Laffitte y Pérez del Pulgar, Julio. Conde de Lugar Nuevo (III). Sevilla, 5.III.1897 – El Puerto de Santa María (Cádiz), 17.II.1987. Diseñador.
Hijo de Rafael Laffitte García de Velasco, II conde de Lugar Nuevo —lo fue en 1920 por cesión de su padre—, de familia sevillana de origen francés, y de Francisca de Paula Pérez del Pulgar y Ramírez de Arellano (hermana del fundador del ICAI, del I marqués del Albaicín y de la mujer del I marqués de Alquibla), de ilustre familia granadina descendiente, entre otros, del célebre Hernán Pérez del Pulgar “el de las hazañas”, de los marqueses del Salar y de Valenzuela y de los condes de Luque, de Torres- Cabrera, de Alcudia y de Maseguilla. Su hermana María de los Reyes, escritora y crítica de arte, contrajo matrimonio en 1922 con José de Salamanca y Ramírez de Haro, conde del Campo de Alange.
Dotado para el dibujo y la creación artística, en 1916 participó en una exposición organizada por el Ateneo de Sevilla, para los discípulos de Gonzalo Bilbao, que tuvo lugar en el Ayuntamiento de esta ciudad, tanto en la sección de pintura (su autorretrato y un retrato de su hermana) como en la sección de cerámica (su padre trabajaba en la fábrica sevillana de cerámica Los Remedios, propiedad de su abuelo, Julio Laffitte Castro, I conde de Lugar Nuevo, lo que le permitió conocer la técnica de la cerámica artística).
Al año siguiente volvió a exponer en las dos secciones (en pintura participó con un retrato a lápiz de su hermana y con dos caricaturas). También en 1917 expuso en Madrid unos dibujos. Hacia 1923 decidió ir a Francia para formarse como pintor. Para pagarse sus estudios los compaginó dibujando telones y decorados para el teatro. Vivió a caballo entre París y Londres. Durante la Segunda República Española y la Guerra Civil permaneció en París.
Su contacto con el mundo de la moda se inició trabajando como figurinista en la casa de modas Molyneux.
Y más tarde pasó a trabajar en la casa Lucien Lelong, hasta 1940, fecha en la que regresó a España, al ser Francia invadida por los alemanes.
Durante los siguientes seis años trabajó en España.
Ya en 1939 había reivindicado en Vértice “una moda española, inspirada en lo español y creada por españoles para la mujer española”. Se encargó de diseñar el vestuario de varias películas de éxito de la época: Correo de Indias (1942), Café de París (1943) y La vida en un hilo (1945), protagonizadas por Conchita Montes y dirigidas por Edgar Neville; Goyescas (1942), en colaboración con Manuel Comba, protagonizada por Imperio Argentina (para quien Laffitte diseñó con éxito sus figurines inspirándose en los cuadros de Goya), dirigida por Benito Perojo; y Boda en el infierno (1942), protagonizada por Conchita Montenegro, dirigida por Antonio Román. Simultáneamente, abrió en Madrid, en la calle Serrano, su establecimiento de moda, en directa competencia con Rodríguez y con Balenciaga —los grandes modistos de la época—, presentando sus colecciones en los correspondientes desfiles.
Pero el éxito de crítica no significó éxito comercial, y su espíritu inquieto en busca de nueva formación y nuevas experiencias le llevó a Estados Unidos. Llegó a Nueva York en 1946, donde quedó completamente fascinado, y escribió una crónica que le publicó el diario ABC. Allí trabajó diseñando colecciones para Sak’s Fith Avenue y Hattie Cornegie, especialmente de abrigos de piel, pero las duras leyes americanas de inmigración le obligaron a abandonar Estados Unidos (pues aunque en 1950 estuvo concertado su matrimonio en Nueva York con la cubana Carmen Arango, hermana de la marquesa de la Gratitud, residente en esta ciudad, la boda no llegó a celebrarse).
Desde allí se trasladó otra vez a París, iniciándose una colaboración con la firma Jean Patou. Fue trabajando para esta firma cuando alcanzó un gran reconocimiento profesional, en la década de 1950, especialmente en 1957-1958, cuando creó una línea de ropa para una mujer moderna y cosmopolita en competición con los diseñadores de mayor prestigio de ese momento.
En 1953 contrajo matrimonio en París con la norteamericana Helen Adams, viuda sin hijos del acaudalado Richard Sheridan, con quien no tuvo descendencia.
Con ocasión de esta boda su padre le cedió este mismo año el título, por lo que pasó a ser el III conde de Lugar Nuevo (en la escritura pública de cesión figura con profesión “dibujante”). Al terminar su colaboración en Patou, el matrimonio se trasladó a vivir a Palm Beach (Florida). Allí parece que tuvo alguna actividad de diseño de vestuario para Hollywood, retirándose algo después de su trabajo, continuando desde luego con su vocación de gran viajero. Al quedar viudo hacia 1980 volvió a España, y compró una casa en Sevilla —que nunca habitó— y otra en El Puerto de Santa María (ciudad en la que nacieron su abuelo y su bisabuelo, este último alcalde de ella en 1854). Aquí, en pleno retiro y de vuelta a sus raíces, falleció en 1987.
El título de Lugar Nuevo pasó a los descendientes de su hermana, la condesa del Campo de Alange.
Bibl.: El Heraldo de Madrid, Madrid, 16 de enero de 1917; ABC, Madrid, 21 de noviembre de 1946, 26 de septiembre de 1950; La Vanguardia Española, Barcelona, 1 de julio de 1953; J. L. López Aranguren et al., Cine español, 1896-1983, Madrid, Ministerio de Cultura, 1984; VV. AA., España, 50 años de moda. Exposición celebrada en el Palau de la Virreina, la Rambla, 99, del 27 de octubre de 1987 al 10 de enero de 1988, Barcelona, Ajuntament, 1987; I. C. Rodríguez Aguilar, Arte y cultura en la prensa. La pintura sevillana (1900-1936), Sevilla Universidad, 2000.
Lucina Llorente Llorente y Pedro Rodríguez-Ponga y Salamanca
