraz y de Isabel López de Tejada y López del Pozo, contrajo matrimonio con Elisa Martínez González de Arce, con quien tuvo dos hijos: Isidro, nacido en Madrid, e Isabel, en Alcazarquivir (Marruecos).

Se ha calificado a Isidro de las Cagigas de hombre polifacético por su comprometida participación en la vida cultural de la primera mitad del siglo XX. Ejerció de urbanista, arqueólogo, museólogo, restaurador, coleccionista, numismático, bibliotecario, pintor, crítico de arte y de obras de teatro, musicólogo, literato, poeta y conferenciante. De todo ello dejó constancia a lo largo de más de ciento veinte obras publicadas.

En su vida y obra pueden distinguirse cuatro grandes etapas bastante bien definidas. La primera de ellas, entre 1898 y 1917, comprende los años de formación y primeros pasos de historiador. Se inició en Granada, por traslado del padre a la Audiencia Provincial. Ahí, Isidro cursó los estudios de bachillerato y universitarios, Derecho y Filosofía y Letras. El rumbo para ser diplomático e historiador arabista se lo marcaron, de una parte, la figura relevante de su abuelo Isidro de las Cagigas de Argos, hombre de amplia cultura, que dominaba varios idiomas y participaba en la vida pública del momento, al ser secretario particular y administrador de los duques de Montpensier. Por otra parte, el ambiente cultural en la ciudad de la Alhambra, muy influenciado entonces por la sombra del diplomático y reconocido escritor Ángel Ganivet. Y, en paralelo, su creciente afición por el orientalismo, merced a las enseñanzas que recibió de los venerables maestros Leopoldo Eguílaz Yanguas y Mariano Gaspar Remiro, con quienes aprendió bien la lengua árabe, así como de Manuel Gómez-Moreno González y su hijo Manuel Gómez-Moreno Martínez, con los que se inició en las investigaciones de historia, arqueología y arte.

De las Cagigas era investigador nato y viajero incansable: visitaba ciudades, monumentos y archivos, tomaba notas, elaboraba artículos, siempre con un decisivo contenido histórico, y los remitía a revistas. En 1910 publicó su primer libro, El mirar de la maja. Elogio del Albayzín. En 1912 obtuvo la licenciatura en Derecho con brillantes notas. Desde finales de ese año y hasta 1917, por traslados sucesivos del padre, vivió en Valencia, Cáceres y Zaragoza, donde investigó en archivos sobre musulmanes, mudéjares, moriscos y judíos. A la par, colaboró con el incipiente regionalismo andaluz de Blas Infante. En 1916, en Madrid, aprobó las oposiciones a la carrera consular con 24 años.

La segunda etapa, de 1917 a 1931, es la de la consagración profesional de Isidro de las Cagigas, correspondiente a la primera parte de su labor africanista. Durante los seis primeros años se encargó del consulado de Argel, de la agencia consular de Uxda y del archivo de Sidi-Bel-Abbés en Argelia. Publicó Los viajes de Alí Bey a través del Marruecos Oriental. Tras el desastre de Annual (julio-agosto 1921), defendió con honor y coraje los intereses de España y liberó a prisioneros en manos del rebelde ‘Abd al-Krīm. Entre 1923 y 1931 fue cónsul en Alcazarquivir y en Tetuán. En ambas ciudades ejerció de urbanista, reformando y embelleciendo calles, avenidas, plazas, jardines y edificios con éxito reconocido. En 1929 participó con la conferencia “Andaluces en África” en la Semana Califal de Córdoba, donde confraternizó con Miguel Asín Palacios, Emilio García Gómez, Ángel González Palencia y Julián Ribera, entre otros.

