Navarro Burena, Agustín. ?, p. m. s. XVII – 22.X.1656. Magistrado aragonés, regente del Consejo Supremo de la Corona de Aragón.
Accedió al Consejo de Aragón en enero de 1653 (Decreto de 9 de enero), pero en plaza supernumeraria, pues en ese momento estaban ocupadas las dos plazas de “provinciales” del Reino de Aragón. No hay constancia de su carrera anterior ni de los motivos positivos para su incorporación al Consejo. Lo cierto es que unos años antes el Consejo había dictaminado negativamente, como candidato para suceder a Jacinto Valonga, alegando que no tenía noticias suyas, “ni se sabe que haya platicado en este Reyno” (consulta del 31 de agosto de 1644). Cuando entró en el Consejo, tampoco lo hizo con buen pie, pues tras haber sido provisto en la regencia, el hecho de haber en esa fecha dos letrados aragoneses en el Consejo, Castellot y Marta, sin contar con el vicecanciller Bayetola, convertía su plaza en supernumeraria. Navarro pidió que le fuera concedida plaza de regente ordinaria en la primera vacante que se produjera, lo cual fue confirmado por el Consejo de Aragón, aparentemente sin demasiado entusiasmo, en consulta de 7 de diciembre de 1654, en la que quedó previsto que accediera a la vacante que dejaría Miguel Castellot cuando fuera nombrado, como estaba previsto, justicia. Navarro estaba preocupado por su antigüedad y derechos, para lo que reclamaba que se contara desde la fecha del juramento. El problema es que era discutible que dicho juramento se hubiera producido antes de esa fecha, pues no consta por el mejor informador sobre este tipo de actos, el regente Pedro de Villacampa (consulta del 7 de diciembre de 1654) ni en la información que proporciona Cristóbal Crespí en la Admonitio ad Lectores Curiosos con la que introduce sus Observationes y en la que se afirma que Navarro juró como regente el 5 de julio de 1655. Así pues, esa es la fecha auténtica de su incorporación al Consejo. El citado Crespí describe los últimos días de Navarro, a fines de octubre de 1656, pues fue a visitarle después de que hubiera recibido el viático. Cuenta que le vio con muy buena salud después de haberse ausentado el miércoles anterior. Pero pudo comprobar que Navarro estaba “enajenado”, pues ni siquiera le conoció. Murió a las nueve de la noche del 23 de octubre de 1656 y al día siguiente se conoció la muerte y se dio cuenta de la misma al Rey. Dudó Crespí sobre si debía asistir al entierro “porque ningun presidente va a los entierros en el de Castilla”. Finalmente optó por acudir a las exequias, celebradas en la iglesia de los carmelitas descalzos de la calle de Alcalá. Su plaza de regente aragonés en el Consejo pasó a ocuparla José del Pueyo. Crespí describe la pugna entre su candidato preferido, Antonio Ferrer, casado con una sobrina suya, y el que apoyaba Luis de Haro, Francisco de Borja. Finalmente ganó Pueyo (nombramiento decidido en consulta de 23 de noviembre de 1656), que era en ese momento alcalde de Casa y Corte.
Fuentes y bibl.: Archivo de la Corona de Aragón, Consejo de Aragón, legs. 131 y 138; Biblioteca Nacional de España, ms. 5742, fol. 152v., lunes, 23 de octubre; fol. 160v., 22 de diciembre de 1656; fol. 160v.; Archivo Histórico Nacional, Consejos Suprimidos, 2029, Libro de Resoluciones y Ceremonias del Consejo de Aragón, fol. 57r.
J. Arrieta Alberdi, El Consejo Supremo de la Corona de Aragón, 1494-1707, Zaragoza, Institución Fernando el Católico, 1994.
Jon Arrieta Alberdi