Solís y Valenzuela, Pedro Félix. Bogotá (Colombia), 10.V.1624 – 27.VII.1711. Sacerdote, poeta y escritor bogotano.
Hijo menor del médico Pedro Solís Valenzuela, y de Juana Vásquez de Solís, y hermano de Fernando Fernández de Valenzuela, desde muy joven buscó seguir los pasos de su hermano en el aspecto religioso, así como de sus hermanas Feliciana y María, quienes adoptaron los hábitos como monjas clarisas. Muy joven, acompañó a su hermano en peregrinación al Convento del Santo Ecce Homo y sus alrededores, lo cual le servirá posteriormente como tema para el más importante de sus escritos.
Pedro realizó estudios de primeras letras y bachillerato en el Colegio-Seminario de San Bartolomé, regido por los jesuitas, hasta el año de 1639, obteniendo el grado correspondiente en 1640. En 1646 escribe el Panegírico Sagrado, en honor a san Bruno, a instancias de su hermano Fernando, entonces en clausura en el Convento del Paular de Segovia. En la edición efectuada en Madrid (1647) se dice que el autor es “Notario del Santo Oficio de la Inquisición en la noble y muy leal ciudad de Santafé de Bogotá”.
Como sacerdote, ungido alrededor de 1649, prestó servicios religiosos en diferentes capellanías entre las que se cuentan Usaquén, Tocaima, Soacha, Anolaima, Monserrate y otras. Los viajes a los distintos municipios y regiones lo llevaron a emprender negocios de tierras, así como la explotación de una mina de esmeraldas en Somondoco (Boyacá), en la cordillera oriental de los Andes. Años más tarde donó las riquezas y bienes obtenidos a las comunidades religiosas de las cuales había hecho parte.
Fernando fue uno de los fundadores de la ermita de Monserrate, y con el mismo espíritu su hermano Pedro participó en la creación de la congregación de ermitaños llamada la Hermandad de la Santa Cruz, ubicada en la capilla edificada en el cerro de Monserrate, junto con Bernardino de Roxas y otros frailes. Pedro mandó hacer a su costa la imagen de Nuestra Señora de Monserrate, con el título de Santa María de Monserrate.
A este mismo convento donó una biblioteca de más de trescientos volúmenes, cifra nada despreciable para la época, así como estatuas y cuadros de temas sacros.
Su escritura data del 18 de junio de 1653.
Su obra más importante, El desierto prodigioso, prodigio del desierto, fue escrita alrededor de 1650, y su manuscrito permaneció inédito hasta su publicación en el siglo xx, por parte del Instituto Caro y Cuervo, en 1977. En este libro se incluyen relatos, poemas místicos y piezas de teatro, mezclando los géneros narrativos, líricos y dramáticos, en una obra que se considera la primera novela escrita en Colombia.
La mayor parte de los personajes del relato son reales, familiares y conocidos de Pedro, como sus propios padre y hermano, Pedro y Fernando, fray Andrés de san Nicolás (1617-1666), el pintor Antonio Acero de la Cruz (1596-1667), y fray Juan del Rosario, colaborador de fray Cristóbal de Torres en la fundación y primeras actividades del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario (1653).
En su testamento, fechado en 1693, nombra a la Virgen Santísima de Monserrate “heredera universal de sus bienes”.
Obras de ~: El panal de Sansón (texto mencionado en el Panegírico Sagrado); La vida de una religiosa (biografía de sor Ana de san Antonio, mencionada en el Epítome); La Fénix Cartujana, (de la cual se imprimen en Madrid los dos primeros cantos en 1647 y que trata de la vida del patriarca san Bruno), Panegírico Sagrado (escrito a instancias de su hermano fray Bruno); El desierto prodigioso, prodigio del desierto, Bogotá, Instituto Caro y Cuervo, 1977.
Bibl.: M. Briceño Jáuregui, SJ, Estudio histórico-crítico de El desierto prodigioso, prodigio del desierto, de don Pedro de Solís y Valenzuela, Bogotá, Instituto Caro y Cuervo, 1983; El Desierto Prodigioso, texto del manuscrito de Hierbabuena, notas de J. Páramo Pomareda y R. Páez Patiño, Bogotá, Instituto Caro y Cuervo, 1985; C. José Reyes, “Los Solís de Valenzuela y la cultura en el Nuevo Reino de Granada en el Siglo xvii”, en Studia colombiana, Revista de la Universidad de Salamanca, Centro Cultural de Bogotá, 2003, págs. 96-118, n.º 2.
Carlos José Reyes Posada