De 1931 a 1951, la tercera etapa, son años agridulces para Isidro de las Cagigas, pues coincidió su separación de la carrera diplomática –por depuración franquista– con el apogeo de su actividad científica. En 1931, con la proclamación de la II República, fue cesado en Tetuán y designado agregado comercial en Portugal y Marruecos con residencia en Rabat. En esta ciudad coincidió, en la celebración del VIII Congreso de Estudios Superiores Marroquíes, con conferenciantes como Julio Martínez Santa-Olalla y José Ferrandis; expuso De las Cagigas la conferencia “Un traité de paix entre le roi Pierre IV d’Aragon et le sultan de Tunis Abu Isaac II (1360)”. El sultán de Marruecos Sidi Mohammed le impuso la condecoración de la Orden Cherifiana de Nixan el Alauita. Durante los casi quince años que se le apartó de su profesión (1936-1950), se dedicó a investigar mucho y a publicar estudios, principalmente de temática musulmana, en revistas (África, Al-Andalus, Hispania, etc.) y en libros, así como a impartir conferencias, que también publicó en opúsculos. Salió a la luz una gran ambición de Isidro de las Cagigas que, a la postre, ha sido la obra por la que es mayormente conocido: las Minorías étnico-religiosas de la Edad Media Española: Los mozárabes (1947-1948) y Los mudéjares (1948-1949), editadas por el Instituto de Estudios Africanos, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas. En 1953 publicó la traducción que hizo del francés al español, con prólogo suyo, de la obra La civilización árabe en España, de E. Lévi-Provençal, con quien mantuvo una cordial relación de amistad.

La cuarta y última etapa, de 1951 a 1956, es la más breve. Isidro de las Caigas volvió a África, encargado de abrir la legación consular en Trípoli. Aquí fue ascendido a ministro plenipotenciario de tercera clase y se le designó para acompañar al rey de Libia, Idris I, en viaje oficial a España, ejerciendo de guía e intérprete de árabe por diferentes ciudades del país. En agradecimiento a los servicios prestados, el rey libio le condecoró con el diploma e insignia de la Orden del Istiklal de tercer grado. En su faceta científica, al conmemorarse el 22 de abril de 1951 el V centenario del nacimiento de la reina Isabel la Católica, el Instituto de Estudios Africanos organizó en Madrid un ciclo de conferencias sobre la política africana de los Reyes Católicos, al que asistió De las Cagigas, junto con Ramón Menéndez Pidal, Leopoldo Torres Balbás, Florentino Pérez Embid y Antonio Gallego Burín, entre otros. De 1954 a 1955, en escasos nueve meses, fue ministro plenipotenciario en Irán, su último destino en el extranjero. Impartió entonces conferencias sobre cultura hispanomusulmana en Bagdad, El Cairo, Alejandría, Ammán, Jerusalén, Beirut y Damasco. En Teherán adquirió y reunió una ingente cantidad de objetos arqueológicos y antigüedades, la cual no pudo llegar a conformar ni inventariar porque le sorprendió una mortal enfermedad. La mayor parte de tan valiosa colección se atesora en la actualidad en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid.

 

