Quevedo, Antonio. Manzanares el Real (Madrid), 18.III.1888 – La Habana (Cuba), 3.II.1977. Crítico, promotor y profesor.
Inició los estudios musicales con su madre, que era profesora de Piano. Concluyó los estudios universitarios de Ingeniería, pero abandonó esta profesión para dedicarse a la música. En el ambiente musical madrileño conoció al músico cubano Amadeo Roldán, al que le unió una profunda amistad, y también a María Muñoz, que después fue su esposa. El matrimonio llegó a Cuba a bordo del buque Antonio López, que arribó al puerto de La Habana el 6 de octubre de 1919. Se establecieron definitivamente en Cuba y a partir de entonces Antonio Quevedo desarrolló una intensa labor en diferentes campos de la música: fundó, junto a María Muñoz, el Conservatorio Bach (1922), en el cual trabajó como profesor; fue sustentador y difusor de la Sociedad Coral de La Habana, y ambos crearon, en 1928, Musicalia, considerada una de las mejores revistas musicales de toda América, donde escribió numerosos artículos. Junto a su esposa, el compositor cubano Alejandro García Caturla y otro grupo de artistas fundó en 1929 la Sociedad de Música Contemporánea.
Estuvo estrechamente ligado a la Sociedad Pro-Arte Musical, colaborando en diversas publicaciones periódicas como crítico y ensayista. Destaca la sección discográfica que estaba bajo su cuidado en el Diario de la Marina, y su columna de crítica en el periódico Información, que mantuvo durante muchos años. Su trabajo como promotor se hizo presente también en otros medios de difusión. En la radio cubana, en la emisora CMBF, dedicada a la música culta, escribió y dirigió varios programas, entre ellos el espacio titulado La música que no se escucha en los conciertos, con comentarios a su cargo; también escribió libretos para la televisión y notas al programa de la Orquesta Filarmónica de La Habana.
En el hogar de los Quevedo se daban cita destacados intelectuales tanto cubanos como extranjeros; entre estos últimos pueden citarse al musicólogo y compositor Adolfo Salazar y a los poetas Rafael Alberti y Federico García Lorca (varias fuentes refieren que Antonio Quevedo escribió un libro sobre la visita de Lorca a Cuba con el título El poeta en La Habana, publicación que no ha sido localizada). También participaban en esas tertulias artístico-literarias los entonces jóvenes integrantes del Grupo de Renovación Musical fundado por José Ardévol, y se llevaban a cabo en su casa las primeras audiciones de muchas de sus obras. Hasta su fallecimiento, Antonio Quevedo trabajó como asesor del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT).
Obras de ~: “Manuel de Falla en París”, en Musicalia, 1 (mayo-junio de 1928), págs. 11-15; “Harry Tauber o El arte de vestir la música”, en Musicalia, 7 (julio-agosto de 1929), págs. 18-22; “Fin de semana en el infierno. Fantasía sobre un tema gregoriano”, en Musicalia, 1, 2.ª época (noviembrediciembre de 1940), págs. 11-15; “La crisis del silencio”, en Musicalia, 5, 2.ª época (noviembre-diciembre de 1941), págs. 18-21; “Del Río Grande al Plata. Un viaje de pesca con N. Slonimsky”, en Musicalia, 11, 2.ª época (enero-marzo de 1946), págs. 8-12.
Bibl.: E. Martín, Panorama histórico de la música en Cuba, La Habana, Universidad, Cuadernos de Extensión Universitaria, 1971; M. A. Henríquez, Alejandro García Caturla, La Habana, Ediciones Unión, 1998; Z. Gómez García, “Quevedo, Antonio”, en E. Casares Rodicio (dir. y coord.), Diccionario de la música española e hispanoamericana, vol. VIII, Madrid, Sociedad General de Autores y Editores, 2001, págs. 1041-1042.
Victoria Eli Rodríguez