Muntanyás y Berard, Jaime. Manacor, Mallorca (Islas Baleares), 1493 – Valencia, 14.III.1556. Jurista, regente de la Cancillería en Cerdeña y Valencia.
Miembro de una destacada familia de juristas del Reino de Mallorca. Su abuelo paterno, Jaime Muntanyás y Morey, se doctoró en Derecho en la Universidad de Pisa en 1480 y fue uno de los protagonistas indiscutibles de la política mallorquina en la época de Juan II y Fernando el Católico. Su padre, Nicolás Muntanyás y Verí —primogénito del antes citado—, también cursó estudios de Derecho y obtuvo los grados correspondientes en Pisa; su cursus honorum, iniciado en la administración mallorquina, quedó truncado por su temprana muerte. Jaime Muntanyás y Berard era también sobrino-nieto de Tomás Malferit, uno de los regentes fundadores del Consejo de Aragón en 1494, que llegó a ser vicecanciller de dicha Corona; éste había contraído matrimonio con Juana Muntanyás y Morey, hermana del abuelo de nuestro jurista. A su vez, su abuelo materno, Jaime Berad, fue también un destacado jurista y propietario mallorquín.
Abrazó inicialmente el estado eclesiástico, que luego abandonaría. Recibió la tonsura en 1500 y era beneficiado de la Catedral de Palma en 1512. Estudió en las Universidades de Bolonia y Pisa; en esta última se doctoró en Derecho en 1519 siguiendo los pasos de sus mayores. Impartió docencia en Pisa durante un breve período, tras obtener sus grados. De regreso a Mallorca desempeñó diversos cargos reservados a juristas en la administración municipal y en los tribunales reales de la capital; fue abogado del obispo y del Cabildo de Mallorca y asesor jurídico de importantes familias aristocráticas de la isla. También actuó como consejero del Tribunal de Inquisición. Fue un destacado antiagermanado y formó parte de la expedición que acudió a la isla con la escuadra real para sofocar la rebelión en octubre de 1522. Tras la Germanía fue jurado por el estamento de los ciudadanos en 1523 y 1524; asesor del batle en 1524, del veguer de fora y clavario ejecutor en 1525; consejero por el estamento ciudadano en 1528, 1529 y 1533. En 1541 fue uno de los portadores del palio que cubrió al Emperador en su visita a Mallorca; para entonces ya era caballero.
Como miembro del estamento militar fue electo jurat en cap de la ciudad de Mallorca en 1545.
A mediados del siglo XVI comenzó su proyección en la administración de la Corona de Aragón. Carlos I le nombró regente de la Cancillería de Cerdeña en 1551 y lo promovió a la de Valencia en 1554. En este destino sucedió al catalán Jaime Clauses y Sesvilles y coincidió con el visitador real Diego de Córdoba al que sustituyó ocasionalmente durante sus ausencias en la fase final de la visita que se había iniciado en 1554.
En la capital valenciana terminó su vida y su carrera administrativa el 14 de marzo de 1556.
Obras de ~: Disputatio de armis clericorum et religiosorum non minus elegans quam subtilis edita a circunspecto milite et clarisimo utriusque iuris doctore domino Jacobo Montañans Majoricensi, Valencia, 1535.
Bibl.: T. Canet Aparisi, La magistratura valenciana (s. XVIXVII), Valencia, Universidad, Publicaciones del Departamento de Historia Moderna, 1990, págs. 48, 57 y 159; J. Juan Vidal, “Servidores a la monarquía en Mallorca, Cerdeña y Valencia: los Montanyás”, en Sardegna, Spagna e Stati italiani nell’età di Carlo V, Roma, Carocci Editore, 2001, págs. 394-396; “Entre la Visita y la sucesión. La resistencia a la virreinalización administrativa en Valencia entre Carlos V y Felipe II”, en Estudis, 28 (2002), págs. 222-236.
Teresa Canet Aparisi