Obras de ~: El mirar de la Maja. Elogio al Albayzín, Florencia, Librería Ferrante Gonnelli, 1910; “Pinturas murales de la iglesia de la Sangre, en Liria”, en La Alhambra, 353 (1912), págs. 513-515; “Dos tablas catalanas”, en La Alhambra, 355 (1912), págs. 565-566; “Documentos aragoneses, I: carta del rey de Castilla, negando la obediencia al antipapa Luna (año 1416)”, en Revista del Centro de Estudios Históricos de Granada y su Reino, IV (1914), págs. 67-72; “Apuntaciones para un estudio del regionalismo andaluz”, en Bética, 16-18 (1914), págs. 1-4; “Andalucismo. Apuntaciones sobre los elementos y características del tipo andaluz (pruebas psicológicas)”, en Bética, 40 (1915), págs. 35-37; “Algunas notas para establecer las etimologías orientales de lugares geográficos de Cáceres: acehuche”, en Revista del Centro de Estudios Históricos de Granada y su Reino, V (1915), págs. 298-301; “Documentos aragoneses, II: carta Puebla de Salilla”, en Revista del Centro de Estudios Históricos de Granada y su Reino, VI (1916), págs. 122-126; “Sobre museos”, en La Alhambra, 433 (1916), págs. 159-160; “Notas sobre el regionalismo andaluz”, en Andalucía, 8 (1917), págs. 6-8; “Andalucía y Marruecos”, en Andalucía, 10 (1917), págs. 6-7; “Uxda: su importancia comercial”, en Revista de Geografía Colonial y Mercantil, 14 (1917), págs. 441-445; “Las comunicaciones con Uxda”, en Revista de Geografía Colonial y Mercantil, 15 (1918), págs. 384-386; Los viajes de Alí Bey a través del Marruecos Oriental, anotados y comentados, Madrid, Real Sociedad Geográfica, 1919; “La urbanización de la ciudad de Alcazarquivir”, en Revista Hispano-Africana, 27-28 (1927), págs. 4-5 y 5-8; “Notas sobre Marruecos”, en Unión Patriótica (mayo-junio, 1928), págs. 28 y 18; “La urbanización de Alcazarquivir”, en Unión Patriótica, (mayo-junio, 1928), págs. 24-26 y 19-22; Libro Verde de Aragón: documentos aragoneses, Madrid, Compañía Iberoamericana de Publicaciones, S.A. 1929; “Andaluces en África”, en Boletín de la Real Academia de Córdoba de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes, 25 (1929), págs. 101-142; “De prosodia semítica en la Península”, en Boletín de la Universidad de Granada, 21 (1932), págs. 413-424; “Apuntes sobre el valor de las monedas marroquíes en estos últimos tiempos”, en Boletín de la Real Academia de Córdoba de Ciencias, Bellas Letras y Nobles Artes, 42 (1934), págs. 261-272; “Un traité de paix entre le roi Pierre IV d’Aragon et le sultan de Tunis Abū Ishāk II (1360)”, en Hespéris (París), XIX, fasc. I-II (2º- 4º trimestres de 1934), págs. 65-77; “Sobre ‘Galayos’”, Revista de Filología Española, XXII (1935), págs. 286-287; “Adarve”, en Revista de Filología Española, XXIII (1936), págs. 63-66; “Al-Ándalus (unos datos y una pregunta)”, en Al-Andalus, 4 (1936), págs. 205-214; “Alcazarquivir”, en Marruecos turístico (Tetuán), 7 (1936); El mundo en conflicto: ensayos sobre las causas determinantes de la guerra, Madrid, editorial Pace, 1944; Autobiografía, 1945 (inéd.); “Sobre numismática hispano-musulmana, necesidad de su puesta al día”, en África, 37-38 (1945), págs. 20-23; Autobiografía, 1945 (inéd.) “Berberización en España: apuntes para su estudio”, en Cuadernos de Estudios Africanos (Madrid), 2 (1946), págs. 113-131; “Tres cartas públicas de comanda”, en Sefarad, 6 (1946), págs. 73-93; “Cuestión iraniana”, en África, 52 (1946), pág. 51; “De etnografía andaluza medieval. Aportaciones a la frontera del andaluz”, en África, 53 (1946), págs. 20-25; “Las postas califales andaluzas”, en África, 56-57 (1946), págs. 9-11; “Apuntes sobre el valor de las monedas marroquíes en estos últimos tiempos”, en África, 58 (1946), págs. 9-11; “Bidáa”, en África, 58 (1946), pág. 40; “Sobre urbanización de Alcazarquivir. Apuntes extraídos de mis memorias”, en África, 66-67 (1947), págs. 20-24; “Notas sobre Pakistán”, en África, 68-70 (1947), págs. 95-97; “El problema de las colonias italianas”, en África, 71-72 (1947), págs. 55-56; “El caso de Palestina”, en África, 73 (1948), págs. 33-34; “Notas sobre el Yemen”, en África, 74 (1948), pág. 83; Memorias étnico-religiosas de la Edad Media Española. I Los mozárabes, ts. I y II, Madrid, Instituto de Estudios Africanos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1947-1948; Memorias étnico-religiosas de la Edad Media Española. Los mudéjares, ts. I y II, Madrid, Instituto de Estudios Africanos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1948-1949; “La sombrilla imperial”, en África, 91, (1949), págs. 5-6; Las minorías en el Islam y el caso de Palestina, Madrid, Instituto de Estudios Africanos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1949; “Sobre la internacionalización de Jerusalén”, en Estudios Internacionales y Coloniales II, Madrid, Instituto Francisco de Vitoria del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1949, pág. 63-72; “Introducción al estudio jurídico-administrativo de la institución del Habús en Marruecos”, en Cuadernos de Estudios Africanos (Madrid), 10 (1950), pp. 9-22; “La batalla de Simancas del año 939”, en Archivos Leoneses, 7 (1950), págs. 53-72; “Problemas de minoría y el caso de nuestro medievo”, en Hispania: Revista española de historia, 40 (1950), págs. 506-538; “Un viajero egipcio del siglo XIV en el reino de Granada”, en Archivos del Instituto de Estudios Africanos, 14 (1950), págs. 55-75; Andalucía musulmana. Aportaciones a la delimitación de la frontera del Ándalus (Ensayo de etnografía andaluza medieval), Madrid, Instituto de Estudios Africanos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1950; “Síntesis de la cultura y de la ciencia hispanomusulmana”, en África, 109 (1951), págs. 2-6; Sevilla almohade y los últimos años de su vida musulmana, Madrid, Instituto de Estudios Africanos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1951; Dinastías menores del Magrib. I, Los Banu Salih de Nakur (estudio crítico), Tetuán, Editora Marroquí, 1951; “Crónica de un viaje: Trípoli, Túnez, Bona, Argel, Constantina, Gafsa y regreso”, en África, 122 (1952), págs. 13-17; “Lo español en Trípoli”, en África, 132 (1952), págs. 7-9; Tratados y convenios referentes a Marruecos, Madrid, Instituto de Estudios Africanos, 1952; E. Lévi-Provençal, La civilización árabe en España, pról. y trad. de ~, Madrid, Espasa-Calpe, Austral, 1953; “Topónimos alpujarreños”, en Al-Andalus, XVIII (1953), págs. 295-322; “Una carta aljamiada granadina”, en Arabica, 1 (1954), págs. 272-275; “Un hallazgo de monedas árabes”, en Al-Andalus, XXI (1956), págs. 199-209.

