Madariaga, Pedro de. Dima (Vizcaya), c. 1537 – ¿Valencia?, ú. t. s. xvi. Calígrafo, militar y maestro.
El vizcaíno Pedro de Madariaga fue uno de los principales calígrafos del siglo xvi, junto a su maestro Juan de Icíar y al sevillano Francisco Lucas.
De linaje noble, nació en la cofradía de Oba, una de las ocho en que estaba dividido el pueblo de Dima (en la comarca de Arratia), alrededor de 1537. Desde pequeño se sintió inclinado hacia las humanidades, siendo un buen estudiante. Ya joven dejó el País Vasco y, alistado en el Ejército, viajó por Italia (Milán, Génova, Roma, etc.). Cuando regresó a España, residió cierto tiempo en Zaragoza, donde perfeccionó su escritura al lado de Juan de Icíar. Más tarde pasó a Valencia, ciudad en la que enseñaba a escribir en 1562 en un aula de la Universidad. Luego fundó allí la cátedra de Caligrafía y Ortografía.
Poco después, en 1565, deseoso de someter a reglas científicas la escritura, publicó, en forma dialogada, la obra por la que ha pasado a formar parte de la historia: Honra de escribanos. En 1777 Francisco Javier de Santiago y Palomares encargó una nueva reimpresión, pero el editor, además de variar el título, modificó la morfología de los caracteres creados por Madariaga.
El ejemplar está dividido en tres partes: la primera trata sobre la necesidad de saber escribir; la segunda contiene instrucciones para el mejor trazado de la escritura; y la última versa sobre ortografía.
Supuestamente, este célebre calígrafo falleció en tierras valencianas durante el último tercio de la centuria decimosexta.
Además de ampliar la doctrina teórica que había compendiado Icíar en su Subtilísima recopilación, Pedro de Madariaga tiene el mérito de haber sido el pionero en analizar la letra española explicando su hechura. Su sistema, que permitía ahorrar tiempo en la ejecución de los trazos, consistía en reducir todas las letras en su forma y elementos a un triángulo escaleno, por lo que tuvo que acomodarlas a esta figura y, por ende, desfigurarlas. Por esta razón, algunos autores le juzgan como un calígrafo mediocre. Madariaga era partidario de la libertad absoluta de la escritura.
Otra consecuencia de su procedimiento escriturario era la brevedad en aprender a escribir, obsesión compartida por muchos calígrafos, pues de este modo conseguían incrementar el número de alumnos.
Obras de ~: Libro subtilíssimo intitulado Honrra de escrivanos, Valencia, Juan de Mey, 1565; Arte de escribir, ortografía de la pluma y honra de los profesores de este magisterio. Obra dividida en XII diálogos eruditos. En que además de la amenidad de noticias, se manifiestan los verdaderos principios que deben tener todos los maestros, y se da un modo muy fácil para aprender a formar las letras en poco tiempo, Madrid, Antonio de Sancha, 1777.
Fuentes y bibl.: Biblioteca Nacional de España, mss. 1/4976 y 2/16221.
V. Ximeno, Escritores del reyno de Valencia, chronológicamente ordenados desde el año MCCXXXVIII de la christiana conquista de la misma ciudad, hasta el de MDCCXLVII, vol. I, Valencia, José Esteban Dolz, 1748, pág. 280; M. Rico y Sinobas, Diccionario de calígrafos españoles, Madrid, Real Academia Española, 1903, pág. 243; E. Cotarelo y Mori, Diccionario biográfico y bibliográfico de calígrafos españoles, Madrid, Tipografía de la Revista de Archivos, Bibliotecas y Museos, 1914-1916 (t. II, Madrid, Visor Libros, 2004, págs. 6-12); R. Blanco y Sánchez, Arte de la escritura y la caligrafía, Madrid, Perlado, Páez y Cía., 1920 (6.ª ed.), págs. 223-224; M. Barona Cherp, Historia de la escritura y de la caligrafía española, Gerona, Antonio Franquet Gusiñe, 1926 (2.ª ed. corr. y aum.), págs. 103-104; L. de Aquesolo Olivares, “Pedro de Madariaga, calígrafo y vascófilo”, en Boletín de la Real Sociedad Vascongada de los Amigos del País, 21-1 (1966), págs. 37-50; L. de Akesolo Olivares, “Pedro de Madariaga, kaligrafoa gramatikalari ere bai: modi loquendi latino et hispano sermone idatzi zuen 1581-1582n”, en Revista Internacional de los Estudios Vascos, 31-3 (1986), págs. 847-851; M. Maquieira Rodríguez, “Correlación modal español-latín en los ‘modi loquendi latino et hispano sermone’, de Pedro de Madariaga”, en Estudios Humanísticos, 10 (1988), págs. 107-122.
Juan Carlos Galende Díaz