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Isidre Teixidó

Biografía

Teixidó, Isidre. El Barbat de Vinebre. Vinebre (Tarragona), p. s. xix – Riudoms (Tarragona), 30.IV.1844. Guerrillero carlista y bandido.

La metamorfosis común del trabucaire —llamado así por ir armado con un trabuco— solía seguir el siguiente esquema: de fernandino a absolutista, pasaba a nutrir las filas de los ultras del carlismo, prefería la acción y la violencia, si bien todavía conservaba un porcentaje mínimo de idealismo tradicionalista, para después descender a la jerarquía del bandido —ya no bandolero— sanguinario, egoísta y, con frecuencia, despiadado y cruel.

De los primeros años de Isidre Teixidó no se tienen noticias; probablemente debió de trabajar en el campo y adquirir una cierta formación. Luego, como dice Ortega y Espinó: “El Barbat era en el fondo un verdadero bandido, sanguinario y cruel, y de ello dio pruebas desde los primeros meses del levantamiento”, en 1835.

A causa de la inseguridad producida por la Guerra Civil, muchas gentes acomodadas debieron de dejar casas y haciendas, y trasladarse a zonas más seguras, lo que no siempre les libró de los bandidos; tal fue el caso de Jaume Servelló, antiguo compañero de juegos de el Barbat, a quien el bandido intentó robar la tarde del martes 21 de noviembre de 1837 en su molino de Ascó, próximo a Vinebre. Ambos lucharon a brazo partido, Servelló venció y le dejó ir. Aquella misma noche, Servelló fue asesinado por Teixidó, que desoyó las peticiones de clemencia de numerosos habitantes de Vinebre.

Terminada la Guerra de los Siete Años, como la mayoría de los partidarios de Carlos, Teixidó se presentó a las autoridades para beneficiarse del indulto concedido; mas, como había cometido varios asesinatos, se le condenó a prisión y no tardó en fugarse para volver a su carrera delictiva. No llegó a formar cuadrilla —tenía algunos cómplices—, sino que prefería actuar en solitario. Impuso la ley del terror con sus secuestros en las comarcas del Bajo Ebro. Torturaba a sus víctimas y las degollaba. Con una treta innoble, obligó a dos de sus antiguos seguidores carlistas, acogidos al indulto —Batista Sonadells (de Vinebre) y Françesc Casals (de Gratallops)— a seguirle, y les implicó en un crimen que no habían cometido. Finalmente, fue sorprendido por una patrulla de mossos d´esquadra en Riudoms (estaba al mando, el cabo Francesc Subías), en una ruinosa casa del campo, donde se había refugiado con éstos para resguardarse de la lluvia. Se produjo una lucha: Sonadells, alias Quiselin, resultó muerto en el acto; gravemente herido, el Barbat fue rematado con su propia navaja, y Casals, alias Tona, murió el domingo 6 de octubre del mismo año, por la acción de la misma patrulla, cerca de Granollers.

 

Fuentes y bibl.: Información aportada por J. Florensa Jaumandreu, Barcelona.

J. Ortega y Espinós, Historia de las Escuadras de Cataluña. Su origen, sus proezas, sus vicisitudes, intercalada con la vida y hechos de los más célebres ladrones y bandoleros, Madrid-Barcelona, Imprenta de Luis de Tasso, 1859; L. Alonso Tejada, Gente de trabuco, Barcelona, Bruguera, 1976.

 

Fernando Gómez del Val