Alameda y Liancourt, Fernando. Guadalajara, 30.V.1833 – Melilla, 9.VIII.1899. Militar, general de división procedente de Ingenieros, cruz de San Fernando de 1.ª clase, concedida por Real Orden de 26 de julio de 1857, por la acción de Pardos ocurrida el 28 de mayo de ese mismo año.
Ingresó en la Academia de Ingenieros de Guadalajara el 1 de septiembre de 1847, de donde salió como teniente, según una R.O. del 23 de septiembre de 1851, después de completar los estudios correspondientes. Su primer destino fue en el Regimiento de Zapadores Minadores, con el que en 1854 tomaba parte en los sucesos de Vicálvaro, siendo recompensado por su meritoria actuación con el ascenso a capitán de Infantería con fecha de 30 de junio ese mismo año.
En 1855 participaba en la acción en la que se derrotó a la partida carlista de Marcos Bello, pasando posteriormente como profesor a la Academia de Ingenieros, donde impartió las asignaturas de Física y Química, permaneciendo en el centro de enseñanza hasta 1857. Promovido en 1858 a capitán (R.O. de 7 de enero) se le destinaba a la Brigada Topográfica, en donde realizó una meritoria labor topográfica y geodésica. Permaneció en este destino dos años, pasando posteriormente al Regimiento de Ingenieros n.º 2.
Entre los años de 1861 y 1869 permanecía como supernumerario, trabajando como ingeniero civil en la Compañía de Ferrocarriles de Momblach a Reus, para incorporarse ese último año al Regimiento n.º 1 de Ingenieros, con el que participó en el ataque a Valencia (levantamiento republicano), siendo recompensado con el ascenso a comandante del Ejército el 12 de noviembre de 1869.
Promovido a comandante de Ingenieros el 24 de mayo de 1872, al comenzar la última Guerra Carlista era director subinspector de Ingenieros de las Vascongadas y Navarra, dirigiendo diversas obras de fortificación. Nombrado mayor general de Ingenieros del Ejército del Norte, asistió a numerosas acciones de guerra, como las de Montejurra y Velavieta, y la construcción de un puente de barcas sobre el río Orio bajo intenso fuego enemigo, siendo premiado con el ascenso a teniente coronel de Infantería. Tomó parte con posterioridad en todas las operaciones destinadas a la defensa de Bilbao (por las que fue promovido a coronel de Infantería), y más tarde en las operaciones que dieron como fruto la definitiva liberación de la plaza citada del cerco puesto por los carlistas. Era ascendido a teniente coronel de Ingenieros el 22 de mayo de 1874, y en 1875 estaba al mando del Batallón de Pontoneros, que se transformaba en Regimiento en 1883. Ascendido a coronel del Cuerpo el 21 de mayo de 1778, en 1883 se le otorgaba la dirección del citado Regimiento, con guarnición en Zaragoza. En 1880 se le encargaba la revisión del proyecto para habilitar el palacio de la Aljafería en la capital, como prisión militar, realizado por el brigadier, comandante de Ingenieros de la plaza, Francisco Javier de Zaragoza.
De 1884 a 1888, y ya como brigadier de Ingenieros a partir del 11 de julio de 1888, ejerció el cargo sucesivamente de comandante general del cuerpo en Puerto Rico, y después el mismo cargo en Burgos y Valencia. Al ascender a general de división por un R.D. de 22 de abril de 1896, se separaba del Cuerpo, siendo nombrado comandante general de la plaza de Melilla, donde permaneció hasta su fallecimiento.
Estaba en posesión de las siguientes condecoraciones, además de la Cruz de San Fernando ya citada: Cruz y Encomienda de la Orden de Carlos III, Seis Cruces de 2ª clase, dos de 3ª clase y Gran cruz de la Orden del Mérito Militar. Cruz, Placa y Gran Cruz de la Orden de San Hermenegildo, Medalla de Bilbao con tres pasadores, Medalla de la Guerra Civil 1873-1874 con dos pasadores, y declarado Benemérito de la Patria.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar de Segovia, Exps. personales.
Estados del Cuerpo de Ingenieros del Ejército, 1855-1888; Estado Militar de España; VV. AA., Memorial de Ingenieros y Revista Científico Militar. Necrologías, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1908; J. López Muiños, Algunos aspectos de la Ingeniería Militar española y el Cuerpo Técnico, Madrid, Ministerio de Defensa, 1993; L. de Sequera Martínez, Historial de las Unidades de Ingenieros en Ultramar (la Campaña de 1898), Madrid, Talleres del Centro Geográfico del Ejército, 1999; J. Carrillo de Albornoz y Galbeño, “Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando pertenecientes al Arma de Ingenieros”, en Memorial del Arma de Ingenieros (Madrid, Ministerio de Defensa), n.os 63 a 66 (2001 y 2002); I. M. Magallón Aguilar y Archivo Intermedio Militar de Melilla, La Impronta Militar en el cementerio de Melilla, Madrid, Centro Geográfico del Ejército, 2013.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño
