Rocamora, Joseph. Callosa de Segura (Alicante), c. 1670 – Alicante, c. 1755. Organero.
La primera noticia que tenemos de este factor, hermano de Francisco y, presumiblemente, menor que él, nos lleva al 14 de octubre de 1725 cuando, en compañía de su otro hermano Pedro, ambos ya maestros de hacer órganos y vecinos de Alicante, comparecieron formalmente como albaceas de su difunto padre Francisco para vender unos higuerales situados en el camino de Monforte (Alicante) al puerto marítimo, según las órdenes dictadas por éste ante el escribano de esa villa Joseph Llopis,
Diez años más tarde, reaparecerá en Guardamar (Alicante) para ajustar con el fabriquero la incorporación de la trompetería horizontal de fachada por 60 libras. Desde ese momento y, al menos hasta 1742, quedará vinculado al instrumento en anuales sesiones de aderezo y afinación por la cuantía de 1 cahíz y 6 barchillas de trigo.
En 1737, aprovechando la reforma de la parroquial de Novelda (Alicante), contrató con su hermano la ampliación del órgano que éste había construido a finales del siglo anterior; asimismo era llamado por los parroquianos de Santa María de Elche para las afinaciones. Fue esta misma parroquia la que volvió a requerir sus servicios, seis años más tarde, con el fin de trasladar el órgano al emplazamiento en el que se encuentra actualmente: el brazo del crucero que corresponde al Evangelio.
Será 1744 el año decisivo para su ingreso en la Historia. El 8 de noviembre, en subasta pública y mediante el elegante ritual de candela encendida en las puertas de la iglesia y a la puesta del sol, le quedaba adjudicada la obra del órgano de Santiago de Orihuela, un enorme instrumento de dos teclados, en el precio final de 860 libras, sin contar la caja que fue evaluada en 350 libras más. El plan, elaborado por el organista de la Catedral, preveía la conservación de los juegos del órgano antiguo, obra de Bernardo Llop, con el fin de abaratar costes. Sin embargo, el acusado escalón tímbrico entre las tuberías vieja y nueva obligó en 1746 a unificar todo el material sonoro, añadiendo 400 libras más. El conjunto se encerró en una de las más sobresalientes cajas de todo el Levante, con diseño y talla del escultor ilicitano Ignacio Castell y dorado de Juan Francisco Santacruz.
Nada se vuelve a saber de él hasta que en 1752 otorgaba carta de pago en Monforte (Alicante) por el escaso valor de 19 libras. Al año siguiente, la parroquial de Almoradí (Alicante) aceptaba una propuesta de Joseph y Francisco Rocamora, ambos de Alicante, para la construcción de un nuevo órgano y su caja por 500 libras. Es muy posible que este Francisco no fuese su hermano mayor ya que, con motivo del Catastro de Ensenada, éste aparece en 1756 viviendo ya en Murcia a la llamativa edad de 100 años. La obra quedó finalizada a finales de 1754, momento en que se borra definitivamente la figura del maestro, sin que, por el momento, se conozca la fecha exacta de su muerte.
Obras de ~: Ampliación del órgano, parroquia de Novelda (Alicante), 1742 (parcialmente conservado); órgano nuevo, parroquia de Santiago, Orihuela (Alicante), 1749 (sustituido después por otro de Matías Salanova); órgano nuevo, parroquial, Almoradí (Alicante), 1754 (desapar.).
Bibl.: A. Nieto Fernández, Orihuela en sus documentos I. La Catedral, Parroquias de Santas Justa y Rufina y Santiago, Murcia, Instituto Teológico de Murcia, 1984, págs. 413-415; M. Bernal Ripol, Catalogación y estudio de los órganos de la provincia de Alicante, Alicante, Diputación Provincial de Alicante, 1986; E. Máximo García, “El órgano de Santiago de Orihuela: un transparente sonoro”, en Imafronte (Universidad de Murcia) (2006), págs. 147-200.
Enrique Máximo García
