Irizar Ubillos, Pedro. Vergara (Guipúzcoa), 16.VI.1830 – ?, f. s. XIX-p. s. XX. Político.
Fue hijo de Joaquín Irizar Moya, natural de Vergara (Guipúzcoa), y de Casilda Ubillos Aizpuru, natural de Ordicia (Guipúzcoa). Tuvo por abuelos paternos a José Manuel Irizar y a Marina Moya, vecinos de Vergara, y los maternos fueron José Antonio Ubillos y Josefa Antonia Aizpuru, vecinos de Ordicia.
Estudió tres cursos de Filosofía, de 1842 a 1845, en el instituto de segunda enseñanza de su localidad natal. Este último año accedió a la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad de Valladolid, obtuvo el grado de bachiller el 8 de junio de 1849. El 4 de julio de 1852, previo examen teórico-práctico, le fue expedido el título de licenciado en Jurisprudencia.
Durante el año académico de 1852-1853 realizó el 8.º curso en la Universidad Central de Madrid, que superó con sobresaliente. El 7 de febrero de 1854 alcanzó el doctorado en Jurisprudencia. Asimismo, se dedicó al conocimiento de la Sagrada Teología.
Pedro Irizar desempeñó el cargo de diputado general adjunto 2.º de Guipúzcoa en 1857, de adjunto 1.º en 1859 y de 4.º partido en 1863. Fue elegido diputado a Cortes por el distrito guipuzcoano de Tolosa en las elecciones generales de noviembre de 1864. Participó en el Congreso en la comisión de Peticiones y en la de Protocolo por el cumpleaños del Rey. En abril de 1875 fue nombrado gobernador de dicha provincia, funciones que le ocuparon hasta finalizar el mes de septiembre del mencionado año.
Ideológicamente, derivó desde los postulados carlistas hasta el reconocimiento del rey Alfonso XII. En la campaña electoral de 1864 se declaró enemigo del liberalismo, manifestando repetidamente la incompatibilidad de ser católico y liberal a la vez. Afín a los principios de don Carlos, manifestó alegrarse ante el supuesto triunfo del pretendiente más que muchos que se declaraban carlistas. Siendo gobernador de Guipúzcoa, se le achacó el sustentar “el gobierno liberal librecultista de D. Alfonso”. En su manifiesto del 17 de mayo de 1875 dio muestras de reconocimiento hacia la persona de Alfonso XII, realizó un llamamiento al fin de las hostilidades bélicas y transmitió la esperanza de que fueran reconocidos y conservados los Fueros de las provincias vascongadas con la entronización de don Alfonso. “Mirad, que nada ni nadie gana en la prolongación de la lucha. El entronizamiento del Señor Don Alfonso es un hecho, que no podéis destruir. El mal ó el bien, se ha de hacer siendo Rey Don Alfonso XII: hagamos, pues, todos el bien: Basta ya de una lucha sin utilidad ni provecho, ni esperanza razonable de triunfo. ¡Viva la Religión! ¡Viva Don Alfonso XII! ¡Vivan los fueros, buenos usos y costumbres del País vascongado!”.
Heredó de su madre, fallecida el 15 de mayo de 1858, propiedades en la villa de Andoain (Guipúzcoa): la casería de Ubillos, la de Orcerioca, la de Isturizaga- Chiqui, la de Asindegui, la de Aldacaiz, la de Idiazábal-Chiqui y el montazgo de Ubillos. Poseía además fincas en otros puntos de Guipúzcoa.
Obras de ~: Guipuzcoanos [...], San Sebastián 17 de Mayo de 1875. El Gobernador Pedro de Irizar, [Boletín Oficial Extraordinario del lunes 17 de mayo de 1875. A.G.G. F. D. Mandas].
Bibl.: J. Agirreazkuenaga, S. Serrano, J. R. Urquijo y M. Urquijo, Diccionario Biográfico de los Parlamentarios de Vasconia (1808-1876), Vitoria-Gasteiz, Parlamento Vasco, 1993.
Susana Serrano Abad
