Nagusía, José Faustino de. Bilbao (Vizcaya), 1800 – c. 1852. Arquitecto.
Nació en Bilbao, pero cursó sus estudios de arquitectura en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, donde se conservan magníficos dibujos de su etapa de formación fechados en el año 1825. Siendo ya académico de mérito, dedicó al infante Carlos María Isidro una disertación titulada Los Caminos Reales y sus puentes (1827).
La urgente necesidad de arquitectos en Navarra para organizar festejos y monumentos con motivo de la llegada de los Reyes, llevó a la Diputación a encargar en 1828 a Nagusía, todavía residente en Madrid, el diseño de un obelisco que se levantaría a la entrada del reino (venta de la Bardena) para recibir a Sus Majestades. Un año más tarde fue nombrado director de Caminos y Canales del reino de Navarra, cargo que desempeñó con gran celo, encargándose de reparar los caminos existentes, concluyendo los de Logroño y Sangüesa que estaban iniciados y formando un plan de caminos de travesía para comunicar mejor todas las zonas de la provincia. Asimismo, construyó nuevos caminos a Álava y a Francia. El primero se trazó por el valle de la Burunda (1830), con un recorrido de 126.436 pies castellanos y dos puentes en Arruazu y Echarren. La comunicación con Francia era muy ventajosa, pues permitiría sacar los productos agrícolas navarros, además de las lanas de Aragón y las magníficas maderas del bosque del Irati; en ese momento existían dos veredas antiguas, estrechas y llenas de barro que hacían muy difícil el paso, y Nagusía propuso la ruta por Roncesvalles (1834) como la más idónea por ser el camino más corto.
Esta actividad la compaginó con otras obras de edificios públicos en Pamplona. En 1830 formó proyecto para el Teatro Principal, que debía levantarse en la plaza del Castillo como un edificio independiente de planta rectangular, flanqueado por dos grandes bloques de viviendas; su traza desarrolla la nueva tipología teatral y la monumental fachada, de arquitectura clasicista en la línea de Silvestre Pérez, conformó un frente homogéneo para la citada plaza, en cuyo centro se alzaba el teatro con un pórtico jónico en la planta noble. De este ambicioso proyecto sólo se realizó el teatro. En el mismo año proyectó la primera plaza de toros circular para la ciudad.
Trabajó también con el prestigioso arquitecto Ugartemendía en el proyecto para una nueva inclusa (1832) junto al palacio de los virreyes, pero, dada la envergadura del edificio, no llegó a realizarse por falta de medios.
En la década de 1840 realizó su obra más importante, el palacio provincial o de la Diputación de Navarra en el solar contiguo al teatro, cuya fachada continuaba con soportales bajos y dos plantas superiores. Sin embargo, la principal se abrió al paseo de la Taconera, siguiendo la tipología de cuerpo basamental y pórtico hexástilo superior rematado por frontón triangular, dentro de un clasicismo severo, como correspondía al principal edificio público de la ciudad.
Bastantes años más tarde, en 1852, por encargo del Gobierno Civil de Navarra, trazó los planos para la construcción de la nueva Casa de Correos y de Aduanas que se levantó al otro lado del teatro. Nagusía diseñó una fachada simétrica al palacio, con lo que finalmente se conseguiría un frente magnífico y homogéneo para la plaza del Castillo, un buen ejemplo tardío del neoclasicismo fernandino.
De forma muy puntual intervino también en arquitectura privada, formando el proyecto (1830) para una casa de nueva planta en la calle del Carmen de Pamplona.
Recibió también encargos de otros ayuntamientos, como el de Tudela, para el que proyectó una nueva plaza de toros (1842), que seguía muy de cerca el diseño de la de Pamplona. También corrió a su cargo la canalización de aguas de la ciudad de Tafalla (1846) y la fuente que se instaló en la plaza principal.
Durante sus años de actividad (1830-1850) fue el arquitecto de mayor prestigio en Navarra, recibiendo encargos del Ayuntamiento, la Diputación y del Gobierno. Gozó de una buena posición social, siendo miembro de la Sociedad Económica de Amigos del País.
Su variadísima obra es un magnífico exponente de la arquitectura clasicista en Navarra, que se identifica con la figura de Nagusía.
Obras de ~: Obelisco conmemorativo, Bardena, 1828; Camino de Navarra a Álava, 1830; Teatro Principal, Pamplona, 1830; Plaza de Toros, Pamplona, 1830; Proyecto de la Inclusa, Pamplona, 1832; Camino de Navarra a Francia, 1834; Palacio provincial de Navarra, Pamplona, 1840; Plaza de toros, Tudela, 1842; Canalización de aguas del término de Balgorra a Tafalla, 1844-1846; Casa de Correos y Aduanas, Pamplona, 1852.
Bibl.: M. Larumbe, El Academicismo y la Arquitectura del siglo xix en Navarra, Pamplona, Gobierno de Navarra, 1990.
María Larumbe Martín