 

Fuentes y bibl.: Archivo del Ministerio de Asuntos Exteriores en Madrid, Expediente personal de Isidro de las Cagigas López, leg. 477, nº 33.788; Archivo de la Universidad de Granada, Expediente académico de Isidro de las Cagigas López de Tejada, leg. 2624/3; Archivo de Isidro de las Cagigas López de Tejada.

M. Méndez Bejarano, Diccionario de escritores, maestros y oradores naturales de Sevilla y su actual Provincia, Sevilla, Gironés, 1922-1925, págs. 237-387; M. García-Sañudo y Giraldo, “Una lanza por la verdad. La labor de Cagigas en Tetuán”, La Gaceta de África, 15 de julio de 1931; T. García Figueras, “Isidro de las Cagigas”, en La Vanguardia Española, 18 de enero de 1956, pág. 4; J. T. Monroe, Islam and the Arabs in Spanish Scholarship: Sixteenth Century to the Present, Leiden, E. J. Brill, 1970, págs. 236-238; Diccionario Enciclopédico Espasa, t. III, Madrid, Espasa Calpe, 1978; R. Gil Grimau, Aproximación a una bibliografía española sobre el norte de África, 1850-1980, Madrid, Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y de Cooperación, 1982, págs. 162-163; J. M. Cuenca Toribio, Semblanzas andaluzas (galería de retratos), Madrid, Espasa Calpe, 1984, págs. 285-287; A. Bravo Nieto, Arquitectura y urbanismo español, Sevilla, Consejería de Obras Públicas y Transportes, Dirección General de Arquitectura y Vivienda, 2000, págs. 79 y 97-101; M.-E. Gutiérrez Camacho, Vida y obra de Isidro de las Cagigas, Sevilla, Fundación Blas Infante, 2006; A. J. Darías Príncipe, “Un ejemplo modélico de urbanismo de la acción española en el protectorado marroquí: Alcazarquivir, desde las reformas del cónsul De las Cagigas hasta el plan de Muguruza”, en Anuario de Estudios Atlánticos, 53 (2007), págs. 543-562; J. A. González Alcantud y A. González Troyano, “Estudio preliminar”, en El mirar de la Maja. Elogio al Albayzín, 1910, ed. facsímil, Granada, Universidad de Granada, 2009; J. A. González Alcantud, “Tres andalucistas en el olvido: Isidro de las Cagigas, Antonio Gallego Burín y Rodolfo Gil Benumeya”, en Andalucía en la historia, 29 (2010), págs. 1020-1022; M. E. Gutiérrez Camacho, “Un precursor del ideal andaluz: aportación de Isidro de las Cagigas”, en P. Ruiz-Berdejo Gutiérrez (coord.), El ideal andaluz en el siglo XXI, Fundación Centro de Estudios Andaluces, 2010, págs. 23-39; M. Adila, “Periodistas y colaboradores de la prensa española en Marruecos”, en Intus-Legere Historia, 7 (2013), pág. 116; G. Aranda Pastor, “Isidro de las Cagigas López y las antigüedades iranias de la colección Martínez-Santa-Olalla del Museo Arqueológico Nacional”, en Boletín del Museo Arqueológico Nacional, 34 (2016), págs. 287-304.

 

Gaspar Aranda Pastor