Reyes, Melchor de los. Granada, p. m. s. XVI – México, 1593. Agustino (OSA), poeta, misionero y teólogo consultor del III concilio de México.
En el Convento San Agustín de Granada suponen los biógrafos que realizó la profesión religiosa Melchor de los Reyes. En las universidades de Sevilla y Alcalá de Henares (Madrid) cursó los estudios de Artes y Teología.
De la Orden agustiniana recibió el grado de lector en Teología. Luego pasó al convento de Sevilla donde fue profesor, al tiempo que se ejercitaba en el ministerio pastoral como predicador de la palabra de Dios.
Antes de 1563 pasó a Nueva España, pues en esta fecha ya figura entre los capitulares de la provincia de México, cuyo capítulo celebraban en Epazoyucan. En esta asamblea aparece entre los agustinos confesores en idioma otomí. Poco tiempo después cambió el trabajo evangelizador entre los indios otomíes por la enseñanza de la Teología en la Universidad de México.
En efecto, el 26 de abril de 1571 presentó a la Universidad de México desde el convento de México, una estancia para recibir el grado de Bachiller en Teología, que recibió del maestro Martín de Perea. Por entonces ya llevaba Melchor de los Reyes casi siete años de lector de Teología, si se tiene presente el tiempo que ejerció la docencia en el convento de Sevilla y en el Convento San Agustín de México.
Cuatro actos públicos defendió con anterioridad a recibir el grado de licenciado. Tres de ellos en el Convento San Agustín de la ciudad de México (8 de mayo de 1569, 1 y 3 de mayo de 1571), y otro en la Facultad de Teología de la Universidad de México, sin que conozcamos la fecha, si bien lo realizó entre el primero y segundo acto. Por su parte, el prior general de la Orden agustiniana le concedió el 26 de agosto de 1569 licencia para que se graduase de maestro en la Universidad.
Una vez superado el respectivo examen, que tuvo lugar el 18 de mayo de 1571, alcanzó el grado de licenciado en Teología por la Universidad de México.
En esta Universidad regentó la Cátedra de Vísperas de Teología, adjudicada el 26 de junio de 1572, y posteriormente catedrático de Biblica, desde el 28 de enero de 1587 hasta julio de 1593. Por sus aulas desfilaron durante los veintiún años de docencia universitaria los principales personajes que posteriormente se encargarían de dirigir los destinos de México. A la muerte de Legazpi (Manila, 20 de agosto de 1572), su hijo Melchor López de Legazpi le preparó en la ciudad de México unas exequias, celebradas en la iglesia San Agustín, y en donde Melchor de los Reyes tuvo una solemnísima oración fúnebre.
Dos veces fue prior del convento de México (1578- 1581; 1587-1589); en cuatro ocasiones definidor provincial (1578, 1581, 1587 y 1590). Estando de prior del Convento San Agustín de México, al fallecimiento del impresor Antonio de Espinosa (muerto en 1576), cuyo taller tipográfico se encontraba adosado a la iglesia San Agustín, compró la propiedad para la Orden agustiniana. Del primer semestre de 1579 se conserva la minuta justificativa de los gastos de mano de obra y materiales empleados en la construcción de la iglesia San Agustín de México, y que ascendieron a 4500 quinientos pesos de oro, entregados por la Hacienda Real a los agustinos. De la Hacienda Real recibió el prior Melchor de los Reyes, entre 1576 y 1581, la cantidad de 81.229 reales de oro, para continuar con la edificación de la iglesia y Convento San Agustín.
En calidad de teólogo consultor asistió al III concilio de México (1585). En él se trataron diferentes temas, entre los que destaca el llamado “repartimiento”, esto es, la distribución de los indios entre los españoles como recursos de trabajo. Las órdenes religiosas presentes en Nueva España (franciscanos, dominicos y agustinos), intentaron buscar una solución que evitase los abusos y toda una serie de consecuencias negativas aplicadas en el trabajo de los indios que estaban al servicio de los españoles. Con el fin de ofrecer una respuesta al concilio, se encargó a Melchor de los Reyes que contactase con los otros consultores y preparasen una respuesta, un “parecer concorde” consensuado entre todos los consultores. La respuesta fue entregada el sábado, día 11 de mayo de 1585, rubricada por Pedro de Pravia, dominico; Juan de la Plaza, jesuita; Alonso Ponce, franciscano; Pedro de San Sebastián, franciscano, y el doctor Hernando Ortiz de Hinojosa. El “parecer concorde” presenta, a modo de sumario, doce puntos de condena de los repartimientos y cuatro proposiciones en defensa de los derechos de los indios, con el fin de que se corrigiesen las injusticias que afectaban a la dignidad y evangelización de los indios. El texto completo fue leído por Juan de la Plaza, jesuita, en presencia de todos los consultores, a los miembros del concilio provincial de México el 18 de mayo de 1585.
El cronista e historiador Grijalva dijo de Melchor de los Reyes que era elocuentísimo en la lengua latina y que poseía singular gracia en la poesía, para añadir “hoy son sus escritos tan agudos, tan vivos, tan galanos, que no nos queda más que desear, porque a la erudición antigua juntó lo más culto de nuestros tiempos”. Sin embargo, la poesía y escritos teológicos de Melchor de los Reyes se han perdido. Tan sólo se conservan las aprobaciones a dos obras; una de Pedro de Agurto (Tractado de que se deven [sic] administrar los sacramentos de la Sancta Eucharistia y Extremaunction a los indios de esta Nueva España, México, 1573), y la segunda de Juan de la Cruz (Doctrina Christiana en la lengua guasteca con la lengua castellana, México, 1571), aprobación en lo que corresponde a la lengua castellana, puesto que Melchor de los Reyes desconocía la lengua guasteca.
Obras de ~: “Aprobación”, en J. de la Cruz, Doctrina Christiana en la lengua guasteca con la lengua castellana. La guasteca corresponde a cada palabra de guasteco, según que se pudo tolerar en la frasis de la lengua guasteca, México, Imprenta Pedro Ocharte, 1571; “Aprobación”, en P. de Agurto, Tractado de que se deven administrar los sacramentos de la Sancta Eucharistia y Extremaunction a los indios de esta Nueva España, México, Imprenta Antonio de Spinosa, 1573.
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Rafael Lazcano González
