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Remigio Silva

Biografía

Silva, Remigio. Lima (Perú), 27.X.1782 – 20.XI.1854. Prócer de la independencia peruana.

Era hijo de Toribio Silva Marín y Manuela Castro Aranda. Durante su mocedad colaboró con su padre en sus negocios agrícolas y mercantiles. Implicado en la conspiración antirrealista promovida por su hermano Mateo, fue puesto en prisión el 26 de septiembre de 1809, y aunque se le absolvió de toda responsabilidad, fue obligado a pagar las costas del juicio.

Afectado por las consiguientes muertes de su padre y su hermano, se consagró a trabajar con ahínco por la independencia.

Al llegar a Lima el sargento mayor Domingo Torres, enviado por San Martín con el pretexto de negociar el canje de prisioneros, le hizo llegar informaciones sobre las fuerzas realistas que serían enviadas a Chile, lo cual permitió la oportuna preparación de la campaña culminada en la batalla de Maipú (1817). Desde entonces quedó encargado de cooperar a los aprestos patriotas mediante informaciones semejantes, y a ese efecto se trasladó a Huarmey. Cuando la escuadra comandada por lord Cochrane llevó a cabo su primer crucero, la condujo a Huacho y Supe, donde los habitantes la proveyeron con largueza y aun proporcionaron informes que permitieron requisar cuantiosos fondos destinados a la Real Hacienda (abril de 1819).

Para eludir la persecución realista —pues hacía tiempo que el virrey Pezuela había dictado orden de prisión contra él— se refugió en el Convento de los Descalzos del Rímac, donde permaneció seis meses.

Cuando la escuadra patriota llevó a cabo su segundo crucero, pudo embarcarse y fue calurosamente acogido por San Martín. Sus informes contribuyeron a definir los preparativos de la Expedición Libertadora.

Proclamada la independencia del Perú, fue asociado a la Orden del Sol (12 de diciembre de 1821) y se le confió la contaduría y la jefatura de la Dirección General de Tabacos (20 de febrero de 1822). Al asumir Riva Agüero la Presidencia de la República, le designó presidente del Departamento de Huaylas y le ascendió a la clase de coronel el 9 de mayo de 1823.

Leal a la autoridad de la cual emanara su nombramiento, Silva secundó las negociaciones de paz que Riva Agüero planteó a los españoles, y opuso resistencia al mandato de Bolívar. Apresado y desterrado a Guayaquil, permaneció allí en prisión durante seis meses; luego fue trasladado a Panamá y finalmente enviado a Jamaica.

Pudo volver al Perú en abril de 1828. Ejerció la prefectura del departamento de La Libertad, de 1829 a 1834, y se mudó después al pueblo de Santiago de Cao, en el valle de Chicama. Durante sus últimos años atendió un pequeño establecimiento comercial en Lima.

 

Bibl.: R. B. Silva, Tres patriotas peruanos: el coronel don Remigio Silva y sus hermanos el abogado don Mateo y doña Brígida, Callao, Imp. “El Callao”, 1921.

 

Teodoro Hampe Martínez