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Fernando Miyares y Mancebo

Biografía

Miyares y Mancebo, Fernando. Caracas (Venezuela), 2.VI.1780 – Cádiz, 1817. Mariscal de campo del Ejército y capitán 1º de Ingenieros.

Era hijo del capitán general de Venezuela, D. Fernando Miyares y Pérez Bernal, mariscal del Real Ejército, y de doña Inés Mancebo Quiroga.

Ingresó en el Ejército en septiembre de 1792 en la clase de Cadete del Regimiento de Infantería de León. Con el citado regimiento participó en la Guerra de la Convención o del Rosellón en los años 1794 y 1795, alcanzando por méritos de campaña, el empleo de segundo teniente.

El 30 de octubre de 1801 ingresaba en el Cuerpo de Ingenieros como ayudante, después de aprobar los exámenes reglamentarios. En 1803 con el grado de teniente de Ingenieros, era nombrado ayudante del Regimiento Real de Zapadores y Minadores, que había sido creado ese mismo año.

Al iniciarse la Guerra de la Independencia se encontraba en Dinamarca formando parte de la División española mandada por el marqués de la Romana. Al llegar las noticias del dos de mayo en Madrid, casi toda la división, junto con Miyares, conseguía embarcar en una escuadra inglesa el 5 de septiembre de 1808, que les desembarcaba en La Coruña, pasando a formar parte del Ejército de Galicia o de la “Izquierda”. Miyares había tenido un importante protagonismo en la citada evasión de Dinamarca. En efecto, el marqués de la Romana envió al capitán de zapadores don Fernando Miyares a Faaborg y Svendbórg, con órdenes para el regimiento de Caballería de Villaviciosa y el batallón ligero de Barcelona, que debían pasar inmediatamente a Langueland a reforzar al batallón de Cataluña, con objeto de ayudarle a posesionarse por completo de la isla de Langueland, donde debían ser embarcados en una escuadra británica.

Con el Ejército de Galicia se halló en gran número de operaciones, como la batalla de Espinosa de los Monteros en noviembre de 1808 en la que resultó gravemente herido, en las acciones de Cabezón de la Sal, en la sorpresa de Benavente, en la batalla de Medina del Campo, la acción de Aracena y en el ataque y retirada en mayo de 1812 sobre Castalla. En la primera batalla de Castalla (julio 1812), “el ala izquierda (española) estaba compuesta de infantería conducida por el coronel Miyares con tres Batallones y la caballería a las órdenes del brigadier Santisteban con un Regimiento y dos Escuadrones, además de 30 zapadores […]”.

En junio de 1810 había abandonado el Cuerpo de Ingenieros pasando al de Estado Mayor como ayudante general. Siguiendo con el Ejército de la Izquierda, en abril de 1813 estuvo en la acción de Yecla, en la que resistió a fuerzas muy superiores en número, en la retirada, en junio de ese mismo año hacia Requena, mandando la 1ª División, en el sitio de Tortosa hasta la capitulación de la guarnición francesa y finalmente en el bloqueo de Peñíscola. El bloqueo de la plaza citada había sido encargado a Miyares en julio de 1813, pero no fue hasta diciembre cuando se iniciaba el sitio en regla, pero a pesar de ser bombardeada la plaza desde el 18 de enero, no fue entregada hasta el 22 de mayo de 1814.

Una vez abolido el Cuerpo de Estado Mayor, fue nombrado cuartel maestre y mayor general de Infantería y Caballería del 2º Ejército, cargo que ejerció hasta el mes de noviembre de 1814. Encontrándose en Cádiz para embarcar con licencia, rumbo a Guatemala, recibió la orden de ponerse al mando de las tropas expedicionarias a América, que estaban estacionadas en el mismo puerto. Llegados a Veracruz el 18 de junio de 1815, marchaba rápidamente con su División hasta Jalapa, donde batía en junio del último año a los insurrectos, en el llamado Puente del Rey y en el siguiente mes, en el paso de San Juan. En agosto, siempre de 1815, se hacía cargo de la Comandancia General del Distrito de las Villas de Jalapa, Córdoba y Orizaba, así como de la Gobernación de Perote. Después de realizar otras operaciones, en una de las cuales resultó herido, construyó, entre octubre y noviembre del mismo año, el camino militar de Jalapa a Veracruz. Fernando Miyares y Mancebo proyectó, además, una fortificación que, desde un punto prominente en la topografía, debía resguardar el tránsito en el camino real construido por el gobierno borbónico del siglo XVIII. El fortín de Órdenes Militares fue de suma importancia por estar localizado en un paso natural que permite salvar las barrancas y corrientes fluviales de la zona. Tras estas brillantes acciones fue nombrado gobernador de Veracruz.

En enero de 1816 firmaba un reconocimiento realizado por él, que titulaba Relación circunstanciada del estado de las Fortificaciones existentes en la plaza de Veracruz, sus costas y Real Fuerza de San Juan de Ulúa en fin del año de 1815, confirmando las observaciones realizadas por el ingeniero Miguel del Corral, más de 30 años antes.

Pacificada la provincia de Veracruz, en abril de 1816, era relevado del mando, cuestión que había solicitado anteriormente dada su delicado estado de salud. Vuelto a España en abril de 1816, fallecía meses más tarde. En el Estado Militar de España del siguiente año, aún figura como brigadier, desapareciendo del de 1817.

 

Fuentes y bibl.: Archivo General Militar de Segovia (AGMS.). Expedientes Personales.

M. Rivera Cambas, Historia Antigua y Moderna de Jalapa y de los revolucionarios del Estado de Veracruz, México, Imprenta de I. Cumplido, 1869; VV. AA., El Cuerpo de Ingenieros del Ejército. Resumen Histórico de su Organización y Servicios durante la Guerra de la Independencia, Madrid, Memorial de Ingenieros, 1908; J. López Muiños, Algunos aspectos de la Ingeniería Militar española y el Cuerpo Técnico, Madrid, Ministerio de Defensa, 1993; J. Ortiz Escamilla, Fuerzas militares en Iberoamérica siglos XVIII y XIX, México D.F., Universidad Veracruzana, 2005; A. J. Kuethe y J. Marchena Fernández (eds.), Soldados del rey: el Ejército Borbónico en América colonial en vísperas de la Independencia, Castellón de la Plana, Universidad Jaime I, 2005; J. A. Ferrandis Poblaciones, “El Real Cuerpo de Ingenieros del Ejército en la Guerra de la Independencia: Valencia y Murcia” y C. Zamorano García, “El Real Cuerpo de Ingenieros del Ejército en la Guerra de la Independencia: La División del Norte, o el Marqués de la Romana en Dinamarca, en El Real Cuerpo de Ingenieros del Ejército en la Guerra de la Independencia, 1808-1814, Madrid, Ministerio de Defensa, 2009; S. A. Vargas Matías, “Una senda de plata y sangre, el Camino Militar de la Vía por Xalapa del Camino Real de Veracruz, 1811-1816”, en Estudios de Historia Novohispana, 60 (2019), págs. 70-108.

 

Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño

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